El juez pide al Supremo que impute a Ábalos por su "papel principal" en el caso Koldo
El magistrado de la Audiencia Nacional Ismael Moreno eleva una exposición razonada al alto tribunal para que investigue al exministro de Transportes y actual diputado, que es aforado
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El juez de la Audiencia Nacional Ismael Moreno ha acordado elevar una exposición razonada al Tribunal Supremo para que investigue al exministro de Transportes y actual diputado del Congreso José Luis Ábalos ante los “indicios fundados y serios” de su “papel principal” en la presunta organización criminal del conocido como caso Koldo.
En su exposición razonada, el titular del Juzgado Central de Instrucción número 2 atribuye a Ábalos una “imputación clara y concreta” a través de una serie de indicios que evidencian su presunta participación en delitos de pertenencia a organización criminal, tráfico de influencias y cohecho. A lo largo de 33 páginas, Moreno destaca "la vinculación" de Ábalos con los contratos de mascarillas que reportaron comisiones millonarias a la trama y "su papel" a la hora de sacar adelante el rescate de Air Europa, lo que considera que podría encajar con el mencionado delito de tráfico de influencias. Respecto al de cohecho, incide que la trama supuestamente le compró un chalé y repasa los pagos "del piso y empleo" a Jéssica, "persona con la que el entonces ministro mantenía una relación particular".
El magistrado remarca que uno de los principales comisionistas de la trama, Víctor de Aldama, conoció a Ábalos y su asesor de confianza, Koldo García, el 31 de agosto de 2018. Ya entonces, su hermano Rubén de Aldama, que ejercía labores de escolta para el entonces ministro, le dejó una frase que resulta reveladora: “Lo tienes a huevo para hacer cosas”.
Aldama no tardó en aprovechar la oportunidad y, en plena pandemia, usó sus contactos en el Ministerio de Transportes para lograr la adjudicación de los contratos investigados a la empresa de la trama: "Durante el tiempo en que Ábalos fue titular del Ministerio de Transportes fueron adjudicados 10.757 contratos públicos, siendo reseñable la preocupación mantenida por Koldo por hacerle llegar aquellos relativos a los celebrados con la empresa Soluciones de Gestión", recuerda el magistrado.
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Por su condición de aforado antes las Cortes Generales, el magistrado subraya la imposibilidad de continuar la instrucción sin realizar diligencias de investigación que afecten de manera directa al diputado, por lo que entiende que ahora la investigación debería continuar en la Sala Segunda del Tribunal Supremo. Moreno acuerda enviar testimonio íntegro de las actuaciones para que sea el alto tribunal el que se pronuncie si debe asumir toda la investigación o únicamente lo referido al aforado.
Presuntos sobornos de la trama
En los últimos meses, la situación procesal de Ábalos se ha visto seriamente comprometida por su relación con la trama de corrupción que anidó en su ministerio durante la pandemia. A finales de agosto, se hizo pública una auditoría interna en Transportes encargada por su sucesor y excompañero de partido, el actual ministro Óscar Puente. Esta investigación extrajudicial ya atribuía a Ábalos un conocimiento directo de las actividades de su asesor Koldo García, imputado también por el supuesto cobro de comisiones ilegales por favorecer a la trama en la adjudicación de contratos públicos.
El segundo acontecimiento relevante para Ábalos tuvo lugar hace solo unos días, cuando se conoció el contenido de un informe de la UCO de la Guardia Civil elaborado a partir de la documentación incautada a los detenidos, entre ellos su asesor. En este informe de 233 folios no aparecen fotografías del ministro porque la documentación ha sido expurgada y se ha apartado lo que no tiene que ver con el caso. Pero sí se da cuenta de que la trama le pagaba el alquiler a la mencionada mujer que Ábalos dice que era su novia. La joven se llama Jésica y gracias a esos pagos disfrutó de un piso de lujo en el centro de Madrid.
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Las pesquisas de la UCO también han aflorado que la trama corrupta le compró al entonces ministro un chalet en Cádiz. Los investigadores enmarcan esta operación en un presunto soborno a cambio de favores ante la administración. Solo en contratos para comprar material sanitario durante la pandemia, la empresa investigada se hizo con cerca de 50 millones de euros.
En los correos intervenidos a Koldo García, correspondientes a su cuenta corporativa del ministerio, se aprecia además cómo Ábalos le marcaba los anuncios de portales inmobiliarios con chalets en zonas de costa. Su asesor era el encargado de trasladar a la trama las preferencias del ministro. Cuando ya habían elegido la casa para comprar, los vendedores comunicaron que sería más barata sin muebles. “Que dejen el piano”, contestó Ábalos. Todos estos elementos le han dejado a un paso de la imputación ante el Tribunal Supremo, que ahora tendrá que decidir si accede a la petición del juez de la Audiencia Nacional.
El juez de la Audiencia Nacional Ismael Moreno ha acordado elevar una exposición razonada al Tribunal Supremo para que investigue al exministro de Transportes y actual diputado del Congreso José Luis Ábalos ante los “indicios fundados y serios” de su “papel principal” en la presunta organización criminal del conocido como caso Koldo.