La Fiscalía sobre el caso Niñera: "No es extraño que una amiga ayude a otra"

La Fiscalía de la Comunidad de Madrid se ha opuesto a levantar la imputación de la que fuera jefa de Prensa de Podemos, Gara Santana, en el conocido como caso Niñera. El titular del Juzgado de Instrucción Número 42 de Madrid, Juan José Escalonilla, la declaró investigada ante la sospecha de que ella también tuvo que cuidar de los hijos de Irene Montero y Pablo Iglesias pese a no formar parte de sus funciones. Pese a ello, el Ministerio Público muestra sus dudas sobre esta decisión. En un escrito al que ha tenido El Confidencial, indica que no es "extraño" que "una amiga ayude a otra con dos recién nacidos, prematuros, recién salidos del hospital".

La fiscal asegura también que no ve raro que Santana ayudara a Montero "sin ser remunerada por ello". "Y tampoco es ilógico que, estando de baja Irene Montero, hubiera reuniones políticas en su domicilio dada la posición que ocupaban tanto ella como Pablo Iglesias en el partido político", agrega. No obstante, considera que esas consideraciones deberán hacerse una vez preste declaración como investigada y se practiquen todas las diligencias ordenadas por el magistrado.

Hasta hace unas semanas, la investigación se centraba en la asesora de Igualdad Teresa Arévalo, a la que Montero presuntamente encargó de forma irregular que cuidara de su hija pequeña. La declaración de la exescolta de la ministra, Elena G., cambió las cosas ante el juez, al que la propia Santana le comunicó su malestar por tener que hacer de niñera en más de una ocasión. En su escrito, la fiscal también aprecia "animadversión" en esta empleada que fue despedida.

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El titular del Juzgado de Instrucción Número 42 de Madrid mantiene abierta una investigación contra ella y la propia Montero "por el presunto delito de administración desleal" y amplió el listado de investigados con Santana, a la que se citó a declarar en inicio para el pasado 10 de mayo sin que la declaración pudiera practicarse. Está pendiente aún fijar fecha.

Al gozar de aforamiento, Irene Montero solo puede ser imputada por el Tribunal Supremo, pero Arévalo ya tuvo que declarar como investigada en julio: según aseguró ante el juez, su trabajo en el partido y en el ministerio nunca consistió en cuidar de la hija de Montero e Iglesias, lo que no quita que, "como cualquier otro compañero o compañera", pudiera puntualmente "tenerla en brazos". Pese a ello, el presunto uso irregular de asesores del partido y del ministerio se extiende ahora a Santana.

La declaración de la exescolta

La propia exescolta demandó en 2019 a Unidas Podemos por su despido. El partido alcanzó un acuerdo con ella para evitar llegar a juicio en enero de 2020, pero ahí queda el escrito en el que les acusaba de utilizarla para "hacer compras personales", tener que adelantar su jornada "para que el habitáculo del coche estuviera caliente", "hacer de chófer de la empleada doméstica y de la niñera" o incluso encargarse de "tareas de gestión de obras" y de "mantenimiento" en sus propiedades.

Durante su testifical del pasado 22 de marzo, la exescolta hizo referencia a estas supuestas tareas paralelas, pero el grueso de la comparecencia se centró en si Montero utilizaba a trabajadoras del partido y del ministerio como niñeras: aunque en el caso de Arévalo no pudo añadir nuevos datos porque fue despedida antes de los hechos investigados, reveló que en ocasiones llevaba en su coche a Santana y, en aquellos viajes, esta le mostraba su enfado por tener que cuidar a los hijos de Iglesias y Montero.

El viaje de Arévalo

Como desveló El Confidencial en febrero de 2021, la sospecha de que Iglesias y Montero utilizaron a una asesora de Igualdad como niñera parte de una denuncia presentada por Mónica Carmona, exresponsable de Control Normativo de Podemos. En su escrito, apuntaba a que habrían confiado el cuidado de su hija a la exdiputada del partido Teresa Arévalo. Pese al carácter privado del encargo, esta supuestamente lo compatibilizó en un primer momento con un sueldo del grupo parlamentario y, después de la llegada de Podemos al Gobierno, con un salario de Igualdad tras ser nombrada por Montero jefa de Gabinete adjunta de su cartera.

"La persona denunciante", relata Carmona en su escrito, "me indicó que la señora Irene Montero empleaba habitualmente a esta empleada de Podemos para cuidar a su hija, y que incluso se habían desplazado las tres en el mes de octubre a la ciudad de Alicante para participar en un acto de campaña electoral, dejando a la empleada de Podemos al cuidado de la niña mientras la señora Montero intervenía en un acto de campaña".

Tras la denuncia, la entonces responsable de Cumplimiento Normativo comprobó que, efectivamente, Montero se desplazó a Alicante el 20 de octubre de 2019 para participar en un acto de la campaña de las generales y que viajaron con ella su hija y Arévalo. Otros altos cargos de Podemos integraron esa comitiva, pero estos últimos intervinieron o se dejaron ver en el acto de campaña. Sin embargo, la exdiputada por Albacete no aparece en ninguna imagen del evento.

En julio, al ser preguntada por estos hechos durante su declaración como imputada, Arévalo se escudó en que su participación en este viaje fue como jefa de la Portavocía, así como candidata al Congreso en esas elecciones. Su defensa, de hecho, también se centró en que, cuando se produjo este viaje, ella cobraba del grupo parlamentario de Podemos y no directamente del partido, con lo que consideran que en ningún caso encajan los hechos con un posible delito de administración desleal.