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Guerra sucia entre las abolicionistas y el 'lobby' de la prostitución (con Urdaci al frente)
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CON LA LEY DE ABOLICIÓN COMO TRASFONDO

Guerra sucia entre las abolicionistas y el 'lobby' de la prostitución (con Urdaci al frente)

Un misterioso informe sostiene que Rocío Nieto, una de las principales caras proabolición, ha creado un imperio a partir de fondos públicos

Foto: Dos mujeres, en un club de alterne en Austria. (Reuters/Leonhard Foeger)
Dos mujeres, en un club de alterne en Austria. (Reuters/Leonhard Foeger)
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Si está cansado de escuchar hablar del lenguaje inclusivo, la ley del solo sí es sí o el debate trans, prepárese porque se viene la madre de todas las guerras culturales: abolir la prostitución. El proyecto de ley, que se perfila como una de las grandes cuestiones antes de elecciones, hace extraños compañeros de cama: Vox podría votar junto a Bildu y el PP de la mano del PSOE.

Ningún partido se libra del debate interno entre las posiciones abolicionistas, que buscan perseguir a los proxenetas y sancionar a clientes y caseros de puticlubes, de los postulados regulacionistas, que prefieren que se legalice la actividad y solo se penalice la trata de seres humanos. En el primer grupo están el PSOE y una parte mayoritaria de Unidas Podemos que incluye a Irene Montero. También el Partido Popular y Vox, aunque su posición ha penduleado en el último año. Enfrente tienen a los partidos independentistas, que temen que un texto abolicionista perjudique a las trabajadoras sexuales, apoyados por sectores transversales del resto de los partidos de la Cámara.

Existe una pugna por el relato entre abolicionistas y partidarios de la regulación

Entre medias está la puta feliz. Se trata de una figura hipotética que representa a las trabajadoras sexuales que han decidido serlo en libertad, sin coacciones y ante otras alternativas laborales. Los abolicionistas consideran que este perfil apenas supone en torno a un 5% de las prostitutas y que, al cabo, "la prostitución es un tipo de violencia sexual contra las mujeres". Los que abogan por legalizar el trabajo sexual creen que hay un volumen importante de putas felices que merecen los mismos derechos que cualquier trabajador.

Se estima que la prostitución mueve 4.000 millones de euros al año, lo que equivale a un 0,35% del PIB español. La abolición supondría un terremoto de consecuencias imprevisibles. Y, con tantas posiciones aún por dirimir en el Congreso, los lobbies se han puesto manos a la obra. El primero en abrir fuego ha sido la Plataforma de Afectados por la Abolición, una agrupación reciente que engloba a trabajadoras, empresarios y afines a la regulación del negocio del sexo.

La plataforma es heredera de la popular Anela (Asociación Nacional de Empresarios de Locales de Alterne), que se disolvió después de más de una década de actividad por sus vínculos con la ultraderecha valenciana. "Anela se creó para mostrar a la sociedad que los empresarios de la noche no somos delincuentes y acabó dándonos incluso peor imagen", dice el dueño de un puticlub de Madrid. "De modo que ahora optamos por poner por delante a las trabajadoras, que son las principales afectadas, para que hablen con la opinión pública".

Uno de los últimos en enrolarse ha sido Alfredo Urdaci, que hace unos meses se puso al frente de la comunicación de los antiabolicionistas

Desde la plataforma, indican que los empresarios que impulsaron Anela no forman parte de esta nueva asociación, pero tampoco les cierran las puertas en un futuro. "Aquí hay gente de todo tipo, te sorprenderían los perfiles", explica la secretaria del lobby. Y tanto. Uno de los últimos en enrolarse ha sido el periodista Alfredo Urdaci, que hace unos meses se puso al frente de la comunicación de los antiabolicionistas (o puteros, como les llaman sus rivales). Apartado de la televisión pública pese a su condición de funcionario, Urdaci ha probado como monologuista, escritor o jefe de prensa del Pocero en su larga travesía por el "infierno personal y profesional" en que vive desde que salió de la dirección de Informativos de TVE.

La última aventura del pamplonés pasa por ofrecer la cara positiva de la prostitución en España. A través de su medio FanFan.es, Urdaci entrevista a meretrices, sociólogos y cualquier otra persona que refuerce, en definitiva, la teoría de la puta feliz.

El informe apócrifo

Esta es la parte pública del trabajo de Urdaci. Entre bambalinas, el periodista está explotando sus contactos en los medios para colocar el relato antiabolicionista. Circula por las redacciones un informe de 67 páginas titulado La trama que se esconde tras el negocio de la prostitución al que ha tenido acceso este periódico. De ahí surgen las noticias que se han ido publicando durante las últimas semanas que sitúan a Rocío Nieto, fundadora de Apramp, en el centro de un entramado político-económico que tiene por objeto lucrarse con el rescate de prostitutas.

