El PP se pone de perfil ante la revisión de la ley del aborto en el TC y no secunda a Trillo

Más de 12 años después de su entrada en vigor, el Tribunal Constitucional comenzará a debatir este martes sobre la ley del aborto que salió adelante durante el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero. Cinco exdiputados del PP liderados por el exministro Federico Trillo lanzaron la pasada semana una ofensiva para intentar apartar a cuatro magistrados de la deliberación, pero según informan fuentes de Génova, el partido ha decidido no secundar su propuesta.

La maniobra de Trillo consiste en cuestionar la imagen de imparcialidad de los magistrados progresistas Cándido Conde-Pumpido, Juan Carlos Campo e Inmaculada Montalbán, así como de la conservadora Concepción Espejel. Su recusación apunta para ello a sus respectivas trayectorias como fiscal general, secretario de Estado de Justicia y vocales del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), puestos desde los que ya tuvieron que revisar la ley del aborto en su momento.

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Si los cuatro magistrados fueran apartados, el Constitucional no alcanzaría el mínimo de ocho miembros para arrancar la deliberación. Sin embargo, fuentes jurídicas advierten de que las recusaciones difícilmente saldrán adelante: aunque Espejel sí se ha mostrado a favor de abstenerse, esta decisión aún debe ser avalada o rechazada por el pleno que cuenta con mayoría progresista y, al mismo tiempo, los otros tres magistrados consideran que no deben dar un paso atrás.

Entre los argumentos que cuentan para rechazar la recusación, destaca que el tribunal se quedaría sin el quorum necesario para deliberar, que supuestamente no se han cumplido los plazos a la hora de pedir que los magistrados se aparten y que solo cinco exdiputados apoyan la misma, informan fuentes jurídicas. En cuanto a este último argumento, el mismo se basa en que el PP recurrió la ley del aborto en junio de 2010 con la firma de 50 diputados, pero solo cinco de ellos presentan ahora la recusación.

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Según apuntan las mismas fuentes, la mayoría progresista del Constitucional considera que estos exdiputados no representan a la totalidad y que sus argumentos para apartar a cuatro magistrados se esgrimen a título personal, una postura que se ve reforzada por el hecho de que la representación legal de la parte recurrente, el propio PP, no ha secundado la recusación: "Es una cosa de ellos, absolutamente suya", confirman fuentes de Génova a este diario.

El PP renuncia así a apoyar la ofensiva de Trillo contra la ley del aborto de Zapatero, una decisión que choca con lo ocurrido la pasada semana, cuando pidió apartar a los dos magistrados propuestos por el Gobierno, Juan Carlos Campo y Laura Díez, de los recursos interpuestos contra siete normativas: eutanasia, ley rider, ley Celaá... En todos estos casos, el PP sí cuestiona la imagen de imparcialidad de los dos magistrados, pero en lo que se refiere a la ley del aborto, opta por un perfil bajo.

La ponencia que discutirá el pleno

La ponencia de la futura sentencia corre a cargo del magistrado Enrique Arnaldo, de corte conservador. Como ya avanzó El Confidencial, la propuesta que llevará al resto de sus compañeros avala el grueso de la norma, pero plantea anular un artículo al considerar que no asegura el consentimiento informado de las mujeres. El debate girará así en torno a los datos obligatorios que se proporcionan a las mujeres que quieran interrumpir el embarazo en las primeras 14 semanas de gestación.

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Según las fuentes consultadas, la actual mayoría progresista del Constitucional no acepta esta tesis y considera que la ley del aborto debe ser avalada en su totalidad, lo que abre la puerta a dos posibilidades: que Arnaldo atienda sus argumentos y redacte una nueva sentencia o que el pleno acuerde cambiar de ponente.