Un abogado español de Clifford Chance supervisa la nueva fundación de Juan Carlos I y sus hijas

Juan Carlos I ha contado con la asistencia del abogado español Carlos Portocarrero de las Heras para constituir su nueva fundación en Abu Dabi, según han confirmado a El Confidencial fuentes próximas al monarca. Portocarrero es socio de la oficina en Madrid del bufete inglés Clifford Chance y colabora con el rey emérito desde hace décadas. Está especializado en alianzas empresariales, licitaciones, ventas de acciones y grandes operaciones inmobiliarias.

El letrado se ha desplazado en varias ocasiones a la capital de Emiratos Árabes para analizar en persona con el antiguo jefe del Estado los hitos más delicados del proceso. Juan Carlos I quiere asegurarse de que las infantas Elena y Cristina heredan todo su patrimonio cuando fallezca para que puedan disfrutar de una fuente de ingresos suficiente y permanente. El propio rey emérito preside la nueva entidad y sus hijas forman parte del patronato.

La operación se ha ejecutado con la máxima reserva para evitar otra polémica en torno al dinero de Juan Carlos I. Además de garantizar el futuro de sus descendientes, el rey emérito pretende emplear la fundación para reagrupar sus activos en el extranjero y tratar de captar nuevas aportaciones económicas que quedarían igualmente bajo el control de las infantas en el momento de su muerte. Felipe VI se ha quedado al margen de este movimiento. En marzo de 2020 renunció a la herencia de su padre.

Portocarrero y Clifford Chance han declinado responder a las preguntas de El Confidencial sobre su papel en la creación del vehículo societario. Las fuentes consultadas explican que el socio del bufete británico ha trabajado en este encargo a título particular, aunque el monarca ya confió a este despacho, en una primera fase, su defensa por la demanda por acoso que le puso Corinna Larsen en un tribunal de Londres en 2020. Posteriormente, tras un primer revés en la causa, Juan Carlos I se puso en manos de la firma Carter-Ruck y, a finales de 2022, volvió a cambiar de abogados y fichó a Velitor Law.

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Es la primera vez que se relaciona a Portocarrero con Juan Carlos I. Se trata de un histórico de Clifford Chance, que trabaja en el despacho desde 1997. En los últimos años ha intervenido en una auditoría de los más de 200.000 activos de la Sareb, el banco público que reúne todos los activos tóxicos de la crisis inmobiliaria; participó en la venta y posterior arrendamiento de 2.000 propiedades del Santander en España por valor de 4.400 millones de euros; y ha asesorado en compras de centros comerciales como Maquinista, Diagonal Mar y Parquesur, entre otras operaciones.

La legislación de Emiratos Árabes es especialmente propicia para utilizar las fundaciones en herencias. A su casi nula fiscalidad se une el secretismo en torno a los verdaderos beneficiarios de la institución, así como de los bienes y fondos amparados por su estructura. Los estatutos internos establecen las condiciones y el momento en los que se produce el relevo de los directores sin que ninguna autoridad fiscal tenga noticias del cambio ni del incremento patrimonial que supone para los contribuyentes implicados.