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El Gobierno lanza un descuento del 40% en la factura eléctrica para 1,5 M de vulnerables
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NUEVO PAQUETE DE MEDIDAS CONTRA LA INFLACIÓN

El Gobierno lanza un descuento del 40% en la factura eléctrica para 1,5 M de vulnerables

Las ayudas se extenderán a las familias con caldera centralizada. Se creará una factura regulada para limitar hasta finales del 2023 el incremento trimestral de los precios

Foto: El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en el Congreso de los Diputados. (EFE/J. J. Guillén)
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en el Congreso de los Diputados. (EFE/J. J. Guillén)

Nuevo paquete de medidas para limitar el impacto de la escalada en los precios del gas, tanto en las economías domésticas como en la inflación. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha adelantado esta mañana en el Congreso que el próximo martes se llevará al Consejo de Ministros un plan dotado con 3.000 millones de euros para ampliar el escudo social ante las consecuencias económicas de la guerra, centrado principalmente en hogares vulnerables. En primer lugar, se creará una nueva categoría de consumidores vulnerables con derecho a un descuento del 40% en sus facturas. Este será de carácter temporal para hogares trabajadores con ingresos reducidos, aunque el jefe del Ejecutivo no ha especificado la duración de su aplicación.

Las ayudas se centrarán asimismo en las familias con caldera centralizada a través de una factura regulada. El objetivo pasa por limitar hasta finales del 2023 el incremento trimestral de los precios. Según las cifras anunciadas por Sánchez, esta medida permitiría a 1,7 millones de hogares que su factura se reduzca a más de la mitad de lo que se pagaría con las condiciones de mercado actuales. Por otro lado, se reforzará el bono social eléctrico para los hogares que ya lo perciben —más de un millón—, aumentando el descuento aplicado hasta el 65% y el 80% a los beneficiarios considerados vulnerables y vulnerables severos, respectivamente. El bono social térmico, finalmente, duplicará su presupuesto, doblando así la ayuda media hasta los 375 euros por hogar y elevando la ayuda mínima a 40 euros.

El plan para reducir el alza de los precios en la factura no ha sido el único anuncio en la intervención de Sánchez de esta mañana. En materia de reto demográfico, el presidente del Gobierno ha adelantado que se reducirán las cotizaciones empresariales en los contratos indefinidos ya existentes y en los nuevos contratos indefinidos que se firmen para las provincias de Soria, Teruel y Cuenca. Una reducción que se justifica por la inclusión de estas tres provincias por parte de la Comisión Europea en el denominado Mapa de Ayudas de Finalidad Regional. Las cotizaciones se reducirán entre el 5 y el 20%, en función de que se trate de contratos existentes o nuevos y del tamaño del municipio donde se sitúe la sede social y fiscal de la empresa, según concretan fuentes del Gobierno.

El nuevo plan se suma a una serie de cuatro decretos aprobados desde que se inició la invasión rusa de Ucrania para contener sus consecuencias económicas. Medidas como las ayudas al transporte, la bonificación en el precio de la gasolina o las rebajas en el IVA de la factura eléctrica por los que se han movilizado 10.000 millones de euros. En su comparecencia a petición propia para dar cuenta de la reunión del Consejo Europeo del pasado 7 de octubre e informar sobre las medidas económicas y sociales adoptadas por el Gobierno para dar respuesta a la crisis provocada por la guerra, Sánchez ha realizado un relato triunfalista porque "las medidas están funcionando" y ha vuelto a cargar las tintas contra la oposición por su falta de respaldo a sus iniciativas, calificando al PP de "negacionismo".

Un triunfalismo que choca con el pesimismo de las últimas previsiones del FMI. Este organismo ha revisado el crecimiento del PIB el próximo año, al rebajarlo a la mitad de lo previsto en los Presupuestos. Nuestro país crecerá el año que viene un 1,2%, ocho décimas menos de lo proyectado en julio y apenas la tercera parte de lo que la institución, con sede en Washington, calculaba en abril.

Como viene tratando de incidir Sánchez desde su cara a cara con Alberto Núñez Feijóo en el Senado, el líder de los socialistas ha querido enterrar cualquier discontinuidad entre el mandato del presidente del PP y su antecesor. "Como en la pandemia", acusó el presidente del Gobierno al líder de la oposición, los populares estarían centrados en "acosar y derribar al gobierno en dos de los momentos más críticos de la historia reciente de España".

Foto: El portavoz del PP en el Congreso, Cuca Gamarra. (EFE/Javier Lizón)

El tono del presidente del Gobierno contra los populares ha vuelto a ser encendido, a pesar de que sobrevuela el acercamiento entre ambos partidos para acordar la renovación del CGPJ. El debate parlamentario de este jueves, en el que no ha podido intervenir Feijóo al carecer de escaño en el Congreso, es un anticipo del cara a cara entre ambos líderes que se producirá el próximo martes en el Senado. Eso sí, volverá a producirse en condiciones desiguales, después de que se rechazase ampliar el tiempo de intervención del líder de la oposición tras la petición expresa del PP en la Junta de Portavoces del Senado. A siete meses de las elecciones municipales y autonómicas, que supondrán una suerte de primera vuelta para las generales de finales de año, los discursos ya están completamente impregnados de electoralismo.

Sánchez ha incardinado en plena sintonía con la UE la receta del Gobierno frente a la crisis energética y las consecuencias económicas de la guerra. Una respuesta social, según defendió, en contraposición a los recortes en el Estado de bienestar adoptados tras la crisis financiera de 2008. En esta línea se ha arrogado un papel protagonista en las decisiones europeas.

"Nos hemos hecho valer y nos han escuchado", destacó para poner en valor que medidas polémicas como la creación de nuevos impuestos a la banca, las energéticas o las grandes fortunas son de "consenso" europeo. En esta línea ha vuelto a mirar con grandes expectativas una reforma del mercado eléctrico por parte de Bruselas, como ya demandó Sánchez sin éxito antes de la guerra, pero que ahora se ha puesto sobre la mesa en forma de compromiso por parte de la Comisión Europea. La intención pasa por desacoplar el precio del gas del precio mayorista. Una medida que, más allá de la excepción ibérica, siempre se defendió como la más útil para bajar el precio de la factura de la luz y, por ende, para revertir la escalada inflacionista.

Nuevo paquete de medidas para limitar el impacto de la escalada en los precios del gas, tanto en las economías domésticas como en la inflación. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha adelantado esta mañana en el Congreso que el próximo martes se llevará al Consejo de Ministros un plan dotado con 3.000 millones de euros para ampliar el escudo social ante las consecuencias económicas de la guerra, centrado principalmente en hogares vulnerables. En primer lugar, se creará una nueva categoría de consumidores vulnerables con derecho a un descuento del 40% en sus facturas. Este será de carácter temporal para hogares trabajadores con ingresos reducidos, aunque el jefe del Ejecutivo no ha especificado la duración de su aplicación.

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