Feijóo desempolva la financiación autonómica para reconquistar la Comunidad Valenciana

El de la financiación autonómica es uno de esos debates que los líderes políticos intentan evitar por las tensiones que levanta en sus propias organizaciones. Durante un tiempo, Alberto Núñez Feijóo encabezó las reivindicaciones de ocho comunidades autónomas de tres partidos distintos para consensuar una postura común sobre el reparto de los fondos y enviar la propuesta al Ministerio de Hacienda. El modelo que defendía como presidente de la Xunta confronta con el de otros barones del PP, como es el caso de Juanma Moreno. Quizá por ese motivo, el líder gallego ha evitado abrir ese melón desde su salto a la política nacional... hasta este jueves. Coincidiendo con una visita a la Comunidad Valenciana, Feijóo defendió las reivindicaciones de la región en materia de financiación pese a chocar, en parte, con los criterios que él mismo defendía cuando llevaba las riendas en Galicia.

El líder del PP dio forma a su compromiso para reformar la financiación autonómica, aunque manteniendo el equilibrio que le demanda su nueva condición como líder nacional del partido. A nivel político y electoral, el reparto de los fondos es una de las principales batallas del gobierno valenciano, y Feijóo no dejará escapar esa baza a las puertas de un año electoral. "A menudo se ha presentado la financiación autonómica como una fuente de conflicto que paraliza cualquier puesta en común", comenzó. "También se especuló con que mi llegada al PP de España iba a torpedear mi posición. Lamento decir que eso no es así. Sigo creyendo que la reforma del sistema de financiación es uno de los mayores retos en la gestión de la España de las autonomías". El lugar donde pronunció estas palabras no es baladí: ante la asociación que aglutina los 160 empresarios más influyentes de la Comunidad Valenciana.

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En este escenario, Feijóo reiteró su apuesta por que el criterio fundamental a la hora de repartir los fondos entre las comunidades autónomas sea el del "coste efectivo de los servicios que prestan", por ejemplo en cuestiones como la sanidad o la educación. Es el mismo planteamiento que llevaba el entonces presidente de la Xunta a la cumbre con los mandatarios de la España despoblada -Asturias, La Rioja, Aragón, Castilla-La Mancha, Castilla y León, Cantabria y Extremadura- con la diferencia de que entonces la consideración era que el coste real de los servicios era mayor en aquellas regiones con territorios muy extensos, con dificultades orográficas y con pocos habitantes. La bandera que este jueves desplegó Núñez Feijóo en la ciudad del Turia fue otra: dio valor al factor poblacional, en línea con las reivindicaciones del bloque compuesto por Andalucía y Comunidad Valenciana.

"Yo creo en el coste efectivo de los servicios, y no en las componendas que necesita el Gobierno de turno para que sus socios parlamentarios le den el visto bueno", repitió el jefe de la oposición, para señalar a continuación que la comunidad con menos ingresos por población real ajustada es la Comunidad Valenciana, seguida de la Región de Murcia. "Son comunidades infrafinanciadas. Eso es un hecho objetivo. No debemos ocultar las cifras", reivindicó, poniendo encima de la mesa su compromiso con la comunidad de cara a una futura reforma del sistema de financiación si logra llegar a Moncloa.

En su cita con los empresarios de la región, Feijóo culpó al nacionalismo de que en cuatro años no haya habido ninguna propuesta en el marco de la financiación porque Sánchez no cuenta "con el visto bueno de ERC". De hecho, denunció que la última actualización del modelo corresponde a 2009, cuando el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero "pactó" el reparto de los fondos con el tripartito catalán.

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Además de la financiación, Feijóo se puso en modo electoral exigiendo la finalización del Corredor Mediterráneo y pidiendo "cooperación" a otras comunidades autónomas. Defendió en todo momento que las reivindicaciones de la Comunidad Valenciana en cuanto a fondos y en cuanto a infraestructuras son "justas" y, de paso, se presentó a sí mismo como alternativa a un Gobierno que "renuncia a cambiar el rumbo de una nave que corre el riesgo de chocar contra un iceberg".

Valencia, clave para llegar a Moncloa

Feijóo llegó este jueves a Valencia con una intensa agenda por delante para apuntalar al candidato con el que pretende recuperar un feudo que sitúan como "clave" en el próximo ciclo electoral para llegar a Moncloa. Carlos Mazón fue el candidato que escogió Pablo Casado para dar esa batalla, pero Núñez Feijóo no le ha retirado esa confianza y será su apuesta para 2023 ante un Ximo Puig "agotado". Lo mismo sucede con María José Catalá para la alcaldía de Valencia, que ha ganado enteros en las últimas semanas por el hundimiento de Compromís. Fuentes de Génova ven "posibilidades reales" de dar un vuelco en la región cuando vuelvan a abrirse las urnas, y creen que el cambio de ciclo que comenzó en Andalucía les permitirá volver a teñir de azul la región.

"Jugamos con la ventaja de que en la Comunidad Valenciana ya se ha votado al PP", analizan fuentes de la dirección. Sin ánimos de quitar importancia al resto de territorios y dando por sentado que Isabel Díaz Ayuso revalidará su mayoría en la Comunidad de Madrid, la Comunidad Valenciana se ha convertido en la región más importante para los populares y donde desplegarán más esfuerzos de cara a mayo de 2023 por su "potencia electoral" en el ámbito nacional.