Junts desarma a Moncloa al tumbar por sorpresa la ley de alquileres vacacionales
Los de Puigdemont habían anunciado que se abstendrían, aunque al final han votado 'no' a la proposición de ley de Sumar. Fuentes del partido afirman que la postura permisiva de PNV y CC les ha obligado a reaccionar
Junts aprieta al Gobierno... y le ahoga en el Congreso. Pedro Sánchez asistió en directo a la última llave de judo de Carles Puigdemont, que volvió a tumbarles en la lona. Esta vez el motivo fue la ley para regular el alquiler vacacional que impulsaba con grandes esperanzas Sumar. Los de Yolanda Díaz pretendían hacer bandera de una reforma que ponga coto al precio de la vivienda, pero los siete diputados de Junts tumbaron de manera sorpresiva su proposición de ley, recordando que son imprescindibles en cada votación. El vértigo volvió a atrapar al Ejecutivo y a los partidos que lo apoyan. En el hemiciclo resonaba otra vez la amenaza de Puigdemont a Pedro Sánchez: "Game over".
El pleno del Congreso de los Diputados rechazó por sorpresa este martes tramitar la nueva medida estrella de Sumar, que venía promovida a su vez desde las organizaciones sociales y de inquilinos, para combatir el uso fraudulento de los contratos de alquiler de temporada y de habitaciones. Curiosamente, Junts se fue con la saca llena: la mayoría del Pleno pidió que se tramite una propuesta suya para endurecer las penas de los multirreincidentes por delitos menores, en consonancia con otra iniciativa legislativa del PP que procede del Senado. PP y PSOE apoyaron reformar el Código Penal, e incluso ERC se absutvo.
Aunque la portavoz independentista Míriam Nogueras anunció durante la jornada que su grupo se abstendría, finalmente votaron 'no'. También su secretario general, Jordi Turull, anticipó la abstención de su grupo porque el PSOE les habría prometido que la metería "en un cajón", es decir, que no llegaría a ver la luz. Pero una llamada del grupo independentista catalán al teléfono del portavoz de Sumar, Iñigo Errejón, truncó los planes del Gobierno.
La toma en consideración de la propuesta quedó finalmente rechazada por 178 votos en contra (PP, Vox, UPN y Junts) y 172 a favor (PSOE, Sumar, ERC, Bildu, PNV, Podemos, BNG y CC). Tan apurada es la aritmética en el Congreso que el presidente, Pedro Sánchez, se vio obligado a acudir a la Cámara a votar. Fue en vano. El Gobierno -o los partidos que lo integran- volvía a perder de manera estrepitosa a manos de sus socios. Igual que la semana pasada, con la moción sobre Venezuela que apoyó el PNV. Idéntico escenario se espera el próximo jueves 26, cuando se vote otra vez el techo de gasto, que Junts insiste en que rechazará.
Durante el debate parlamentario, la diputada de Junts Marta Madrenas verbalizó su rechazo frontal a la norma de Sumar aunque no aclaró el sentido del voto. Según Junts, al igual que la ley de Vivienda "no era buena" y ha sido recurrida por Euskadi y Cataluña ante el Constitucional por supuesta invasión competencial, esta nueva normativa sobre viviendas vacacionales también perjudicaría la oferta del alquiler, que ha sufrido una reducción del 31% en la comunidad autónoma.
"Junts está muy preocupado, en Cataluña es un drama, los jóvenes viven una tortura (...) Propuestas como la de hoy no hacen más que empeorar la situación ", reseñó Madrenas, exacaldesa de Girona. "No hagan patada hacia delante precipitándose con nuevas propuestas reactivas y poco maduradas", remató Madrenas.
Fuentes del partido consultadas por El Confidencial justificaron que este cambio brusco de postura viene motivada porque el PNV y Coalición Canaria facilitaban su tramitación aunque con un "apoyo crítico", algo que han querido a toda costa evitar al considerar que es lesivo para los propietarios y porque invade competencias. "Han cambiado hoy su voto y con nuestra abstención se aprobaba (era tomada en consideración)", indicaron desde la dirección del partido en Barcelona. "Es una mala ley que quita competencias a Cataluña", añadieron.
En la misma línea se pronunció poco después Turull a través de las redes sociales: "La abstención del mediodía inhabilitaba la admisión a trámite. Los cambios de otros partidos han cambiado el escenario y, tal y como la portavoz y la diputada han explicado en sede parlamentaria, Junts no será el partido que facilite una ley que invade competencias a Cataluña. Saben que es una línea roja".
Junts aprieta al Gobierno... y le ahoga en el Congreso. Pedro Sánchez asistió en directo a la última llave de judo de Carles Puigdemont, que volvió a tumbarles en la lona. Esta vez el motivo fue la ley para regular el alquiler vacacional que impulsaba con grandes esperanzas Sumar. Los de Yolanda Díaz pretendían hacer bandera de una reforma que ponga coto al precio de la vivienda, pero los siete diputados de Junts tumbaron de manera sorpresiva su proposición de ley, recordando que son imprescindibles en cada votación. El vértigo volvió a atrapar al Ejecutivo y a los partidos que lo apoyan. En el hemiciclo resonaba otra vez la amenaza de Puigdemont a Pedro Sánchez: "Game over".
El pleno del Congreso de los Diputados rechazó por sorpresa este martes tramitar la nueva medida estrella de Sumar, que venía promovida a su vez desde las organizaciones sociales y de inquilinos, para combatir el uso fraudulento de los contratos de alquiler de temporada y de habitaciones. Curiosamente, Junts se fue con la saca llena: la mayoría del Pleno pidió que se tramite una propuesta suya para endurecer las penas de los multirreincidentes por delitos menores, en consonancia con otra iniciativa legislativa del PP que procede del Senado. PP y PSOE apoyaron reformar el Código Penal, e incluso ERC se absutvo.