Génova pasa al ataque y apunta sus cañones a la "desaparición" de Teresa Ribera en la DANA

Ni Feijóo, ni Génova, ni los barones del PP han exhibido un respaldo explícito a Carlos Mazón, envuelto en una enorme tormenta política por su gestión en la crisis de la DANA, especialmente en las horas críticas del 29 de octubre. Su figura está cuestionada dentro y fuera del partido, y su continuidad sigue siendo una incógnita mientras cargos en el partido creen directamente que no tiene futuro político por el "desastre" en la activación de las alertas y por las versiones contradictorias de la Generalitat sobre su agenda en el día de la catástrofe.

Pero la dirección nacional del PP trata de equilibrar la balanza de las culpas políticas y desviar el foco mediático de su gobierno autonómico por la "responsabilidad" que observan en el Gobierno, tanto en las primeras y cruciales horas del 29 de octubre como en la respuesta los días posteriores. La efímera tregua política que decretó Feijóo el pasado lunes ya se ha resquebrajado del todo. Dirigentes del PP igualan, en privado, los deberes incumplidos tanto de la Generalitat como del Ejecutivo central. Pero en público, Génova disparará de forma inequívoca contra Sánchez por "haber dejado solo" a su presidente autonómico en la gota fría más mortífera del siglo.

En esa batalla por el relato, los de Feijóo han encontrado la diana sobre la que abrir fuego: el Ministerio de Transición Ecológica (Miteco), que dirige Teresa Ribera, de cuya cartera depende la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) y la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET). Los populares apretaron en su ofensiva contra la ministra especialmente desde la tarde del viernes, justo el momento en que tenían mayor presión sobre sus tejados después de desvelarse que el president Mazón estuvo en una comida privada hasta las 18h de la tarde el día de la catástrofe, pese a que la primera versión que ofreció la Generalitat es que el dirigente estaba en su despacho desde las 17h.

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Víctor Romero. Valencia

La "desaparición" de Teresa Ribera ayuda a Génova a edificar esa estrategia. La ministra no estaba en España el 29 de octubre, el día de la tragedia. Como publicó El Confidencial, nadie del Miteco se ha sumado por ahora a los grupos de trabajo organizados entre el Gobierno y la Generalitat para responder a la crisis. Y a todo ello se suma que Ribera no estará presente en el pleno de la próxima semana para que la oposición pueda fiscalizar su gestión, y delega en el ministro de Política Territorial, Ángel Víctor Torres, las explicaciones sobre la actuación del Gobierno ante la DANA.

Los populares, que justifican que Mazón sí ha dado explicaciones y comparecerá ante Les Corts el próximo jueves, denuncian que Ribera ha obviado informar a la ciudadanía en un momento clave sobre los retrasos en las obras de encauzamiento y control de barrancos y torrentes en esa cuenca hidrográfica del Júcar para evitar desgracias como la que ha sacudido a la Comunidad Valenciana.

Desde el PP denuncian también que el CHJ avisó tarde y por correo electrónico del desbordamiento del Barranco del Poyo a Emergencias de la Generalitat, una riada que tuvo consecuencias absolutamente dramáticas sobre múltiples puntos del territorio. El último mail llegó a las 18:43h avisando de la gran crecida, aunque las alertas que dependían de la Generalitat no llegaron a los teléfonos móviles a las 20:12h de la tarde, cuando las inundaciones ya anegaban las calles y había muchas vidas en riesgo.

Génova apretará con el argumento de que Teresa Ribera fue "responsable directa" de la catástrofe. Y atribuyen su incomparecencia al hecho de "no querer perjudicar a sus ambiciones políticas en Bruselas". No en vano, la ministra se enfrenta el próximo martes al examen del Parlamento Europeo para optar a una comisaría europea, por lo que no estará en España para responder por la crisis. El PP ya engrasa su contraataque parlamentario y ha registrado en el Congreso la comparecencia urgente de la ministra de Transición Ecológica, además de la ministra de Defensa, Margarita Robles; y el titular de Interior, Fernando Grande-Marlaska.

Ribera se defiende

La fuerza con la que el PP ha descargado contra Teresa Ribera forzó una reacción del Gobierno, donde explican que la ministra estuvo en Bruselas el pasado 29 de octubre "despachando asuntos de su designación" como nueva vicepresidenta ejecutiva y comisaria europea, aunque "en todo momento estuvo trabajando y localizable".

Fuentes del Miniserio de Transición Ecológica aseguran que aquel 29 de octubre Ribera conversó incluso "unos minutos" con la portavoz del PP en el Parlamento Europeo, Dolors Montserrat, algo que desmintió la dirigente popular. Y añaden que, a partir de las 19:30h, la ministra "llamó hasta en cuatro ocasiones al teléfono del presidente Mazón", pero éste "no le respondió a las llamadas". Finalmente consiguió localizarle a través del móvil de su jefe de gabinete y "hablaron brevemente" trasladándole "su disposición a ayudar y su preocupación".

Insisten en que la vicepresidenta tercera del Gobierno estuvo pendiente de la DANA y en contacto con otros Ministerios, y que adelantó su regreso en Madrid al "primer vuelo disponible" del miércoles 30 de octubre, día en que reunió a su Ministerio y visitó la sede de la AEMET en Madrid. Más que apaciguar al PP, las explicaciones del Ejecutivo despertaron aún más la cólera del primer partido de la oposición, que incidirá en la estrategia de ataque frontal contra Ribera en los próximos días.

El presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, respondió a las explicaciones del Ministerio de Ribera e hizo público un SMS que le envió la ministra el día de la tragedia a las 20:20h de la tarde. "Estamos pendientes y preocupados. El presidente de la CHJ está inquieto pero manejando con máxima prudencia. Marlaska y protección civil, en ello. Dime cualquier cosa en la que podamos ayudar", recogía el mensaje. En el PP tratan de demostrar que, con ese mensaje, el Gobierno omitió su deber en las horas siguientes por no declarar la emergencia nacional para dirigir la catástrofe.

"La vicepresidenta tercera está más preocupada por sus aspiraciones personales y políticas que por atender sus responsabilidades", cargó Miguel Tellado este sábado. El portavoz de los populares trató de sacar la cara por Carlos Mazón, si bien apuntó que no es el momento de "dirimir responsabilidades políticas". Pero sí volvió a lanzarse a degüello contra el Gobierno y Ribera, trazando la estrategia de los populares en los próximos días. "Es una ministra en huida permanente, y no ha estado a la altura en esta crisis".