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Los vocales confirman que la renovación del TC continuará atascada hasta final de mes
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Nueva reunión sin avances

Los vocales confirman que la renovación del TC continuará atascada hasta final de mes

Los conservadores reclaman "eficiencia y no urgencia" mientras que los progresistas no se hacen responsables de la dilación

Foto: Reunión de los vocales del CGPJ. (Cedida)
Reunión de los vocales del CGPJ. (Cedida)

La última de las reuniones celebradas por los vocales del Consejo General del Poder Judicial para estudiar el apoyo a la incorporación de dos magistrados al Tribunal Constitucional ha acabado como las anteriores, sin avances. Superado ya el plazo que les fijó el Gobierno para decidir, los integrantes del Consejo se han limitado a constatar que el procedimiento requiere de "eficiencia" y no de "urgencia". El grupo conservador ha asegurado en un comunicado que siguen sin candidatos y que, de momento, solo un magistrado del Supremo se les ha ofrecido "de forma oficiosa".

El encuentro ha transcurrido con "total cordialidad", pero sin resultados. Progresistas y conservadores coinciden en la necesidad de lograr amplias mayorías y aseguran que su más firme compromiso es el de cumplir con las competencias propias del Consejo para los nombramientos en cuestión. Ahora bien, solo aquellos candidatos seleccionados tras análisis y deliberación a conciencia serán propuestos como tales por los más cercanos a la derecha. "A tal efecto, el grupo buscará a aquellos aspirantes que, por su excelencia, considere idóneos para tan alta magistratura", añade este sector.

Foto: El presidente del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) , Carlos Lesmes, preside el pleno extraordinario. (EFE)

Por su parte, los progresistas han fracasado en su intento de acelerar los tiempos. Querían intentar una votación en el próximo pleno convocado, que debe celebrarse el día 29. No obstante, el grupo de la derecha ha manifestado que, a día de hoy, "no están en condiciones de presentar candidatos" y no consideran que deba producirse la designación ese día. "No nos hacemos responsables de la dilación que se está produciendo en la designación de los magistrados para el Tribunal Constitucional", asegura este sector. Precisamente, el día 30 está prevista la visita del comisario de Justicia de la UE. La esperanza es que su mediación sirva para resolver la actual crisis.

De momento, el pleno se ha limitado a acordar las reglas a seguir: el cuórum de votación será de tres quintos del número de miembros presentes, no habrá próximo pleno hasta que lo convoque el presidente por propia iniciativa o lo soliciten al menos cinco vocales, la solicitud de convocatoria del pleno deberá incluir los nombres de dos candidatos y, una vez convocado el pleno, los vocales podrán presentar propuestas de aspirantes adicionales hasta el mismo momento del inicio de la sesión.

A partir de ahí, los vocales podrán votar un máximo de dos candidatos en cada votación, y la designación se tendrá por realizada solo en caso de que dos de ellos hayan obtenido el número de votos exigido por el cuórum de votación previsto para el nombramiento, ya sea de manera simultánea o sucesiva. En caso de que ningún candidato obtuviera el número suficiente de votos, esa circunstancia no impedirá que en las sesiones sucesivas del pleno se puedan proponer los mismos candidatos.

Un fracaso anunciado

El retraso se ha producido después de que ocho de los vocales, del grupo conservador, acordaran que harían precisamente lo que están haciendo. El compromiso suscrito por Juan Martínez Moya, Nuria Abad, Gerardo Martínez-Tristán, José María Macías, José Antonio Ballestero, Ángeles Carmona, Juan Manuel Fernández y Carmen Llombart es el de estudiar a su ritmo una propuesta de consenso. Como el número necesario para que cualquier designación salga adelante es de 12, dejan a quienes quieren avanzar con uno menos, 11. El grupo, que ha acordado actuar conjuntamente, no se niega a nombrar, pero sí a las presiones de cumplir con fechas y plazos.

Las perspectivas de un acuerdo inmediato eran mínimas. Los ocho vocales ven la reforma del Gobierno que les exige nombrar como una utilización en beneficio propio de la institución. Un plan que se reduce a la intención del Ejecutivo de alcanzar más pronto que tarde una mayoría progresista en el Constitucional. Pese a ello, el presidente, Carlos Lesmes, trabaja para activar posibles pactos, aunque la amenaza que lanzó de dimitir si Pedro Sánchez y Alberto Núñez Feijóo no impulsan una renovación del CGPJ inminente no ayuda a que haya urgencia.

Foto: Margarita Robles. (EFE/Martin Divisek)

Lesmes convocó este pleno extraordinario después de que las Cortes aprobaran la nueva reforma de la Ley Orgánica del Poder Judicial, que devolvió atribuciones al Consejo en funciones exclusivamente para aprobar los nombramientos de los magistrados del Tribunal Constitucional, cuya designación corresponde al órgano. El Ejecutivo introdujo, además, el mencionado límite temporal que ya se ha incumplido.

Esta reforma modificó de nuevo la Ley Orgánica del Poder Judicial para permitir ahora al CGPJ nombrar a los dos magistrados que le corresponden para renovar el Tribunal Constitucional. Mantiene, sin embargo, la prohibición de que el órgano de gobierno de los jueces realice nombramientos en otros tribunales como el Supremo o los tribunales superiores de Justicia.

De esta forma, el PSOE se ahorra pasar por una negociación con el PP que podría dilatar su objetivo y pretende acelerar el cambio en el TC para que este pase a contar con mayoría progresista y un presidente o presidenta de esta sensibilidad. El retraso o paralización completa de la elección de los dos magistrados que le toca designar al Consejo es una variable que maneja el Gobierno, que no descarta, en ese caso, nombrar a sus dos de forma independiente, con lo que su proyecto inicial fracasaría.

La última de las reuniones celebradas por los vocales del Consejo General del Poder Judicial para estudiar el apoyo a la incorporación de dos magistrados al Tribunal Constitucional ha acabado como las anteriores, sin avances. Superado ya el plazo que les fijó el Gobierno para decidir, los integrantes del Consejo se han limitado a constatar que el procedimiento requiere de "eficiencia" y no de "urgencia". El grupo conservador ha asegurado en un comunicado que siguen sin candidatos y que, de momento, solo un magistrado del Supremo se les ha ofrecido "de forma oficiosa".

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