¿Qué prensa leen en el Congreso y en Moncloa? Más de 1,5 millones invertidos desde 2018

Los ministros de Sánchez, Félix Bolaños (Presidencia), Pilar Alegría (Educación), Ernest Urtasun (Cultura) y Ana Redondo (Igualdad) presentaron este martes uno de los buques insignia de esta legislatura: el plan de regeneración de los medios de comunicación. Desde el pasado mes de abril, Pedro Sánchez ha puesto a los medios en el ojo del huracán. En aquel momento, el líder socialista empleó cinco días para decidir si seguiría al frente del Gobierno, motivado por las publicaciones sobre los presuntos casos de tráfico de influencias y corrupción en los negocios de su mujer, Begoña Gómez. Sin embargo, los encargos a través de contratos menores demuestran que en el Congreso de los Diputados se continúa leyendo la prensa, aunque no toda por igual, pese al malestar que esta ha generado en el líder socialista. En total, desde julio de 2018 entre ambas instituciones se han gastado al menos 1,5 millones de euros en prensa.

Los medios especializados en derecho son quienes se han llevado acuerdos de mayor cuantía, atendiendo a los datos de contratos menores, desde julio de 2018 hasta la actualidad, publicados en la página del Congreso de los Diputados. Tras ellos, sobresale Unidad Editorial, el grupo que engloba a El Mundo, Expansión o Marca, muy por delante de su competencia directa. También cobra especial relevancia la prensa centrada en asuntos internacionales como Canal Europa y Prestomedia, con temáticas sobre la Unión Europea, y Estudios de Política Exterior, medio experto en análisis de temas transfronterizos. Los contratos, que dependen de la Mesa del Congreso, presidida en la actualidad por Francina Armengol, ascienden a 286.560 euros.

Además de los casi 300.000 euros que el Congreso ha pagado directamente a los medios por suscripciones tanto en papel como en digital, la Cámara Baja también contrata prensa a través de quioscos que ofrecen una amplía variedad de cabeceras, por lo que es muy complicado saber exactamente cuál es el medio más leído por los diputados. Desde julio de 2018, la Mesa del Congreso ha contratado principalmente los servicios de Kiosko Cortes, Kiosko y más y Factiva Dow Jones, con varios contratos menores de suministros que sobrepasan los 50.000 euros, aunque el límite establecido en la ley para poder licitar a través de acuerdos menores es de 15.000 euros. En total, entre los seis años analizados, la cifra supera los 500.000 euros tanto en ejemplares como en suscripciones digitales a través de estos puntos de venta.

El Congreso de los Diputados no es la única institución pública que contrata el suministro de información. A Moncloa también llegan diariamente las principales tiradas de España, pero no se pide el mismo número de ejemplares o suscripciones de todas ellas. El acuerdo de entrega de prensa, adjudicado por 240.000 euros, refleja con mejor detalle cuál es el medio más solicitado por el complejo residencial del presidente, al tratarse de una contratación mayor y estar sometida a un control más riguroso. El País se corona como la cabecera en papel más leída en Moncloa con 11.581 ejemplares para los distintos edificios a lo largo de un año. Le siguen El Mundo (9.756), ABC (8.557), La Vanguardia (7.984) y La Razón (7.355). La prensa internacional en formato tradicional también se cuela con fuerza en la casa presidencial española, siendo los más solicitados The New York Times y Le Monde, con 783 ejemplares cada uno.

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Los medios digitales, del mismo modo, se hacen hueco en Moncloa, aunque en número de encargos siguen siendo muy inferior al papel. Las estimaciones apuntan a que en un año, se necesitan 62.198 ejemplares frente a las 471 suscripciones. En cuanto a las digitales, en el podio repiten El País y El Mundo aunque La Vanguardia adelanta a ABC, que se sitúa cuarto, seguido de El Periódico, El Confidencial y Eldiario.es.

La fecha elegida por el presidente para presentar su plan de regeneración, además, coincide con la publicación en este medio de la campaña de desprestigio que prepara el PSOE contra periodistas, jueces y artistas. Como era de esperar, las reacciones no tardaron en llegar: a primera hora, tanto Isabel Díaz Ayuso, la presidenta de la Comunidad de Madrid, como Vox rechazaban el plan. Entre las medidas que lo forman, el Ejecutivo pretende modificar la ley de Publicidad Institucional y que así se puedan conocer las cuantías que las administraciones adjudican a cada medio, algo que ni siquiera cumple el propio Gobierno socialista como contó El Confidencial el pasado mes de junio.

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Este medio logró recoger los importes destinados a publicidad institucional a través de múltiples peticiones de transparencia y después de dos años de intentos. Las cifras arrojaron luz en un tema totalmente opaco que ahora, Sánchez dice querer regular. El grupo Vocento, formado por ABC y una larga lista de regionales, lideraba el ranking, seguido por Unidad Editorial y Prisa. El montante total otorgado bajo las legislaturas de Sánchez por los distintos ministerios asciende a 240 millones de euros.

Otra de las medidas propuestas por el Ejecutivo es crear un registro de medios de comunicación, dependiente de la Comisión Nacional del Mercado de la Competencia, con información sobre la propiedad de los grupos editoriales y los ingresos por publicidad que reciben. Por otro lado, Sánchez busca modificar el derecho al honor y a la rectificación; así como cambiar el Código Penal para abordar los delitos relacionados con la libertad de expresión e impulsar una nueva ley que ampare el secreto profesional.