Cuánto cuesta y qué incluye el menú elaborado por las exmonjas de Belorado en este hotel situado en este pueblo de España

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Una inesperada propuesta gastronómica ha irrumpido en la escena culinaria de España, atrayendo la curiosidad de vecinos y visitantes. No se trata de un restaurante común: en su cocina no hay chefs con estrellas Michelin ni empresarios de la hostelería, sino un grupo de mujeres que, tras un drástico cambio en sus vidas, han decidido reinventarse entre fogones.

Las exmonjas de Belorado han encontrado en la gastronomía una nueva forma de vida tras su salida del convento y excomunión. En el hotel Ribera del Chicu, ubicado en Arriondas, Asturias, han inaugurado hoy, martes, un restaurante donde combinan la tradición culinaria asturiana con su toque personal. Desde su apertura, la expectación ha sido máxima, con listas de reservas que se llenan rápidamente. El alquiler del local les costará a las exclarisas 1.600 euros al mes.

El menú que ofrecen tiene un precio de 15 euros entre semana y 18 euros los fines de semana, una propuesta accesible que ha despertado el interés de vecinos y visitantes. Los comensales pueden elegir entre fabada asturiana o paella valenciana como primer plato, mientras que de segundo se sirven opciones como carne guisada o cachopines, un clásico de la cocina asturiana. Para el postre, las religiosas han apostado por la repostería tradicional, con arroz con leche, frixuelos, crema de limón o yogur casero. Además, la comida incluye bebida, lo que convierte la oferta en una de las más atractivas de la zona.

Comida casera e iniciativas sociales

El restaurante, bautizado como Santa María del Chicu, mantiene la esencia de clausura de las exclarisas. Mientras ellas se encargan de la cocina, el servicio de sala está atendido por seglares. La acogida ha sido extraordinaria, con clientes destacando la calidad de los platos y la calidez del ambiente. Entre los primeros en probar el menú se encontraba el tiktoker asturiano Fabio Rodrigo, quien compartió su experiencia y elogió la autenticidad de los sabores.

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El proyecto también baraja la apertura de un obrador donde podrán elaborar y vender su famosa repostería, asegurando una calidad y sabor excepcionales. Esta apertura se da en un contexto complicado, ya que se está tramitando una demanda de desahucio presentada por el Arzobispo de Burgos. Así, este nuevo espacio busca mantener la actividad mientras se exploran opciones para superar esta difícil situación.

Además de esta aventura culinaria, las exmonjas han emprendido otros proyectos, como la compra de un terreno donde planean criar y entrenar perros guía en un terreno de 7.000 metros cuadrados, también comprado por las exclarisas, y se comprometen con iniciativas sociales como el acompañamiento de personas en riesgo de exclusión social y mujeres maltratadas. Con esta nueva etapa, no solo buscan su sustento, sino también demostrar que la resiliencia y la creatividad pueden abrir caminos insospechados.