PSOE y PP creen que Sánchez puede convocar un 'supermayo' electoral en 2027 para movilizar
En las filas socialistas se especula ya con que el presidente haga coincidir las autonómicas y municipales con las generales. Es una hipótesis que también contemplan en el Partido Popular, donde asumen, con pesar, que Sánchez puede agotar su mandato
'Supermayo' en 2027 con elecciones generales, autonómicas y municipales en la misma fecha. En las filas socialistas se valora ya esta posibilidad, después del discurso de Pedro Sánchez en Sevilla en el congreso federal, en el que fijó como prioridad recuperar poder institucional. Y en el PP, fundamentalmente los barones, también lo contemplan. En la política española hacer una predicción, incluso de un día para otro, es la forma más común de equivocarse. Pero la proximidad entre las dos convocatorias, en mayo las autonómicas y municipales, y en julio, las generales, dan fuelle a ese calendario.
El presidente del Gobierno está convencido de que aguantará hasta el final de la legislatura y que no se verá obligado a abandonar por las investigaciones que cercan al Ejecutivo o a su propia familia. Este viernes, durante una conversación informal con periodistas en el Congreso, sostuvo que "el fracaso de este acoso judicial es cuestión de tiempo" y que cuando suceda habrá un efecto bumerán para el PP.
El cónclave de Sevilla supone para Sánchez la apertura de un nuevo ciclo electoral y está volcado en que el PSOE sea competitivo en 2027. Su tesis es que la operación de derribo de la derecha "mediática, judicial y política" que asegura existe contra él ha provocado una conexión entre el partido y sus militantes, que se visualizará en las próximas citas electorales. El pasado fin de semana ya reclamó responder a este "acoso" en las urnas: "quien pueda votar, que vote y vote progresista en ayuntamientos, comunidades y el Gobierno de España". Ayer volvió a repetir la idea de que los socialistas van a recuperar poder territorial y seguirán en la Moncloa. Todo en una.
Fuentes del partido avalan que el presidente pueda estar pensando en un 'supermayo', a pesar de que con Sánchez es complicado aventurar nada. "Con él todo es posible", pero es algo con lo que ya se especula internamente. Esta opción le permitiría tirar de los candidatos menos conocidos en sus territorios.
En 2021, Sánchez adelantó las generales el día después de que el PSOE perdiera seis gobiernos autonómicos. Asumió esa derrota "en primera persona". Con el paso del tiempo, el presidente entiende que su responsabilidad en esa debacle no fue tan intensa porque menos de dos meses después mejoró su marca y sumó un millón de votos más que en 2019. En definitiva, piensa que el problema no era él. Ahora, la confianza en que existe un "vínculo" entre las políticas del Ejecutivo y el electorado de izquierdas es lo que le lleva a apostar por ministros como secretarios generales en sus respectivos territorios y futuros cabezas de cartel. "Hay una empatía del votante progresista con el acoso que estamos sufriendo", aseguró ayer a los periodistas.
El horizonte en las próximas autonómicas es que se presenten hasta cuatro ministros: Ángel Víctor Torres en Canarias, Diana Morant en la Comunidad Valenciana, Óscar López en Madrid y Pilar Alegría en Aragón, si como se apunta se presenta al congreso regional. Nunca unas elecciones antes habrán sido tan genuinamente nacionales. Sánchez puede convocar las generales antes o después, pero tampoco es descartable que las haga coincidir, según valoran en el PSOE.
Y en el PP tampoco desafina esa partitura. Génova ha levantado el pie del acelerador y asume que Sánchez puede guarecerse en el Palacio de la Moncloa, incluso hasta 2027. "Depende de sus socios", apuntó Feijóo a los periodistas tras los actos del Día de la Constitución. El líder del PP no descarta que Sánchez pueda aprobar los Presupuestos de 2025 con el respaldo de Junts, lo que daría al líder socialista una enorme bocanada de aire pese a su "agenda judicial". Feijóo no quiere "tirar la toalla" con los aliados del Ejecutivo y mantendrá la presión para que reflexionen sobre "el impacto que puede producir en su electorado" apoyar a un Gobierno "acorralado por la corrupción".
No obstante, pese a que no eran precisamente sus planes cuando dio el salto de Galicia a Madrid, en el PP admiten que la temporada de Feijóo en la bancada de la oposición se puede alargar. Y ni en la dirección nacional ni entre los barones territoriales extraña precisamente la tesis de que Sánchez juegue la baza de hacer coincidir las generales con las autonómicas y municipales. "Si quiere tener una oportunidad, lo tiene que hacer", opina un presidente autonómico, que ve posible que el presidente del Gobierno se "atrinchere" hasta 2027.
"La gente está más cabreada con Sánchez que con los alcaldes o los presidentes del PSOE", apunta otro barón popular. Esa jugada, reflexiona, "le permite tener a Emiliano García-Page hablando bien de él y animando a votar al PSOE". Un tercer líder autonómico cree que esa estrategia, sin embargo, puede perjudicar a los socialistas por el "lastre" que supone para alcaldes y presidentes el legado de Sánchez, pero también coincide en que la triple cita electoral es una herramienta que, si se utiliza bien, incrementa la movilización.
Fuentes de Génova, por su parte, apuntan a que el líder socialista "hará lo que más le convenga". Y están convencidos de que "si es eso, lo hará". Otros dirigentes consultados se niegan a pensar que Sánchez pueda agotar su mandato porque en algún momento, dicen, pisará una de las minas judiciales que le rodean y todo saltará por los aires. Hay que recordar que un año antes, en 2026, tanto Andalucía como Castilla y León también deben abrir obligatoriamente las urnas.
Sea cual sea la fórmula por la que opte el jefe del Ejecutivo, lo que no se destila en el PP es "preocupación". Creen que Sánchez tendrá difícil reanimar su liderazgo y confían en que el recorrido judicial de las causas abiertas por presunta "corrupción" contra su familia, su partido y su Gobierno termine calando entre los votantes socialistas.
En los territorios del PP también se respira tranquilidad. Con la única excepción de la Comunidad Valenciana, donde la gestión de Carlos Mazón en la DANA ha dañado las siglas populares, las encuestas continúan al alza para los azules allí donde gobiernan. El inconveniente de Vox, que amenaza con tumbar los presupuestos en seis comunidades del PP, tampoco llevará a los barones a dar un "volantazo" y adelantar elecciones.
'Supermayo' en 2027 con elecciones generales, autonómicas y municipales en la misma fecha. En las filas socialistas se valora ya esta posibilidad, después del discurso de Pedro Sánchez en Sevilla en el congreso federal, en el que fijó como prioridad recuperar poder institucional. Y en el PP, fundamentalmente los barones, también lo contemplan. En la política española hacer una predicción, incluso de un día para otro, es la forma más común de equivocarse. Pero la proximidad entre las dos convocatorias, en mayo las autonómicas y municipales, y en julio, las generales, dan fuelle a ese calendario.