Es noticia
Feijóo rearma su ofensiva contra Sánchez ante la "semana negra" del PSOE
  1. España
EN PLENO HURACÁN POR ALDAMA Y EL FGE

Feijóo rearma su ofensiva contra Sánchez ante la "semana negra" del PSOE

El PP saca brillo a su "estrategia de desgaste" tras el paréntesis de la DANA con un rosario de comparecencias en el Senado y un tenso cara a cara con Sánchez en el Congreso. Génova aparca la idea de una moción de censura: "Hay que esperar"

Foto: El lider del PP, Alberto Núñez Feijóo (Europa Press)
El lider del PP, Alberto Núñez Feijóo (Europa Press)
EC EXCLUSIVO Artículo solo para suscriptores

Génova logra coger aire casi un mes después de la tormenta interna por la gestión de Carlos Mazón en la catastrófica DANA. Consciente del shock interno y del previsible desgate para sus siglas, la dirección del PP fue dando tímidos pasos para intentar redirigir el foco mediático hacia el Gobierno, cercado por las múltiples derivadas en los tribunales del 'caso Koldo'. Pero ese cambio de marco no llegó hasta el pasado jueves, cuando Víctor de Aldama "tiró de la manta" y convirtió su confesión en un mazazo a la organización socialista en la víspera del Congreso Federal de Sevilla que debe apuntalar a Sánchez.

En el PP enseñan los colmillos ante lo que algunos cargos califican como la "semana negra" del PSOE, por la confluencia de distintos hitos judiciales y parlamentarios que desembocarán en el decisivo cónclave de los socialistas este mismo fin de semana. En Génova se congratulan por haber recobrado el ritmo de su "estrategia de desgaste" al Gobierno tras el paréntesis de la crisis en la Comunidad Valenciana, que Feijóo ha amortiguado en la promesa de que Carlos Mazón no repetirá como candidato si no logra satisfacer a la ciudadanía con su labor de reconstrucción.

En el primer partido de la oposición respiran por el resultado de las primeras encuestas tras la DANA. Asumen un importante repunte de Vox que achacan a la profunda "desafección" de la ciudadanía con la clase política, pero el PP, al menos de momento y desde un prisma nacional, tampoco ha retrocedido. Y en Génova están convencidos de que el difícil horizonte judicial del Ejecutivo no hará sino "ampliar la distancia" frente al PSOE, a la espera de "nuevas revelaciones" que sostengan su creencia de que existen "indicios racionales de conductas delictivas" por parte del propio Sánchez, como verbalizó Feijóo en una reciente entrevista con El Confidencial.

Foto: Entrevista a Alberto Núñez Feijóo. (Ana Beltrán)
TE PUEDE INTERESAR
"Sánchez debe dimitir en el Congreso Federal, hay indicios de conductas delictivas del presidente"
Itziar Reyero Ana Belén Ramos Fotografías: Ana Beltrán Vídeo: Patricia Seijas

Mientras tanto, la tesis en el PP es la de "mantener la tensión" ante un "calvario" que, sin embargo, se asume que irá para largo. La paciencia, sugieren, es clave para evitar pasos en falso. Los populares ya habían movido ficha en el Senado con el registro de un rosario de comparecencias clave, que ahora adquieren todavía más relevancia tras las últimas revelaciones de Víctor de Aldama, quien detalló ante el juez su supuesta relación con Pedro Sánchez y los contactos con otros importantes activos del Ejecutivo, como Teresa Ribera, María Jesús Montero o Ángel Víctor Torres, además del secretario de Organización del PSOE, Santos Cerdán, señalado por haber recibido, según el comisionista, un sobre de 15.000 euros en negro.

El primer pase tendrá lugar este mismo martes con la declaración de la vicepresidenta primera del Gobierno, María Jesús Montero, a la que el empresario ha situado en la palestra tras afirmar, de momento sin pruebas, que su jefe de gabinete, Carlos Moreno, cobró 25.000 euros a cambio de favorecer presuntamente sus negocios. El PP intentará, además, que la también ministra de Hacienda explique un presunto fraude fiscal por valor de 163 millones en el IVA de los contratos de Sanidad durante la pandemia.

