Cae un yihadista en Madrid que tenía datos para hacer bombas y una nota de despedida

La Policía Nacional ha arrestado en Madrid a un ciudadano español con una fuerte radicalización yihadista tras hallar una mochila de su propiedad que contenía instrucciones precisas sobre fabricación explosivos, un puñal de grandes dimensiones y una nota de despedida. El hombre se encontraba en libertad provisional tras haber sido arrestado en 2020 también acusado de un presunto delito de terrorismo por el que se encontraba pendiente de juicio, según avanzan a El Confidencial fuentes de la lucha antiterrorista.

Los investigadores consideran que este individuo tenía capacidad para atentar y causar graves daños. En uno de los documentos encontrados en la bolsa aparecieron anotaciones sobre TATP (Triperóxido de Triacetona). Con este material se fabrica un explosivo casero conocido como “Madre de Satán”, habitual en ataques terroristas de corte yihadista. Es el componente que estaban manipulando los terroristas de Barcelona y Cambrils cuando les estalló por accidente en la base que tenían en Alcanar (Tarragona). También apareció en los atentados de Bruselas o París.

El arrestado, José Luis S.C., salió en enero de la cárcel. Fue detenido en diciembre de 2020 por lo que había permanecido preso poco más de un año. Lo que motivó su primer arresto fueron los mensajes radicales que difundía a través de sus redes sociales, también propaganda afín al Daesh. Cuando entraron en su casa, los agentes encontraron información sobre presupuestos para viajar a Turquía y a Jordania. Los expertos antiterroristas tenían conocimiento de que a su salida de la cárcel a comienzos de este año se había instalado en la localidad de Las Rozas, en el noroeste de Madrid.

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Las pesquisas que han dado con su arresto otra vez han corrido a cargo de la Comisaría General de Información de la Policía Nacional. Las alertas se activaron el 9 de marzo cuando los responsables de seguridad de un supermercado de La Navata, en la localidad madrileña de Galapagar, encontraron una mochila. El comercio está ubicado en una zona residencial con varias urbanizaciones por lo que abrieron la bolsa para tratar de identificar al dueño y ponerse en contacto con él. Cuando vieron lo que había dentro, optaron por volverla a cerrar y meterla en una caja fuerte a la espera de que llegase la Policía.

En la mochila, de color negro, había también carpetas con fotos de Daesh y una cámara de fotos, tarjetas de visitas con varias direcciones de correo anotadas, unos nunchakus y un puñal de más de 20 centímetros. Las investigaciones policiales relacionaron el hallazgo con José Luis S.C, que fue arrestado y trasladado a la Audiencia Nacional donde este jueves prestó declaración ante el juez. Admitió que la mochila es suya aunque dijo estar realizando un estudio sobre movimientos terroristas. El magistrado no le cree y decretó su ingreso en prisión.

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Las fuentes consultadas advierten de que existía un riesgo real debido a su radicalización. Los expertos en desactivación de explosivos analizaron sus anotaciones y acreditaron que eran correctas. Desde prisión envió cartas amenazantes a dos mujeres a las que acusa de haberle delatado ante la Policía. El individuo no cuenta con un domicilio conocido en la actualidad por lo que esa circunstancia aumentaba el riesgo de una posible fuga.