Vox marca territorio y exige suspender las nacionalizaciones desde países islámicos

Vox ha reaccionado al atentado en Bruselas y ha marcado territorio con uno de sus discursos más reconocibles. La portavoz de la formación ultraconservadora en el Congreso de los Diputados, Pepa Millán, ha anunciado este martes que el grupo parlamentario ha registrado una proposición no de ley para suspender la concesión de la nacionalidad española y los permisos de residencia de las personas procedentes de países islámicos. "Lo que ocurrió ayer en Bruselas es la consecuencia de todas las políticas de puertas abiertas que se están llevando a cabo en gran parte de Europa", ha dicho ante los medios en la Cámara Baja.

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EFE

La proposición, que recuerda que la concesión de nacionalidades aumentó un 26% el año pasado, con casi un tercio de marroquíes exclusivamente, reclama tres cuestiones. En primer término, "suspender la tramitación de los expedientes de la nacionalidad española y las autorizaciones de estancia a personas procedentes de cultura islámica". También la "retirada de nacionalidad a quienes no sean españoles de origen y apoyen o justifiquen las actividades de terrorismo islamista". Y, por último, "fortalecer las unidades policiales contra terroristas para el análisis de los perfiles repetidos, identificación y control de quienes promuevan o asuman las causas del terrorismo islámico e impedir cualquier acto de proselitismo del terrorismo islamista".

La dirección del partido ha salido en tromba tras el asesinato de dos personas Bruselas, perpetrado por un yihadista antes del partido de fútbol entre Bélgica y Suecia, y la posterior actuación de la policía, que abatió al único sospechoso. Santiago Abascal, en la misma línea que Millán, ha cargado contra las políticas migratorias y ha aplaudido el final del terrorista. "Hay que abatirles, sí, a todos los desalmados que traen odio, dolor y muerte. Y a ser posible hay que abatirles antes de maten (sic) a un solo inocente. En Barcelona, en Bruselas o en Israel. Pero antes hay que impedirles entrar, y hay que hacer responsables a quienes les han abierto las puertas", ha publicado en X, antes Twitter.

La política migratoria es uno de los pilares fundamentales del argumentario de Vox. Desde su nacimiento ha defendido un férreo control de las fronteras y la expulsión sin condiciones de los inmigrantes ilegales y con antecedentes penales, con el argumento de que han multiplicado la inseguridad en las calles y convertido las ciudades europeas en guetos de delincuencia. "Están convirtiendo a las capitales europeas en guetos, donde no impera la ley de los estados, en lugares donde impera el crimen y en todo caso la ley islámica", ha declarado Millán en el Congreso.

No es la primera vez que Vox impulsa una iniciativa para controlar la concesión de la nacionalidad española. La formación de Abascal ya registró hace dos años una proposición de ley para modificar el régimen jurídico de la nacionalidad. El propósito, que fracasó en el Congreso, era acabar con las supuestas prácticas fraudulentas en la adquisición de la condición de español. El objetivo era restringir la atribución por procedimientos que no acreditan un suficiente grado de integración en España, siempre con los países islámicos en la diana. "Se persigue reforzar la condición de ser español y garantizar que la nacionalidad española acredita un vínculo de lealtad y de compromiso histórico con el pasado, el presente y el futuro de la nación española", argumentaron.

Jorge Buxadé, que ya expuso este tema en el Parlamento europeo, denunció hace días las presuntas irregularidades en la tramitación de las nacionalizaciones. "Llevo desde el inicio denunciando el fraude y el coladero de las nacionalizaciones en España. Exigiendo una amplia reforma del Código Civil y Penal en la materia", dijo en la misma red social días antes del atentado.