Como suele suceder en estos casos, el documento no tiene padre. Aunque se ha publicitado en los medios como un "trabajo policial", ni Policía Nacional ni Guardia Civil saben de dónde procede, en tanto que no hay una causa abierta contra Apramp ni su fundadora. Por el formato, se parece más a una investigación encargada a una agencia de detectives, con datos extraídos de fuentes abiertas como el Registro Mercantil y el de la Propiedad. Fuentes del sector de la investigación privada afirman que un informe así puede costar "miles de euros" por las horas de trabajo que conlleva.

¿Quién ha financiado el trabajo? Este periódico lo obtuvo a través de la Plataforma de Afectados por la Abolición, principal y único sospechoso, si bien niegan estar detrás: "A nosotros nos lo ofreció una persona desconocida, que a su vez se lo pasó a varios medios de comunicación", dicen desde la plataforma. "Hasta donde yo sé, es un trabajo policial publicado por El Debate", remacha Urdaci. Sea como fuere, la página de la plataforma recopila todas las noticias que van saliendo sobre el caso, insistiendo en que se trata de una investigación de la Policía Nacional.

Apramp es una de las ONG favoritas de Irene Montero, Carmen Calvo y la Casa Real

"Llevamos casi 40 años recibiendo ataques por parte de asociaciones de empresarios de la prostitución, pero a medida que se acerca la ley, el asedio se ha ido incrementando", dice Rocío Mora, hija de Rocío Nieto y coordinadora de Apramp. "Jaquearon nuestra web para convertirla en una página porno. Llaman constantemente a nuestro teléfono 24 horas, pensado para las mujeres víctimas de trata, pidiendo servicios sexuales. Me llegan amenazas a diario por las redes sociales. Han desvelado las direcciones de los pisos donde acogemos a las prostitutas rescatadas. Estoy realmente preocupada", explica.

¿Por qué una ONG se ha convertido en el foco de los ataques? "Porque somos unos interlocutores privilegiados con las instituciones y, sobre todo, porque defendemos el abolicionismo. Nos atacan a nosotras porque es más fácil que ir a por el Gobierno", continúa la coordinadora.

Para los empresarios de la prostitución, el papel de Apramp ha sido clave a la hora de fijar la posición abolicionista del PSOE, en especial por su cercanía a las ministras Calvo e Irene Montero, titular de Igualdad. No obstante, desde que la asociación arrancó en 1989, ha recibido subvenciones de gobiernos autonómicos y nacionales de distinto signo, además de ser una de las ONG favoritas de la Casa Real, que las ha recibido en diversas ocasiones.

placeholder La reina Letizia, junto con Irene Montero, el rector de la UNED, Ricardo Mairal Usón, y la presidenta de Apramp, Rocío Nieto. (EFE)
La reina Letizia, junto con Irene Montero, el rector de la UNED, Ricardo Mairal Usón, y la presidenta de Apramp, Rocío Nieto. (EFE)

Rescatistas en la diana

Apramp se dedica a sacar a mujeres prostitutas de la calle. Las aloja en un piso y les agenda una serie de actividades enfocadas a su reinserción laboral. También denuncian ante las autoridades, lo que ha servido para encarcelar a decenas de proxenetas, entre ellos el conocido Cabeza de Cerdo, un ciudadano rumano que prostituyó, asesinó y descuartizó a mujeres solo para enriquecerse a costa de su explotación.

Este trabajo no es bien visto por toda la sociedad. Además del lobby de la prostitución, existe una corriente en la izquierda que considera el rescatismo un negocio más en torno a la explotación de las mujeres. "Es un trabajo que debería ser asumido por el Estado y que subcontrata, por medio de subvenciones, a las ONG, en especial a Apramp", afirman fuentes cercanas a Unidas Podemos.

La situación de las mujeres en los pisos de Apramp es uno de los aspectos más criticados. Algunas han denunciado que se les restringe el acceso al móvil, obligándolas a hablar delante de un trabajador social, que la comida se raciona y que no les permiten salir a la calle cuando quieren. "¿Sabes lo que sucedería al día siguiente de que una mujer llegase al piso? Que se encontraría con 200 llamadas del proxeneta, acabaría respondiendo por miedo y, a los 10 minutos, tendríamos al tipo en la puerta del piso, poniendo en riesgo a todas sus compañeras", explica Rocío Mora. "Tampoco podemos olvidar que, en el momento en el que una mujer es rescatada, inmediatamente entra en el programa de protección de testigos de la Policía. En algunos casos, es la propia Policía la que nos pide el teléfono móvil para conseguir información del proxeneta".

