El Gobierno pone a una exdiputada del PSOE al frente de la Guardia Civil en pleno caso Begoña

El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, recupera a Mercedes González para el puesto de directora general de la Guardia Civil. Será así su segundo mandato al frente del Instituto Armado tras su breve paso de unos meses el año pasado, según informan fuentes gubernamentales. Lo dejó para integrar las listas del PSOE a las elecciones generales de julio de 2023. Es una dirigente de la máxima confianza del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.

Mercedes González era la delegada del Gobierno en Madrid y desempeñó una gestión con marcado perfil político. Su nombre estuvo en las quinielas para concurrir como candidata en las elecciones municipales y autonómicas por Madrid. Finalmente, pasó a dirigir la Guardia Civil en sustitución de María Gámez, quien dimitió en marzo de 2023 por la imputación de su marido en un caso de corrupción relacionado con los ERE de Andalucía.

Sin embargo, Mercedes González apenas estuvo unos meses al frente del cuerpo, ya que en junio lo dejó para concurrir a las elecciones y obtuvo un escaño en el Congreso de los Diputados. Esta semana se conoció que la dirigente renunciaba a su asiento en las Cortes.

La explicación que ofrece el Gobierno a su retorno es que el actual director general, Leonardo Marcos, ha presentado su renuncia al cargo a petición propia, por motivos personales, y ha trasladado al ministro, el pasado 12 de septiembre, su intención de reincorporarse al Cuerpo Superior de Administradores Civiles del Estado.

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De este modo, el ministro Grande-Marlaska acomete su cuarta permuta al frente de la Guardia Civil tras el cese del juez Félix Azón al inicio de su mandato. En su lugar nombró a María Gámez, con un perfil más próximo al PSOE. Mantuvo esa línea cercana al partido con Mercedes González. Con Leonardo Marcos se apostó por un nombre más técnico y ahora vuelve a confiar las riendas del Instituto Armado a una mujer del partido en un momento en el que la Guardia Civil lleva a cabo tres investigaciones especialmente sensibles para el Gobierno.

Una de ellas es la que afecta a la mujer del presidente del Gobierno y que se sigue en un Juzgado de Madrid. La otra tiene que ver con el hermano del presidente, que se investiga en un juzgado de Badajoz. La tercera es el llamado caso Koldo que instruye la Audiencia Nacional. En los tres casos, las pesquisas corren a cargo de la Unidad Central Operativa (UCO), la unidad de élite de la Guardia Civil en materia de lucha contra la corrupción.