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Génova vuelca toda la presión electoral sobre Mazón: "Valencia es la llave de la Moncloa"
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PRECAMPAÑA DEL 28-M

Génova vuelca toda la presión electoral sobre Mazón: "Valencia es la llave de la Moncloa"

La ciudad del Turia ha sido el escenario del PP para la reconciliación entre Rajoy y Aznar, que han respaldado juntos a Feijóo y Mazón en sus respectivas misiones electorales

Foto: Feijóo junto a Mazón, Catalá, Aznar y Rajoy. (EFE/Kai Forsterling)
Feijóo junto a Mazón, Catalá, Aznar y Rajoy. (EFE/Kai Forsterling)

La Comunidad Valenciana se ha convertido en el principal objetivo territorial del PP en las elecciones del próximo 28 de mayo, que Génova ha revestido de un carácter nacional para asestar, dicen, el primer gran golpe a Pedro Sánchez en las urnas. Pero ganar ese pulso al PSOE no será posible sin recuperar la autonomía más grande en la que gobiernan los socialistas, por lo que la presión sobre el candidato a la Generalitat, Carlos Mazón, y a la alcaldía de Valencia, María José Catalá, es mayúscula. "Conseguir o no la Comunidad Valenciana puede ser determinante para ganar o no las próximas elecciones generales", sentencia un barón popular, un diagnóstico que coincide con el sentir del resto del partido. "Valencia es la llave de la Moncloa".

El "simbolismo" y "peso" de esta región para el PP obliga a no dejar su destino en manos del azar. Desalojar a Ximo Puig de la Generalitat implicaría al mismo tiempo recuperar un feudo que estuvo teñido de azul durante décadas y reconciliarse con su pasado en la región. Este fin de semana, durante el gran cónclave intermunicipal del partido, los populares ya dieron un paso decisivo en ese sentido y ajustaron cuentas pendientes con Rita Barberá, a la que se rindió homenaje, se reivindicó su legado y se calificó como "la mejor alcaldesa del mundo".

Foto: El expresidente José María Aznar saluda a Mariano Rajoy durante la reunión intermunicipal del PP en Valencia. (EFE/Kai Forsterling)

El PP criticó la campaña de "destrozo" orquestada por el PSOE contra la que fue alcaldesa indiscutible de Valencia durante 24 años, pero fue el propio Partido Popular el que, en su día, levantó un cordón sanitario contra la regidora por su presunta implicación en casos de corrupción, una actitud que los populares trataron de enjuagar este fin de semana. El líder valenciano, Carlos Mazón, nunca ha ocultado su deseo de rehabilitar también en la vida pública a Francisco Camps tras "nueve archivos o absoluciones" en sus causas judiciales, aunque por el momento prefiere mantener la cautela por la última cuenta pendiente del expresidente valenciano con la Audiencia Nacional por la trama Gürtel, cuyo proceso comenzó el pasado 23 de enero.

El reto no es fácil, pero los populares valencianos aseguran que las encuestas les sonríen, tanto a nivel regional como municipal. Atribuyen esa tendencia a la inercia nacional de Núñez Feijóo y al propio desgaste que acumula el actual Ejecutivo de Ximo Puig, afectado por su presunta implicación en el caso Azud, a lo que se suma la polémica imputación de la exvicepresidenta Mónica Oltra por el supuesto encubrimiento de los abusos a una menor tutelada por los que fue condenado su exmarido.

Foto: Acto de homenaje a las exalcaldesas del PP en Valencia (EFE/Kai Forsterling)

A nivel autonómico, las encuestas internas del PP hablaban de un empate técnico entre los bloques de izquierda y derecha en la Comunidad Valenciana. Pero la balanza, según las mismas fuentes, empieza a inclinarse a su favor. Eso no significa que la presión sobre Carlos Mazón aminore. Más bien todo lo contrario. De hecho, en el entorno del mandatario reconocen que a veces "asusta" el peso que ha depositado la dirección nacional sobre sus hombros. Mazón fue el candidato que escogió Casado para dar la batalla en la Comunidad Valenciana cuando aún seguía al frente del partido, pero Feijóo respetó esa decisión cuando llegó a Génova. "Es el mejor", sostienen.

El propio Feijóo tampoco escondió este fin de semana lo mucho que le interesa, también a nivel personal, una victoria en la Comunidad Valenciana. Y no cualquier victoria, sino una "mayoría contundente", dijo, que aleje el fantasma de nuevos pactos con Vox. "Si no consigo ganar, no merezco ser presidente del Gobierno. Por tanto, ayudad un poco, echad una mano", pronunció este domingo ante más de 4.000 personas, según los cálculos del partido, que se dieron cita en la Ciudad de las Artes y las Ciencias para presenciar el primer gran acto preelectoral del Partido Popular, y el más grande que ha presidido Feijóo desde que abandonó la Xunta para ponerse al frente del PP.

placeholder Alberto Núñez Feijóo acompañado por los expresidentes del Gobierno José María Aznar y Mariano Rajoy. (EFE)
Alberto Núñez Feijóo acompañado por los expresidentes del Gobierno José María Aznar y Mariano Rajoy. (EFE)

Génova quiso compensar esa presión a Mazón y Catalá con cierta ayuda. Lo cierto es que el congreso que este fin de semana ha puesto alfombra roja a los dos candidatos valencianos y al resto de dirigentes municipales será recordado como el cónclave de la reconciliación, el que reunió por primera vez en años a Mariano Rajoy y José María Aznar en un mismo escenario para superar las batallas del pasado, cerrar heridas, y respaldar tanto a Feijóo como a Mazón en sus respectivas misiones. Una imagen potente, capaz, incluso, de tener un impacto electoral de cara a próximos comicios. "Han colocado una gran rampa de salida", resumían voces populares, en alusión a las consecuencias del 'abrazo' entre los dos expresidentes del Gobierno.

A petición de José María Aznar, el himno de la Comunidad Valenciana y el de España sonaron hasta en dos ocasiones en la Ciudad de las Artes de Valencia, un gesto que, como recordó el expresidente del Gobierno, retrotrae a los años de bonanza del partido en la región. Un broche final a dos jornadas que el PP sitúa como el origen de la conquista valenciana primero, y de la Moncloa después.

La Comunidad Valenciana se ha convertido en el principal objetivo territorial del PP en las elecciones del próximo 28 de mayo, que Génova ha revestido de un carácter nacional para asestar, dicen, el primer gran golpe a Pedro Sánchez en las urnas. Pero ganar ese pulso al PSOE no será posible sin recuperar la autonomía más grande en la que gobiernan los socialistas, por lo que la presión sobre el candidato a la Generalitat, Carlos Mazón, y a la alcaldía de Valencia, María José Catalá, es mayúscula. "Conseguir o no la Comunidad Valenciana puede ser determinante para ganar o no las próximas elecciones generales", sentencia un barón popular, un diagnóstico que coincide con el sentir del resto del partido. "Valencia es la llave de la Moncloa".

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