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Feijóo facilitará a Sánchez su primer decreto del año pese a la voladura de puentes con Moncloa
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EN PLENA CARRERA ELECTORAL

Feijóo facilitará a Sánchez su primer decreto del año pese a la voladura de puentes con Moncloa

Génova no se opondrá al paquete anticrisis, aunque incluya nuevos controles a los alquileres. El PP busca pinchar la estrategia del Gobierno de situar a Feijóo en el "no a todo" para neutralizar su etiqueta de hombre moderado

Foto: El presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, junto al vicesecretario de Economía, Juan Bravo. (EFE/José Manuel Pedrosa)
El presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, junto al vicesecretario de Economía, Juan Bravo. (EFE/José Manuel Pedrosa)
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Alberto Núñez Feijóo inicia 2023 apuntalando la imagen en la que ya trabajó el año anterior: la moderación por bandera y la economía en el centro del debate. Por "coherencia", el Partido Popular no se opondrá al nuevo decreto anticrisis con el que Pedro Sánchez ha arrancado un año clave para su futuro político, a pesar de la manifiesta voladura de puentes con la Moncloa. Génova continuará con la hoja de ruta que ya emprendió el pasado mes de julio, cuando el grupo parlamentario popular pasó del no a la abstención en el segundo paquete de medidas del Gobierno para combatir la crisis económica y energética. Pese a la larga lista de descalificativos de los socialistas, optan por la "prudencia" ante unas propuestas que califican de "insuficientes", pero que copian parte del programa en que el líder de la oposición lleva insistiendo meses. "Lo que queremos dejar claro es que no nos opondremos a nuestras propias medidas", resumen fuentes de la dirección.

La casi segura abstención del PP no alterará la mayoría con que ya cuenta el Ejecutivo, pero facilitará su aprobación sin que tenga que hacer grandes equilibrios con socios como ERC, que ya trasladó sus recelos con el nuevo paquete para contener la inflación e instó al Gobierno a "ir más allá" interviniendo, por ejemplo, los beneficios de los grandes supermercados. La estrategia de Génova pasa, en primer lugar, por reivindicar que Sánchez sigue "tarde y mal" la senda que ya marcó Feijóo hace meses con la rebaja del IVA en la cesta de la compra —que el PP exige desde septiembre— o las ayudas económicas dirigidas a las familias vulnerables. Recuerdan los populares que Sánchez ya siguió la misma estrategia en julio, cuando aprobó una rebaja del IVA de la factura eléctrica del 10% al 5%.

El decreto anticrisis del Ejecutivo incluirá, a instancias de Unidas Podemos, una congelación de contratos de alquiler que vayan a finalizar en los próximos seis meses, una iniciativa que "chirría" en las filas populares, pero que no alterará la decisión del PP de facilitar el nuevo decreto legislativo. "No es un motivo por el que nos moveríamos hacia el voto en contra", sentencian en la cúpula de Génova. "No ha habido negociación alguna con el Gobierno, pero por coherencia no podemos decir que no", insisten.

La estrategia de la dirección popular tiene también letra pequeña. Con esta decisión, el PP trata de pinchar la estrategia de Sánchez de situar a Feijóo junto a Abascal: en el "no a todo" y en el marco de una "oposición destructiva" para "justificar sus alianzas con independentistas y populistas". Génova asume que la Moncloa trata de neutralizar la etiqueta de hombre moderado con que el líder popular accedió a la presidencia del partido. En un año en que cada gesto puede tener consecuencias en las urnas, el jefe de la oposición trata de mantener intacta su imagen de líder "transversal" para seguir abriendo fugas en el electorado del PSOE, en el que atisba al menos a 600.000 socialistas "alarmados" con Sánchez. "Saber que pueden contar con nuestra abstención les ha puesto nerviosos", sintetizan.

El PP mantendrá el rumbo fijo y, como detalló Juan Bravo este lunes en la primera rueda de prensa del año, Génova solo volverá al no en caso de que Sánchez aproveche la tramitación parlamentaria para colar otras iniciativas de su agenda legislativa que nada tienen que ver con la inflación o la economía, como ya ocurrió con el decreto energético que hace unos meses mezcló la obligatoriedad de ahorrar energía en edificios administrativos o escaparates comerciales con ayudas a estudiantes o al transporte. Si hay cóctel legislativo, advierten, el PP volverá a la oposición dura.

