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Olona se enzarza con Yolanda Díaz y se erige como 'la salvadora' de la Feria de Abril de Sevilla
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ANTE LAS ELECCIONES ANDALUZAS

Olona se enzarza con Yolanda Díaz y se erige como 'la salvadora' de la Feria de Abril de Sevilla

La vicepresidenta Díaz insiste en que es un bulo que la reforma laboral toque una jornada laboral desde los 80 en el Estatuto de los Trabajadores y pide a Vox que deje de mentir

Foto: La diputada de Vox, Macarena Olon. (EFE/Javier Lizón)
La diputada de Vox, Macarena Olon. (EFE/Javier Lizón)

Uno de los momentos más intensos en la sesión de control al Gobierno este miércoles en el Congreso de los Diputados ha tenido como protagonista la Feria de Abril de Sevilla. A un lado, la portavoz de Vox, Macarena Olona, vestida de candidata andaluza y a un paso de ponerse el traje de gitana y la flor en la cabeza para hacer el cara a cara en el hemiciclo. Al otro, la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, visiblemente molesta por lo que considera una campaña montada en un bulo y con claro aroma a campaña electoral de las andaluzas. Empieza el baile. Spoiler, termina con un ujier entregándole a Olona un libro del Estatuto de los Trabajadores por petición de la vicepresidenta Díaz que la diputada por Granada rechaza.

Todo comenzó en Sevilla. Olona se remontó desde su escaño a los orígenes, a la Feria de ganado que dos empresarios vascos organizaron en la capital de Andalucía allá por 1847. La portavoz de Vox, que no ahorró en dramatización, le pidió a la vicepresidenta Díaz “educación y respeto”, lo mismo que tendría que tener, avisó, para hablar de la Feria de Abril, una tradición de casi 200 años y que va camino de “la catástrofe” por la reforma laboral del Gobierno. Una fiesta que solo suspendió la Guerra Civil y en los dos últimos años una pandemia mundial y, según Olona, ahora amenaza la ministra de Trabajo. En su versión, el nuevo marco de la reforma laboral “hace imposible” la contratación estacional.

Yolanda Díaz y Olona se enzarzan en el Congreso a cuenta de la Feria de Abril

La Asociación Andaluza de Hostelería de Feria, “que da servicio a 820 de las 1.040 casetas de Sevilla”, dijo Olona, anunció días atrás un paro en la semana de farolillos asegurando que no podían cumplir la legislación laboral vigente. Este lunes, esta misma asociación, tras una reunión con la Subdelegación del Gobierno de Sevilla, empezó a recoger velas. Desde el Gobierno casi dieron por hecho que se desconvocaría el paro anunciado. Se les explicó a estos empresarios que la reforma laboral no toca la jornada y que los días de 12 o 14 horas de trabajo tras una barra están prohibidos desde 1980, haya feria o no la haya. “Había matices que desconocíamos”, admitió el portavoz de esta asociación de caseteros al término de ese encuentro.

Dos días después, este miércoles, Olona mantuvo el guion de la pregunta acusando a Díaz de acabar con una tradición de dos siglos, obviando que los propios caseteros se han dado cuenta del lío y anunciaban una nueva asamblea para reconsiderar sus posiciones. “Usted quien se ha creído que es para insultar de esta manera a Andalucía”, le reprochó a Díaz, a la que llama “ministra comunista”. Por si alguien no lo sabe, Olona lo proclamó: “La Feria no es de derechas ni de izquierdas”.

La portavoz de Vox, que aún no es candidata de su partido en Andalucía pero lleva en una intensa campaña desde octubre como si lo fuera, va dando cuenta en sus redes sociales de sus avances como sevillana. Puso foto del día que se probó su traje de gitana y advirtió en otro mensaje que vendría ataviada de flamenca al hemiciclo si Díaz, “Lady Paro”, como la llama, hundía la Feria de Sevilla. Quien conoce Sevilla y a una parte numerosa de los sevillanos sabe que tras dos años sin esta fiesta en la ciudad, solo una catástrofe natural incontrolable puede acabar con la celebración, pero Olona insiste en que la vicepresidente segunda la ha puesto al borde de la desaparición.

“Muy sobreactuada”, dijeron diputados de todos los partidos de los que pisan el albero. “Señoría, mentir es pecado”, replicó Díaz, añadiendo que “la extrema derecha tiene un problema con la Constitución española”. La ministra insistió en que la reforma laboral no toca la jornada y que el descanso de 12 horas entre turnos, diez en el caso del convenio que rige en este caso, es obligatorio desde “los tiempos de Marcelino Camacho”. Díaz preguntó si el modelo laboral de Vox se basa “en la explotación laboral”.

A dos horas y media de AVE de este cruce, en Sevilla, el montaje de la Feria sigue adelante, silenciado ahora por la inminencia de la Semana Santa. Toca la mantilla antes del traje de gitana. La reforma laboral no toca la jornada ni los turnos, eso se reguló en el Estatuto de los Trabajadores y en un decreto posterior de 1995, explica los expertos en derecho laboral. Si cambia el modelo de contrato y sustituye el eventual por otro para obra y servicio, aunque en este caso los empresarios pueden usar el contrato temporal por circunstancias de producción, adaptado a una semana de Feria, explicaron desde el Gobierno, como hacen las empresas de catering. El convenio de hostelería fija jornadas de ocho horas que pueden sumar dos horas extra pero sí hay que respetar, por ley, las 12 horas entre jornadas.

Uno de los momentos más intensos en la sesión de control al Gobierno este miércoles en el Congreso de los Diputados ha tenido como protagonista la Feria de Abril de Sevilla. A un lado, la portavoz de Vox, Macarena Olona, vestida de candidata andaluza y a un paso de ponerse el traje de gitana y la flor en la cabeza para hacer el cara a cara en el hemiciclo. Al otro, la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, visiblemente molesta por lo que considera una campaña montada en un bulo y con claro aroma a campaña electoral de las andaluzas. Empieza el baile. Spoiler, termina con un ujier entregándole a Olona un libro del Estatuto de los Trabajadores por petición de la vicepresidenta Díaz que la diputada por Granada rechaza.

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