Es noticia
Las estructuras territoriales de Podemos se rinden a Díaz y obvian la guerra de Iglesias
  1. España
Sumar en los territorios

Las estructuras territoriales de Podemos se rinden a Díaz y obvian la guerra de Iglesias

La tensión se queda en Madrid. Los líderes territoriales y la militancia de Podemos e IU ayudan a organizar los actos de Sumar. Este domingo se cumple un año del 'pecado original' que Iglesias atribuye a Díaz

Foto: Yolanda Díaz, en un acto de Sumar en Sabadell. (EFE/Quique García)
Yolanda Díaz, en un acto de Sumar en Sabadell. (EFE/Quique García)
EC EXCLUSIVO Artículo solo para suscriptores

Hace exactamente un año de una de las mejores fotografías del arranque del camino político propio de Yolanda Díaz. También de su progresivo alejamiento de Podemos. Este domingo se cumple el primer aniversario del acto Otras Mujeres, organizado por Compromís en Valencia, cuando el ex secretario general de los morados le reprochó que no contara con su sucesora, Ione Belarra, al rodearse de Ada Colau, Mónica García, Mónica Oltra y Fátima Hamed. La imagen resultante se hizo icónica. Díaz, ya entonces un claro valor en alza en el Ejecutivo, se rodeaba de distintas políticas, pero no concedía una foto a Belarra o Irene Montero, el principal valor político de la formación. Y cada vez es menos frecuente que lo haga.

"Había muchos militantes de Podemos en ese acto que era como... compañera, te hemos hecho vicepresidenta, te hemos hecho ministra. ¿Por qué no está Ione Belarra a tu lado? Respétanos", reclamó Iglesias el lunes, desde los micrófonos de la Cadena SER, acotando así el origen de los agravios de Díaz a Podemos. Sin embargo, en el acto participó únicamente una dirigente por espacio político, y vicepresidente de la Generalitat valenciana, Héctor Illueca (Podemos), estaba entre el público. Este esquema es parecido al que se ha sucedido en cada uno de los 7 actos de escucha de Sumar celebrados fuera de Madrid, al menos hasta la fecha.

Foto: Pablo Iglesias y Yolanda Díaz. (EFE/Archivo/David Fernández) Opinión
TE PUEDE INTERESAR
Iglesias-Yolanda: radiografía de un divorcio
Antonio Casado

Lejos de las dinámicas de la dirección estatal, de la tensión entre los socios de Gobierno, y de los nervios por las encuestas que dan mayoría a PP y Vox, el clima es otro. De cara a esos actos, a pesar de que dos de ellos (en Pamplona y en Logroño) se han celebrado tras el inicio de la ofensiva de Podemos contra Díaz, la tensión y el malestar de la cúpula morada no ha traspasado la M-40. Al menos, no visiblemente. Los reproches sobre la actitud de Díaz, sus supuestas faltas de respeto, no han tenido reflejo en estos actos.

La Universidad de Otoño ha servido para tomar una foto fija de la tensión vivida estos días. Pero el análisis de lo ocurrido en los territorios en los últimos dos meses, cuando el clima entre Díaz y Podemos ya se había agriado sensiblemente, y mientras los morados le exigían negociar las listas de tú a tú, para forjar una coalición electoral, aporta una secuencia de vídeo con nuevos matices, y también con menos tensiones visibles. De hecho, son los dirigentes, cuadros y militantes de los morados o Izquierda Unida quienes ayudan a concretar los detalles de los actos de escucha de Díaz.

Foto: La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz (c), presenta Sumar Navarra. (EFE/Villar López)

Son estas formaciones quienes apoyan con tareas logísticas, quienes ejercen como puente con las organizaciones de la sociedad civil en los territorios; son quienes radiografían sus realidades, y en ocasiones hasta quienes han impreso algunos de los carteles de los eventos de Sumar.

Desde que la vicepresidenta segunda retomó el proyecto, en septiembre, y desde Galicia a Euskadi, pasando por Extremadura, estas estructuras han tenido un peso fundamental. Esto lo reconocen desde la plataforma de Díaz, pero también las estructuras consultadas. "El acto lo montamos nosotros", aseguran desde una de las direcciones autonómicas de la formación morada.

Foto: Pablo Iglesias y Yolanda Díaz en mayo de 2021. (EFE/David Fernández)

Los partidos suelen tener asientos reservados, en segunda o tercera fila, y las fotografías de cada uno de los actos muestran a Díaz con los respectivos líderes y cuadros. Y arrojan escenas poco comunes, como la fotografía entre Juatnxo López de Uralde y Rosa Martínez, que en su día compartieron la dirección de Equo, y que Martínez abandonó por las dificultades para desempeñar su cargo. La exdiputada dejó Madrid en 2019, y el acto de Díaz sirvió para volver a juntarlos.

Se da una suerte de "amnistía", al menos durante los actos de escucha, reconocen desde otro territorio. La inmensa mayoría de dirigentes territoriales pertenecen al sector oficialista del partido —quedan muy pocos críticos—, y algunos, como la secretaria general de Podemos en Extremadura, Irene de Miguel, forman parte también de la dirección estatal de Ione Belarra, donde la reconocen como un valor en alza. Y eso no impide que el equipo de la vicepresidenta segunda en la plataforma se deshaga en halagos a su trabajo.

En los territorios, además, se sirven de sus perfiles en redes para amplificar las escenas de estos actos, los abrazos de sus dirigentes con Díaz (Podemos Navarra), o para alabar a Díaz: "Tengo que confesaros que escuchar a Yolanda Díaz contar las medidas de Unidas Podemos en presupuestos, fiscalidad, derechos laborales… emociona. Orgullo de Ministra de Trabajo y un placer escuchar a la sociedad civil asturiana", tuiteó Alba González, candidata oficialista a representar al partido en Asturias, derrotada en primarias por la candidata crítica. González la respaldó en este acto antes de que se celebraran las primarias. Y lo mismo se puede decir de Pilar Garrido, líder de Podemos en Euskadi, o de Jessica Albiach, de Podem Cataluña.

La ofensiva de la dirección de Podemos, en la que Iglesias ejerce como mascarón de proa, hasta la fecha, tiene un importante reflejo en los medios de comunicación, en la forma de rehuir las declaraciones públicas de los portavoces, en las alusiones más o menos veladas de todas las partes, incluida la propia Díaz.

Hasta el momento, sin embargo, no parece haber afectado a la agenda de la impulsora de Sumar. En sus actos, aunque los partidos están llamados a ocupar un segundo lugar, sus principales dirigentes suelen acudir a participar, a conversar con Díaz y a hacerse fotografías con ella. Esto también le sirve para lucir apoyos y tejer complicidades. El recado, además, llega a la cúpula morada.

Hace exactamente un año de una de las mejores fotografías del arranque del camino político propio de Yolanda Díaz. También de su progresivo alejamiento de Podemos. Este domingo se cumple el primer aniversario del acto Otras Mujeres, organizado por Compromís en Valencia, cuando el ex secretario general de los morados le reprochó que no contara con su sucesora, Ione Belarra, al rodearse de Ada Colau, Mónica García, Mónica Oltra y Fátima Hamed. La imagen resultante se hizo icónica. Díaz, ya entonces un claro valor en alza en el Ejecutivo, se rodeaba de distintas políticas, pero no concedía una foto a Belarra o Irene Montero, el principal valor político de la formación. Y cada vez es menos frecuente que lo haga.

Yolanda Díaz Unidas Podemos Pablo Iglesias
El redactor recomienda