Podemos pacta con Moncloa silenciar su crítica por la tragedia en Melilla

Unidas Podemos ha acordado con Moncloa que la posición oficial del Gobierno sobre la tragedia ocurrida durante el último salto a la valla de Melilla, con al menos 23 migrantes muertos, sea la trasladada por la parte socialista. Entre la censura y la autocensura ha discurrido este mediodía la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros, en la que la portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, ha contestado a las preguntas dirigidas directamente a la ministra de Igualdad por Unidas Podemos, Irene Montero, sobre su postura respecto a la tragedia ocurrida el pasado viernes y la actuación de las fuerzas de seguridad marroquíes.

Hasta en cinco ocasiones, Rodríguez ha respondido en su lugar, mientras que Montero ha evitado incluso aclarar si asumía la versión del Ejecutivo, que respalda la actuación de Marruecos y culpa de las muertes a las mafias. Solo con una ligera negativa de cabeza, la titular de Igualdad ha dado a entender un desacuerdo que evitó verbalizar incluso cuando sí pudo intervenir para responder a una pregunta sobre la ley trans aprobada este lunes en el Consejo de Ministros.

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EFE

Según ha podido saber este diario de fuentes gubernamentales de ambos sectores de la coalición, el silencio de la ministra y dirigente de Podemos estaba previamente acordado con sus socios, ya que la posición del partido y de los miembros morados del Ejecutivo es pública y contraria a la manifestada durante los últimos días por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Este último recalcó el pasado sábado que si hay algún responsable del "asalto violento y organizado" son las "mafias que trafican con seres humanos en una ciudad que es territorio español". Un cambio de tono, al subrayar también la labor del Gobierno marroquí, que coincide con la normalización de las relaciones diplomáticas entre ambos países.

Desde la parte morada del Ejecutivo reconocen que no les está resultando fácil lo que consideran respetar el ámbito de comunicación acordado en Moncloa para no airear un choque público en esta cuestión. Fuentes cercanas a la ministra de Igualdad aclaran que ni pretende desentenderse de lo ocurrido en la frontera ni tampoco no dejar clara su posición, sino respetar el espacio de trabajo dentro del Gobierno. "Es bueno respetar ciertas normas del espacio", indican para asegurar que se trata de un asunto muy serio que se sigue hablando en privado en el seno de la coalición.

La intención es que la posición la marquen desde el partido, que este lunes registraba una iniciativa en el Congreso reclamando una investigación sobre los hechos, y que, en caso de ofrecerla un ministro morado, que sea fuera del ámbito de Moncloa y como una posición personal. De hecho, está previsto que Montero haga declaraciones a lo largo del día, ya fuera del ámbito de Moncloa. El análisis compartido por socialistas y morados tras la debacle electoral de las elecciones andaluzas es que se debe trabajar en la cohesión de la coalición, pues las divisiones empujarían la abstención de los votantes de izquierda y la desmovilización de los suyos en las urnas.

La titular de Derechos Sociales y líder de Podemos, Ione Belarra, defendía este sábado a través de las redes sociales que "el respeto a los derechos humanos debe guiar siempre nuestra política exterior", para concluir tras las consecuencias en vidas humanas del último asalto a la valla que es urgente "repensar el modelo migratorio y la externalización de fronteras". La vicepresidenta segunda y líder del sector de Unidas Podemos en el Gobierno, Yolanda Díaz, apelaba también a "aclarar ya lo sucedido". Tras asegurar que se sentía "muy impactada con las imágenes de la frontera de Melilla" y trasladar sus "condolencias a los seres queridos de todas las personas que han perdido injustamente la vida", remataba explicando que "apostaré siempre por una política migratoria respetuosa con los derechos humanos".

Desde Moncloa han evitado cualquier crítica a las fuerzas de seguridad marroquíes, que, según han denunciado algunas ONG, habrían incluso entrado en la parte española de la frontera para reprimir a los migrantes. Más bien todo lo contrario, al subrayar el "reconocimiento al trabajo de las fuerzas de seguridad y también la colaboración de las fuerzas de seguridad de Marruecos", poniendo el foco en "las mafias que trafican con seres humanos y provocan estas situaciones trágicas".

En el mensaje trasladado este lunes se hace más hincapié en su lamento por la pérdida de vidas humanas. "El Gobierno lamenta la pérdida de vidas humanas, profundamente, y traslada su pesar a todas las víctimas", ha apuntado Isabel Rodríguez subrayando su conmoción por las imágenes para acto seguido reiterar que "hay que combatir a las mafias" y recalcar la colaboración de las fuerzas de seguridad marroquíes "velando por proteger nuestra frontera". "Agredir la frontera de España es agredir la frontera de la Unión Europea", añadió.

El intento de acceso de alrededor de 2.000 personas a Melilla, el más numeroso y violento registrado en los últimos años, se saldó con 23 emigrantes muertos, según las autoridades de Nador, y con decenas de heridos, de los cuales 18 permanecen ingresados en hospitales, además de un agente marroquí, siempre de acuerdo con la información oficial.