Foto: La ministra de Transportes, Raquel Sánchez. (EFE/Mariscal)

Por el momento, Génova tampoco ha cerrado la puerta a pasar de la abstención al sí. Es una puerta que el vicesecretario de Economía del PP dejó abierta este lunes, pero que, en privado, fuentes de la dirección ven prácticamente imposible. Primero porque implicaría posicionarse junto a fuerzas como Bildu en una votación parlamentaria, y segundo porque Feijóo ha puesto una serie de condiciones antes de abrirse a estudiar siquiera este escenario, que pasan por que el Ejecutivo amplíe el rosario de propuestas ya anunciadas y las acerque aún más a las defendidas por Feijóo, empezando por extender la rebaja del IVA de la cesta de la compra a la carne, el pescado o las conservas, productos que se han quedado fuera del manto del Gobierno. Para el PP, "los españoles han pagado ya" y con creces esas medidas, aludiendo al exceso de recaudación fiscal de "hasta 33.000 millones de euros".

El primer partido de la oposición considera también que la piedra angular de un paquete de medidas para combatir la inflación debe pasar, necesariamente, por nuevas reducciones impositivas. En este sentido, el PP vuelve a poner negro sobre blanco la necesidad de eliminar el impuesto al plástico o retirar el nuevo gravamen a las grandes fortunas, así como devolver ese exceso de recaudación mediante una deflactación de la tarifa del IRPF para rentas de hasta 40.000 euros, una iniciativa en la que Feijóo lleva insistiendo desde que llegó a la séptima planta de Génova.

Foto: El líder del PP, Núñez Feijóo, a su llegada al Senado. (EFE/Juan Carlos Hidalgo)

Los populares proponen también mantener la bonificación de los carburantes a autónomos y rentas medias y bajas; incrementar el minicheque dirigido a las familias vulnerables; poner en marcha planes para mantener el sistema de pensiones, o simplificar trabas burocráticas para la tramitación de ayudas estatales que dificultan la ejecución real de las medidas. En privado, las fuentes consultadas opinan que el Gobierno ampliará el paquete económico con el que ha comenzado 2023, pero apuntan que la nueva "lluvia de millones" se producirá más cerca de las elecciones y sin el concurso del primer partido de la oposición.

Génova niega contacto alguno con el Ejecutivo desde la voladura de puentes que llevó a los dos primeros partidos de España a un punto de no retorno. El PP mantiene el mensaje de que siempre mostrará "voluntad negociadora", pero asume que llegar a algún tipo de acuerdo en lo que resta de legislatura es imposible. La crisis institucional que sacudió las Cortes en diciembre dio al traste con toda posibilidad de acercamiento, ni en el plano económico, ni en el social, ni mucho menos en el judicial. La Moncloa descarta también intentar algún tipo de tregua con Feijóo y se lanza a una operación derribo contra el jefe de la oposición. Los teléfonos no se descolgarán. PSOE y PP han activado ya el modo campaña.

Alberto Núñez Feijóo inicia 2023 apuntalando la imagen en la que ya trabajó el año anterior: la moderación por bandera y la economía en el centro del debate. Por "coherencia", el Partido Popular no se opondrá al nuevo decreto anticrisis con el que Pedro Sánchez ha arrancado un año clave para su futuro político, a pesar de la manifiesta voladura de puentes con la Moncloa. Génova continuará con la hoja de ruta que ya emprendió el pasado mes de julio, cuando el grupo parlamentario popular pasó del no a la abstención en el segundo paquete de medidas del Gobierno para combatir la crisis económica y energética. Pese a la larga lista de descalificativos de los socialistas, optan por la "prudencia" ante unas propuestas que califican de "insuficientes", pero que copian parte del programa en que el líder de la oposición lleva insistiendo meses. "Lo que queremos dejar claro es que no nos opondremos a nuestras propias medidas", resumen fuentes de la dirección.

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