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El Gobierno convierte en clandestina la reapertura de la aduana de Melilla con Marruecos
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una furgoneta con mercancías

El Gobierno convierte en clandestina la reapertura de la aduana de Melilla con Marruecos

PP, Vox y la sociedad civil de las ciudades autónomas critican la opacidad del acuerdo en gestación con Rabat para inaugurar unas aduanas con estrictas restricciones no homologables a las que la UE mantiene con países terceros

Foto: La primera furgoneta con mercancías exportadas a Marruecos desde Melilla entra este miércoles por la frontera de Beni Enzar. (Foto cedida)
La primera furgoneta con mercancías exportadas a Marruecos desde Melilla entra este miércoles por la frontera de Beni Enzar. (Foto cedida)
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Debía de haber sido una reapertura celebrada por todo lo alto, pero las autoridades españolas convirtieron en casi clandestino el primer cruce oficial de una furgoneta con mercancías exportadas desde Melilla a Marruecos desde 2018. Hacía seis años y medio que Rabat cerró esa aduana de un plumazo sin ni siquiera comunicárselo al Gobierno de España y sin que este protestara. Había estado funcionando durante siglo y medio.

Sobre las 10h. del miércoles una furgoneta entró por una estrecha puerta, por la que no hubiese cabido un camión, en Marruecos a través de la frontera de Beni Enzar. Llevaba a bordo electrodomésticos y menaje del hogar. Probablemente fue sellada al entrar, como prevé el protocolo, y trasladada al puerto más cercano para ser escaneada -los aduaneros marroquíes no disponen de ese aparato en la frontera- antes de despachar la mercancía.

La delegada del Gobierno en la ciudad, Sabrina Moh, si se desplazó a la frontera, según El Faro de Melilla, para asistir al evento y después dio una rueda de prensa en la que echó balones fuera. Ni siquiera pudo precisar cuando tendría lugar la próxima expedición ni con que regularidad se harían los envíos.

Tampoco explicó Sabrina Moh si se restablecería el régimen de viajeros, aquel que permite a los turistas llevarse de la ciudad un souvenir o a los melillenses un regalo para sus familiares en Marruecos. Rabat lo suprimió en mayo de 2022 en las fronteras terrestres con España aunque sí está vigente en sus aeropuertos y puertos. “Seguiremos trabajando sobre esta cuestión”, contestó la delegada a una pregunta. Hasta una botella de agua mineral cerrada puede ser decomisada por los aduaneros marroquíes.

Foto: Prueba piloto de la apertura de la aduana comercial de Melilla. (EFE/Delegación de Gobierno en Melilla.)

El único anuncio concreto que sí hizo la delegada es el de la apertura de un puesto de control sanitario y fitosanitario para los productos frescos (pescado, fruta y verduras) que, el día de mañana, se vuelvan a importar de Marruecos. En la lista oficial de puestos no figura ninguno en Melilla.

Una furgoneta, la primera

El cruce de la furgoneta por la frontera, el miércoles, da la impresión de ser un pequeño gesto de las autoridades marroquíes para satisfacer a las españolas con las que no acaban de alcanzar un acuerdo sobre las modalidades de reapertura de la aduana de Melilla y la inauguración de una en Ceuta. El presidente Pedro Sánchez anunció, el 7 de abril de 2022 en Rabat, el acuerdo sobre las aduanas y su ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, afirmó que entrarían en funcionamiento muy a principios de 2023.

Un documento en francés consultados por operadores comerciales en Melilla limita muy estrictamente el comercio bilateral por la aduana de la ciudad. Desde Marruecos se podrían exportar productos frescos y áridos y en sentido contrario electrodomésticos y menaje del hogar. Sabrina Moh restó importancia al documento porque “no es oficial” e insistió en que “no es verdad que haya una imposición de Marruecos”. De sus palabras se deduce, sin embargo, que la aduana que se está abriendo no guardará relación alguna con la que existió hasta 2018 en la que no había restricciones en las mercancías ni tampoco en horarios.

placeholder Sabrina Moh, la delegada del Gobierno en Ceuta (Foto: Delegación del Gobierno)
Sabrina Moh, la delegada del Gobierno en Ceuta (Foto: Delegación del Gobierno)

El problema de fondo es que las autoridades de Marruecos adquirieron, en abril de 2022, un compromiso con Sánchez, a cambio de su apoyo en el conflicto del Sáhara Occidental, que se resisten a cumplir. Abrir aduanas puede ser interpretado como un pequeño paso hacia el reconocimiento de la soberanía española sobre dos ciudades que consideran “ocupadas”. Por eso, si al final se ponen en funcionamiento, serán de mínimos. No servirán para aliviar la asfixia económica que padecen Ceuta y Melilla.

Las informaciones que han salido a la luz sobre las aduanas, sobre todo las filtradas al diario El País, han suscitado un sinfín de reacciones críticas, empezando por la del presidente de Melilla, Juan José Imbroda (PP), que se equivocó de lleno a la hora de interpretarlas. Más cauto, su correligionario de Ceuta, Juan Jesús Vias, se ha abstenido de hacer declaraciones hasta conocer el detalle del acuerdo.

Foto: Frontera del Tarajal en Ceuta. (Europa Press)

Borja Sémper, portavoz del PP, se preguntó, por su parte, el martes si Sánchez estaba también en esta ocasión pagando un peaje a Marruecos. “¿Es que alguien tiene información relevante sobre el presidente del Gobierno?”, añadió dando de nuevo a entender que el espionaje de su móvil con Pegasus podía haber proporcionado información valiosa a las autoridades del país vecino. Vox y Somos Melilla, una formación local, también arremetieron contra la nula transparencia de la delegada del Gobierno.

Las críticas también han surgido desde las patronales de empresarios de Ceuta y Melilla hasta el Colegio de Agentes de Aduanas melillense. Este se declaró en un comunicado “contra cualquier acuerdo que no suponga la plena normalización de los intercambios comerciales entre Marruecos y España con absoluta libertad comercial (...)” como sucedió hasta 2018.

La Asociación Unificada de Guardias Civiles también se manifestó denunciando un acuerdo bilateral que está “aparentemente marcado por unas condiciones impuestas por Marruecos que afectan directamente al trabajo de los guardias civiles y a la soberanía de las ciudades autónomas”. “(...) colocan a los guardias civiles en una situación de desventaja operativa frente a unas condiciones que Marruecos impone y España acepta sin cuestionar”.

Debía de haber sido una reapertura celebrada por todo lo alto, pero las autoridades españolas convirtieron en casi clandestino el primer cruce oficial de una furgoneta con mercancías exportadas desde Melilla a Marruecos desde 2018. Hacía seis años y medio que Rabat cerró esa aduana de un plumazo sin ni siquiera comunicárselo al Gobierno de España y sin que este protestara. Había estado funcionando durante siglo y medio.

Noticias de Marruecos Pedro Sánchez
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