Una corriente de la izquierda considera que el 'rescatismo' es otro negocio más en torno a las prostitutas

"Si lees las noticias, parece que encerramos a las prostitutas contra su voluntad. No es así. Nosotros no tratamos con mujeres que se prostituyen por gusto, sino con víctimas de trata. Mujeres que son violadas todos los días, que a menudo ya en sus países de origen sufrían situaciones de violencia. En ocasiones, recuperarlas en un proceso que lleva años y muchísimo trabajo", continúa Mora.

El informe también denuncia el incremento patrimonial de la fundadora, Rocío Nieto, de 79 años, que ha llegado a acumular 14 inmuebles valorados en 10 millones de euros, pese a que no percibe sueldo alguno como presidenta, entre los que figura un chalé en Aravaca valorado en 3,5 millones que compró en 2018 y ya está libre de cargas hipotercarias. "A mi madre le ha ido bien en los negocios y la mayoría de los pisos proceden de antes de fundar Apramp. ¿Pero qué se creen, que se puede hacer lo que te dé la gana con fondos públicos? Nostros tenemos inspecciones sorpresa cada seis meses y nunca se ha detectado nada irregular", dice Mora.

Más allá del informe, la asociación ha recibido quejas a nivel laboral. "Es curioso, porque desde Apramp siempre achacan a la gran movilidad de trabajadoras las bajas que sufren, porque se trata de un trabajo duro y exigente. Y yo me pregunto, ¿entonces por qué casi siempre contratan a personas sin apenas experiencia laboral o recién salidas de la carrera?", comienza su diatriba M. T., quien prefiere guardar el anonimato por miedo a represalias laborales. Ella, que estaba contratada como auxiliar educativa, en sus funciones laborales no auxiliaba a nadie: "Tanto yo como mis compañeras de ese piso y de los demás estábamos solas con las mujeres usuarias del dispositivo", explica.

placeholder La presidenta y fundadora de Apramp, Rocío Nieto. (Isabel Blanco)
La presidenta y fundadora de Apramp, Rocío Nieto. (Isabel Blanco)

Así lo atestigua la sentencia 51/2022 del Juzgado Social nº 4 de Madrid, a la que ha tenido acceso El Confidencial. El escrito carga con dureza contra Apramp en los siguientes términos: “La empresa también ha intentado inducir a error a esta juzgadora confundiendo el personal del lote 1 y del lote 2”. A lo que se refiere, tal y como explica Juan Rubiño, el abogado del caso, es que la estrategia de Apramp en el proceso judicial pasó por llevar como testigos a trabajadoras de la entidad contratadas correctamente, pero de otros proyectos diferentes al de M. T., la afectada y denunciante. "La jueza se percató de que no tenían nada que ver y se lo recriminó en su sentencia", dice este letrado de Red Jurídica.

El caso que les ocurrió a estas dos extrabajadoras de Apramp no fue único. A Rubiño le consta que muchas de sus compañeras de los demás pisos que la asociación gestiona se encontraban en las mismas condiciones. ¿Por qué no denunciaron? M. T. responde: "Lo que más vi en Apramp fue miedo y tensión. Había bajas constantes por ansiedad. Es una empresa muy poderosa en el sector y la gente tiene miedo de denunciar el trato que reciben por si después les cuesta más encontrar otro trabajo, además de que la inmensa mayoría dura meses ahí dentro. Mucha gente sigue porque tiene que pagar el alquiler y comer, pero en cuanto encuentran algo diferente se marchan".

"Contratamos a 80 trabajadores cada temporada. Si los multiplicas por los 40 años que llevamos funcionando, te salen más de 3.000. ¿Y cuántos han acabado mal? ¿Cuatro?", lamenta Rocío Mora. "Todas estas noticias responden a una campaña de desprestigio, porque hay un proyecto de ley que amenaza a muchos de los que hacen un negocio boyante con el sexo".

"El informe es verdad. Y he escuhado por ahí que la siguiente puede ser Gabriela Bravo [consellera de Justicia, Interior y Administración Pública de Valencia]", zanjan desde la plataforma antiabolición.

Si está cansado de escuchar hablar del lenguaje inclusivo, la ley del solo sí es sí o el debate trans, prepárese porque se viene la madre de todas las guerras culturales: abolir la prostitución. El proyecto de ley, que se perfila como una de las grandes cuestiones antes de elecciones, hace extraños compañeros de cama: Vox podría votar junto a Bildu y el PP de la mano del PSOE.

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