Moncloa no ve en peligro la reforma fiscal pese al flirteo de Junts con el PP en el Senado
Dan por hecho que los de Puigdemont mantendrán el acuerdo firmado con el Gobierno y que la mayoría en torno al PSOE tumbará en el Congreso todas las enmiendas que se han aprobado en el Senado
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El Gobierno no teme por la reforma fiscal, a pesar de los cambios que el PP y Junts han aprobado en el Senado y que devuelven el texto al Congreso para su refrendo definitivo. En la Moncloa dan por supuesto que se mantiene intacto el pacto previo suscrito con los posconvergentes. "Creo que van a cumplir con nuestro acuerdo", señalan fuentes del Ejecutivo.
En medio del ejercicio de presión que Carles Puigdemont realiza estos días contra el Gobierno, Junts se ha entendido con los populares en varios asuntos. La última vez anoche, en la Cámara Alta, donde acercaron posturas para avalar juntos una serie de enmiendas que, hasta que el Congreso no las revierta este mismo jueves, quedan incorporadas a la reforma fiscal.
El PP votó a favor de dos enmiendas de Junts para eximir a los clubes deportivos profesionales del pago de las cotizaciones de trabajadores contratados para la formación de menores de edad y para extender el IVA reducido del 4% a productos básicos derivados de la leche. Y los posconvergentes se abstuvieron en todas las enmiendas de los populares.
A pesar de este flirteo, que se añade a la pinza hace unos días para suspender el impuesto sobre el valor de la producción eléctrica, el Gobierno considera que se circunscribe solo al Senado. Ellos mismos (Junts), recuerdan fuentes del Ejecutivo, han dicho que "se limita a este ámbito". Por eso, destacan, "se han abstenido" (para teóricamente luego votar en contra) de las enmiendas del PP, que es donde radica el riesgo.
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Las dos modificaciones introducidas por Junts son asumibles para el Gobierno, lo que cambia realmente la reforma fiscal son los retoques de los populares. "Esperamos que cumplan con sus compromisos", insisten desde el Ejecutivo, en referencia a su convicción de que en el Congreso los de Puigdemont tumbarán las enmiendas de los populares.
La Moncloa enmarca esta fase de entendimiento entre Junts y el PP a los intentos de Carles Puigdemont de hacerse valer cada cierto tiempo, de transmitir a su electorado que ellos no forman parte del bloque parlamentario que sostiene a Pedro Sánchez. En este propósito incardinan también la última entrevista del expresident en TV3, con nuevas amenazas al jefe del Ejecutivo.
Entienden que el primer paso de esa estrategia fue la exigencia de Puigdemont de que el presidente se someta a una cuestión de confianza, y el resto son todo nuevas réplicas, que ya "no sorprenden" al Gobierno. En el Ejecutivo piensan que este jueves reconvertirán la reforma fiscal para devolverla a su texto inicial y, por el momento, siguen confiados en que Junts votará a favor de los próximos presupuestos.
El Gobierno no teme por la reforma fiscal, a pesar de los cambios que el PP y Junts han aprobado en el Senado y que devuelven el texto al Congreso para su refrendo definitivo. En la Moncloa dan por supuesto que se mantiene intacto el pacto previo suscrito con los posconvergentes. "Creo que van a cumplir con nuestro acuerdo", señalan fuentes del Ejecutivo.