El gastrobar navarro con un solete especialista en vinos y cervezas artesanas: puedes comer y beber por menos de 20 euros

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Ubicado en Sarriguren, en el área metropolitana de Pamplona, este gastrobar ha logrado consolidarse como un referente en la oferta gastronómica navarra. Reconocido recientemente con un solete en la Guía Repsol, se ha posicionado como un lugar ideal para disfrutar de una cena de picoteo a precios accesibles. Su especialidad en vinos y cervezas artesanas atrae tanto a locales como a visitantes que buscan una experiencia gastronómica distinta sin salir del entorno de Pamplona.

El nombre de este acogedor espacio es El Retrogusto es Mío, y destaca principalmente por su amplia y cuidada selección de vinos y cervezas artesanas. En el caso de las cervezas, el establecimiento cuenta con una carta que va desde opciones locales, producidas en Navarra y el norte de España, hasta otras referencias internacionales de cerveceras reconocidas. Estas cervezas se seleccionan para satisfacer distintos gustos, desde los aficionados a las lager y pilsners hasta quienes prefieren estilos más complejos como las IPAs y cervezas oscuras. Este enfoque en las bebidas artesanas, tanto en cervezas como en vinos, es lo que ha consolidado su reputación en la región.

Además, el local organiza con frecuencia catas tanto de cervezas como de vinos, cuyo calendario podéis consultar en este enlace, y también hay una sección de tienda para llevarnos a casa las botellas que más nos hayan gustado.

Vinos y cervezas artesanas como protagonistas

Su carta de vinos ha sido seleccionada con el objetivo de resaltar bodegas de pequeño y mediano tamaño, en su mayoría españolas, que destacan por su calidad y producción limitada. En la carta es posible encontrar vinos de Navarra, La Rioja y Ribera del Duero, entre otras denominaciones de origen y con la opción de pedirlos por copas, lo que permite a los comensales explorar una variedad de sabores y aromas acompañando sus platos. Cada vino ha sido elegido por su carácter y perfil, ideal para maridar con los platillos de la casa y, al mismo tiempo, aportar una experiencia completa y equilibrada.

El ambiente del local también invita a probar estas bebidas en compañía de una carta de picoteo versátil. Los natxos caseros a 13 euros son una de las opciones más solicitadas, ideales para compartir mientras se disfruta de una copa de vino o de una cerveza artesanal bien servida. Estos natxos destacan por la frescura de los ingredientes y la generosidad de sus porciones, convirtiéndose en un plato ideal para comenzar la velada.

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Otra de las opciones preferidas en El Retrogusto es Mío son los bocadillos, que se pueden disfrutar por menos de 10 euros y que cuentan con combinaciones de sabores que complementan la oferta de bebidas. Elaborados con ingredientes de calidad como codillo, ternera o quesos, estos bocadillos destacan por su sabor y originalidad, y se han ganado un lugar en el corazón de los comensales habituales del gastrobar.

Entre las hamburguesas, que se ofrecen por menos de 15 euros, los clientes pueden elegir entre opciones creativas y bien elaboradas como la Burger Mutiko y la Burger Etxeko. Estos platos no solo destacan por la calidad de sus ingredientes, sino también por el cuidado en la presentación y el equilibrio de sabores. Las hamburguesas han sido diseñadas para combinar de manera perfecta con cualquiera de las cervezas artesanas de la carta.

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Para los amantes del queso, el local también ofrece una selección de quesos que complementa la carta de vinos y cervezas. Esta tabla incluye variedades locales, nacionales e internacionales, y está pensada para maridar con una buena copa de vino o una cerveza de fermentación natural, añadiendo una dimensión adicional a la experiencia gastronómica que ofrece El Retrogusto es Mío.

Este gastrobar se ha convertido en un imprescindible para quienes disfrutan de una oferta de bebidas artesanas en un ambiente relajado. La reciente distinción de solete en la Guía Repsol confirma que El Retrogusto es Mío es un destino destacado en Navarra, donde el vino, la cerveza y la buena comida se unen en perfecta armonía a precios asequibles.