El jueves será el turno de Ángel Víctor Torres, ministro de Política Territorial y expresidente de Canarias. Aldama aseguró que se reunió en varias ocasiones con el dirigente, que supuestamente le pidió una comisión de 50.000 euros por las gestiones para la compra de mascarillas en Canarias. Ese mismo día, también tiene una cita en la Cámara Alta el ministro de Transportes, Óscar Puente, señalado en este caso por haber mantenido en su equipo a altos cargos imputados en el caso Koldo. El PP culminará la semana con la comparecencia de María Cristina Álvarez, la asesora de Moncloa que trabaja como asistente de Begoña Gómez en sus negocios particulares, y cuyo rol destapó en exclusiva El Confidencial.

Foto: Alberto Núñez Feijóo en el Congreso. (EFE/Javier Lizón) Opinión
TE PUEDE INTERESAR
Feijóo pregona un engañoso fin de ciclo
Antonio Casado

La ofensiva del PP no acabará ahí. Porque el miércoles Pedro Sánchez y Alberto Núñez Feijóo asistirán a su primer cara a cara en semanas con un tenso trasfondo. El presidente del Gobierno comparece en la Cámara Baja para evaluar la respuesta a la DANA en la Comunidad Valenciana, pero subirá a la tribuna con el ruido de fondo de la declaración de Víctor de Aldama, a lo que se suma ahora la tormenta de la citación de Juan Lobato ante el Tribunal Supremo —prevista también para este viernes—, para declarar como testigo por la polémica filtración de Moncloa del correo que el abogado del novio de Ayuso envió a la Fiscalía para tratar de subsanar su pleito fiscal. La UCO atribuye, además, un papel "preeminente" a Álvaro García Ortiz, fiscal general del Estado, en la filtración contra la pareja sentimental de Ayuso.

Todo apunta a que, con este contexto, el jefe de la oposición no se quedará únicamente en el reparto de culpas por la gestión de la gota fría, y apuntará los cañones no sólo contra el presidente del Gobierno, sino también contra los socios que le sujetan para mantenerse en la Moncloa. Esa es otra de las bazas que está comenzando a jugar el líder de la oposición. Aún con la certeza de que, al menos de momento, formaciones como Junts o PNV no dejarán caer a Sánchez, Feijóo quiere arrastrarles también al marco de "encubridores de la trama corrupta" con las consiguientes consecuencias electorales, sobre todo si, con el tiempo, escalan las causas que rodean al jefe del Ejecutivo.

El mismo día de la declaración de Víctor de Aldama, Feijóo maniobró azuzando una moción de censura de la mano de los aliados del Ejecutivo el mismo día en que los socios reafirmaron su apoyo a Sánchez avalando su reforma fiscal, paso previo de los Presupuestos Generales del Estado. Pero el líder popular sabe que es muy pronto, y que no puede perder los nervios ante una causa que, como admitió él mismo ante las preguntas de El Confidencial, no ha hecho más que empezar. En el partido se mira con lupa, sobre todo, la copia de la declaración de Aldama que la Audiencia Nacional envió al Tribunal Supremo y la respuesta que aporte el Alto Tribunal.

Foto: La mujer del presidente del Gobierno, Begoña Gómez (Eduardo Parra / Europa Press)

Por el momento, Génova enfría cualquier opción de abrir una ronda de contactos con los grupos parlamentarios, al menos en el corto plazo. Tanto Junts como PNV han negado ya toda posibilidad de aliarse con el PP. Y en la dirección del PP tratan de contemporizar la ingente tormenta judicial que se cierne sobre la Moncloa para evitar pasos en falso. "Hay que esperar", refrendan en la cúpula. Feijóo mantendrá el mensaje de que Sánchez debe dimitir sin esperar a un hipotético reproche penal, aún con la certeza de que ese anhelo no se cumplirá.

Génova logra coger aire casi un mes después de la tormenta interna por la gestión de Carlos Mazón en la catastrófica DANA. Consciente del shock interno y del previsible desgate para sus siglas, la dirección del PP fue dando tímidos pasos para intentar redirigir el foco mediático hacia el Gobierno, cercado por las múltiples derivadas en los tribunales del 'caso Koldo'. Pero ese cambio de marco no llegó hasta el pasado jueves, cuando Víctor de Aldama "tiró de la manta" y convirtió su confesión en un mazazo a la organización socialista en la víspera del Congreso Federal de Sevilla que debe apuntalar a Sánchez.

Partido Popular (PP)
El redactor recomienda