La sospechosa llamada del actor Luis Lorenzo tras el fallecimiento de Isabel

El 28 de junio de 2021, Ana, la auxiliar contratada por Arancha Palomino y su marido, el actor Luis Lorenzo, para cuidar de la tía Isabel y que pagaba la propia anciana, se despertó a las 8.00 de la mañana. Lo primero que hizo fue acudir a la habitación de la mujer. “Observé que estaba fría, pálida y que no respiraba. En la casa estaba yo con los dos niños menores. Luis y Arancha habían viajado a Asturias en un tren a las 5.00 de la mañana. Así que les llamé para comunicarles el fallecimiento. Arancha se puso a llorar y paró en mitad del camino. En Valladolid. Allí compraron billetes para regresar a Madrid”, cuenta la cuidadora. Sin embargo, no es hasta más de cuatro horas después que Luis Lorenzo avisa a los servicios sanitarios. ¿Por qué semejante retraso? ¿Dieron orden a la cuidadora de no avisar a los servicios médicos antes de que ellos llegaran? Si no fue así, ¿por qué Ana no avisó inmediatamente? La llamada se produce a las 12.21. Las voces de los audios han sido distorsionadas.

Emergencias. Buenos días. Emergencias.

Luis Lorenzo. Hola, buenos días. Mira, era para notificaros que ha fallecido una persona ahora en casa.

E. Vale, dígame donde está, señor. ¿Es en Madrid capital?

L. No, es en Rivas.

E. ¿La persona que ha fallecido es un hombre o una mujer?

L. Es una mujer.

E. ¿De qué edad?

L. 85 años.

E. ¿Esperaban que esto pudiera ocurrir?

L. Sí.

E. Vale, vamos a pasar el aviso con los sanitarios. No corte la llamada, por favor.

Se hace el silencio durante unos segundos en los que no se escucha nada, hasta que de nuevo le atienden.

Operadora. Hola, buenos días, habla con urgencias médicas, ¿es usted familiar?

Luis. Bueno soy el marido de la sobrina de esta señora.

O. ¿Está en cuidado paliativo?

L. ¿Perdón?

O. ¿En cuidado paliativo estaba la paciente? No, ¿no?

L. No, estaba, tenía una auxiliar, tenía una cuidadora que estaba con ella 24 horas aquí en casa.

O. Vale, pero no la estaban viendo médicos paliativos, ¿era esperable por paciente terminal?

L. Sí, sí, el diagnóstico era muy malo, tenía demencia de cuerpos de Lewy ya en fase terminal.

O. Vale le paso, no cuelgue y lo siento mucho.

L. Gracias

Luis Lorenzo queda en espera. A pesar de que el actor habla de muerte inminente, en ningún caso consta en las actuaciones que el neurólogo les dijera que la perspectiva de muerte de la tía Isabel era próxima. Lo que sí está acreditado es que la víctima ingresó por urgencias en el Hospital Universitario Ramón y Cajal el día 6 de mayo de 2021, a las 14.25. El motivo del ingreso fue hipotensión. Sin embargo, según el sumario, también le diagnosticaron por primera vez los cuerpos de Lewy. Le hicieron pruebas y pasó la noche allí. El neurólogo especialista que exploró a tía Isabel quiso dejarla ingresada, pero finalmente, a regañadientes, le dio el alta voluntaria. Figura en un documento médico incorporado a las actuaciones que el doctor les advirtió, a ella y a Arancha, que era quien le acompañaba, del “riesgo” de irse del centro médico y de las “consecuencias del no seguimiento de su tratamiento”. La firma que aparece a pie del documento de alta voluntaria es extremadamente similar a la que consta en el DNI de Arancha Palomino, aunque por entonces no tenía ningún poder notarial que le facultase para suscribir un documento así. Le dieron el alta a las 10.29 del día 7 de mayo de 2021. ¿Qué razón había para llevársela en contra del criterio médico del Hospital Ramón y Cajal de forma tan apresurada? ¿Dónde iban a cuidarla mejor que en el propio centro médico? Quizás en el notario, porque allí es donde Arancha la llevó para que Isabel firmase los papeles en los que les legó “las cantidades monetarias de sus cuentas bancarias y la vivienda de Grado”.

La llamada continúa.

Médico. Hola, buenas, médico del SUMMA. ¿Qué le ocurre a María Isabel?

Luis Lorenzo. A ver, Isabel ha fallecido, la hemos visto ahora hace un rato, entonces ella tenía ya un diagnóstico bastante desolador. Tenía la enfermedad de demencia senil por cuerpos de Lewy, muy avanzada ya. Entonces estaba, bueno, se han hecho bastantes valoraciones por neurología y demás y en la última consulta el neurólogo nos dijo que era cuestión de muy poco tiempo ya.

M. Ajá, vale. Mire, tienen que acercarse al centro de salud, un familiar, ¿vale?, y dejar el aviso para que vaya el médico a certificarlo, eh.

L. Vale, o sea, tengo que ir personalmente.

M. Es que los teléfonos no los cogen.

L. Vale.

M. Si tiene suerte y le cogen el teléfono puede dejar el aviso.

L. No, así no lo voy a arreglar, señorita, no, no.

M. Por eso, por eso, porque por la experiencia de todo esto del covid y tal no cogen los teléfonos, entonces es mejor acercarse a la puerta y decirlo, ya que el médico ira a certificarlo, vale, ¿de acuerdo?

L. De acuerdo, muchísimas gracias, eh.

M. Vale, nada, lo siento mucho. Hasta luego.

L. Gracias.