La autora del "crimen perfecto" que conmocionó a España ha vuelto a intentar asesinar desde prisión: esto es lo que se sabe del caso

María Ángeles Molina, conocida como Angie, ha vuelto a ser detenida tras ser acusada de preparar un nuevo asesinato desde el interior de la cárcel de Mas d’Enric, en Tarragona. La mujer ya fue condenada en 2008 por el homicidio de su compañera de trabajo, Ana Páez, en un caso que fue bautizado como el “crimen perfecto” por su escalofriante planificación.

Esta vez, la alerta saltó mientras Angie disfrutaba de un permiso penitenciario dentro del régimen de segundo grado. Los Mossos la detuvieron este lunes por la mañana, nada más salir del penal. Según fuentes citadas por La Vanguardia y confirmadas por la agencia EFE, la reclusa fue trasladada a dependencias policiales y más tarde volvió al centro penitenciario tras pasar a disposición judicial.

La nueva investigación está bajo secreto de sumario, pero todo apunta a que Angie habría intentado organizar un nuevo asesinato desde prisión, aprovechando sus permisos temporales. La hipótesis policial señala que habría contactado con personas del exterior con la supuesta intención de contratar a sicarios para ejecutar el crimen.

Según las fuentes mencionadas, tras su arresto se registraron su celda y pertenencias en busca de pruebas. La investigación está en manos de la División de Investigación Criminal (DIC) de Tarragona y supervisada por el Juzgado de Instrucción número 1 de Tarragona, que ya le ha imputado el nuevo delito de conspiración para asesinar.

Había matado a una amiga

Angie había sido condenada a 22 años, rebajados a 18 por el Supremo, por el asesinato de Ana Páez, a quien mató por asfixia tras haberle suplantado la identidad para contratar seguros de vida y préstamos por casi un millón de euros. El crimen fue planificado durante más de un año, e incluyó falsificar la escena con esperma que había obtenido previamente de dos hombres a los que pagó para ese fin.

El nuevo proceso judicial complica notablemente su situación. Su puesta en libertad estaba prevista para 2027, pero con esta nueva acusación sobre la mesa, ese horizonte se aleja. Además, se le han retirado los permisos penitenciarios y ha perdido el derecho a seguir saliendo de prisión bajo el régimen del segundo grado.

Angie, que ya fue investigada por la misteriosa muerte de su marido en 1996 en Canarias, no ha querido declarar ante la jueza en esta nueva causa. Su silencio no impide que siga avanzando un caso que vuelve a poner su nombre entre los más inquietantes de la crónica negra española.