Junts no afloja la presión y mantiene su veto a la senda de déficit y al cupo catalán

Junts vuelve a poner contra las cuerdas al Gobierno y advierte que no apoyará ni la senda de déficit ni el acuerdo fiscal pactado entre el PSC y ERC si no se producen "cambios". El partido de Carles Puigdemont no afloja la presión en plena Diada y ratifica que la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado va a convertirse en un auténtico camino de espinas para el Ejecutivo. De poco o nada ha servido que la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, le haya pedido a la formación independentista que "reconsidere" su voto al nuevo texto del techo de gasto que Junts ya tumbó el pasado mes de julio.

"Si se creen que luchamos por la independencia para acabar conformados con un poco de gasto, es que todavía no han entendido cómo actuamos", advirtió la portavoz parlamentaria de Junts, Miriam Nogueras, que reiteraba también su negativa a apoyar el cupo catalán que propone el Gobierno al considerarlo insuficiente. "Queremos el control, que Cataluña mande sobre todos los ingresos y sobre todos los gastos y todas las políticas de Cataluña", lanzaba. "Señora ministra, si quiere resultados distintos, haga cosas distintas", advertía.

Junts ya tumbó la senda de déficit —paso previo a los Presupuestos— el pasado mes de julio, lo que obligó al Gobierno a reformular sus objetivos de estabilidad y llevar un nuevo texto a la Cámara. El documento, sin embargo, sigue siendo deficiente para los neoconvergentes, de los que depende en última instancia que las cuentas salgan adelante. El Gobierno trata de reconducir el cerrojazo de Junts, y el ministro de Presidencia, Félix Bolaños, ha mantenido en la mañana de este miércoles una reunión con la portavoz de Junts, Miriam Nogueras, en el Congreso de los Diputados.

TE PUEDE INTERESAR

Junts tumbará los presupuestos, pero quieren a Pedro Sánchez en coma y no muerto

Marcos Lamelas. Barcelona

Durante la primera sesión de control al Ejecutivo del curso, Nogueras reprochó al Gobierno que "de los 40.000 millones que Europa les dice que puede gastar como déficit", el Ejecutivo se queda con el 90%, es decir, con 35.000 millones. Sostuvo que Cataluña apenas percibirá 100 millones de euros y que, por tanto, la ministra de Hacienda "miente" al asegurar que la senda de estabilidad "beneficia a todas las comunidades autónomas".

De los "40.000 millones que Europa les dice [al Gobierno] que puede gastar", el Ejecutivo central "se queda el 90%, 35.000 millones. Así que Montero "miente" cuando dice que su propuesta "beneficia a todas las comunidades autónomas". Cataluña, remarcó, no recibirá más que 100 millones de euros. "Si se creen que luchamos por la independencia para acabar conformados con un poco de gasto, es que todavía no han entendido cómo actuamos. Queremos el control, que Cataluña mande sobre todos los ingresos, sobre todos los gastos y todas las políticas de Cataluña".

La portavoz independentista abordó también durante su intervención la pantalla del acuerdo fiscal para Cataluña, del que se conocen pocos detalles más allá de que se concretará a través de una reforma de la Ley Orgánica de Financiación de las Comunidades Autónomas (LOFCA), que tendrá que superar el filtro del Congreso. Y en ese trámite, al menos de momento, no contará con el respaldo de Junts.

TE PUEDE INTERESAR

Sánchez sorteará el concierto catalán hasta que se celebren los congresos de Junts y ERC

Marisol Hernández

"¿Puede confirmar que es un concierto económico como el vasco?", le espetó Nogueras a Montero, que obvió la pregunta y reiteró que se trata de un "acuerdo bueno" para Cataluña. "A veces uno no puede llegar a su aspiración de máximos", advirtió la ministra de Hacienda. "Queda claro que no hay concierto ni nada que se le parezca", le replicó Nogueras, que deslizó de nuevo que el Gobierno se encontrará con el muro de los siete votos de Junts para alumbrar tanto los Presupuestos, de los que depende la estabilidad de la legislatura; y el pacto fiscal con ERC, que el Ejecutivo comprometió a cambio del apoyo de los republicanos a la investidura de Salvador Illa.