Feijóo moldea un equipo "en la sombra" con sorayistas y exministros del PP
El gallego crea un consejo de expertos ajeno a la estructura orgánica del partido que funcionará como un 'think tank'. Reunirá a personalidades de "alto nivel" que no quieren dar el salto a la primera línea política
Alberto Núñez Feijóo iniciará en apenas tres días su periplo como líder nacional del PP, pero, al menos en el ámbito interno del partido, será un desembarco a medio gas. El gallego asumirá las riendas de la organización a mitad de legislatura, sin un grupo institucional afín, sin voz propia en el Congreso y con la mayoría de estructuras territoriales ya renovadas y diseñadas por la dirección saliente. El próximo presidente popular nombrará este fin de semana a su nueva cúpula directiva, perfiles que le acompañarán al menos hasta las próximas elecciones generales. Pero, al margen de lo público, Feijóo se lanza a rearmar su alternativa "más allá de los cuatro muros de Génova" y moldea un equipo "en la sombra", abriendo la puerta a exministros de la etapa de Mariano Rajoy, "expertos" independientes del ámbito empresarial o sindical e, incluso, "talento" de otras formaciones políticas, con el foco puesto en Ciudadanos.
Este martes, y a través de un comunicado, el equipo del todavía candidato a la presidencia del PP anunciaba la puesta en marcha de un "consejo asesor", externo a la estructura orgánica del partido, pero en perfecta coordinación con Alberto Núñez Feijóo. La Oficina del Presidente, como lo han bautizado los populares, funcionará como un 'think tank' abierto a "aportaciones programáticas de alto nivel" por parte de "personas ajenas a la política activa". Fuentes autorizadas del partido abren directamente la puerta a dirigentes "de peso", sorayistas que fueron defenestrados por la anterior dirección o que, directamente, abandonaron la política. Pero no solo.
El abanico está abierto a cargos que militaron —o militan— en formaciones como Ciudadanos, así como empresarios del Ibex, "cabezas" de grandes multinacionales, representantes de organizaciones sindicales e, incluso, personal diplomático. La máxima del órgano será la "confidencialidad"; es decir, que no se harán públicos la lista de componentes y el origen de las aportaciones para evitar espantar a personalidades que, al menos de momento, prefieren mantenerse "alejadas" del foco mediático o que, simplemente, "no quieren que se las vincule con el PP". "No vamos a conseguir que se pongan ahora en la fotografía, pero sí pueden aportar en la construcción del próximo programa electoral del partido desde dentro", sostienen los populares.
Nombres como el de Fátima Báñez, Alfonso Alonso o Román Escolano se han colado en los últimos días en las quinielas sobre la confección del nuevo 'núcleo duro' de Feijóo, pero en el equipo del gallego subrayan las dificultades para reincorporar a figuras que actualmente se encuentran en la vida privada. "Él busca rodearse de los mejores, pero ahora no puede recuperar a todos los que tiene en la cabeza", comenta un veterano dirigente del PP, que apunta a que el objetivo de Feijóo es confeccionar un "consejo de sabios", personas "con experiencia o trayectoria" que, sin embargo, rehúsan dar ahora el 'salto' a la primera línea. "Es una apuesta inteligente", coincide otro dirigente popular, antiguo colaborador de Mariano Rajoy. "Son personas que pueden aportar al proyecto y rescatar llegado el momento", analiza esta fuente.
Feijóo iniciará esa búsqueda de talento para su consejo de "expertos" tan pronto como se haga con las riendas del partido. Para esta tarea, primará el componente económico en la recolección de perfiles, aunque sin dar de lado a cuestiones sociales o relativas a política internacional. El órgano estará compuesto por unos integrantes "fijos", que asesorarán al presidente en la confección del próximo programa electoral y en el diseño de la hoja de ruta programática e ideológica de los populares, pero también se abrirá a "colaboraciones puntuales y externas" por parte de personalidades políticas o empresariales "de todo tipo de sensibilidades ideológicas", pero que, por diferentes motivos, prefieren mantener un "perfil bajo".
El objetivo, insisten las fuentes consultadas, pasa por renunciar a los programas "encorsetados" y ensanchar el proyecto a través de propuestas internas y externas que culminen en la "construcción de un ideario" con el sello propio de Feijóo. El gallego dividirá su mandato en "dos etapas". Según las fuentes consultadas, el punto de inflexión serán las próximas elecciones generales. Hasta ese momento, el dirigente nombrará a su comité de dirección en Génova, pero sin poder modificar a los miembros de los grupos parlamentarios en el Congreso y en el Senado hasta la nueva apertura de urnas.
Feijóo rehabilita a sorayistas
Más allá del mencionado comité de expertos, la caída de Casado ha abierto la puerta a la rehabilitación de sorayistas que fueron defenestrados por la anterior cúpula del PP, bien relegándolos al Senado o bien forzando directamente su salida del partido. Feijóo mantiene un férreo hermetismo sobre la confección de su nuevo equipo, pero nadie en el partido duda de que volverán a tener foco dirigentes de peso que apoyaron a Soraya Sáenz de Santamaría en su contienda contra Pablo Casado.
Es el caso de Alfonso Alonso, ministro de Sanidad con Mariano Rajoy, que fue fulminado por Teodoro García Egea y sustituido en el País Vasco por Carlos Iturgaiz. El dirigente no solo se ha dejado ver en algunos actos del partido una vez se oficializó la candidatura de Alberto Núñez Feijóo, sino que solicitó la participación en el congreso de Sevilla como compromisario. Por allí aparecerá también, aunque como invitado, el exministro de Fomento Íñigo de la Serna, junto a senadores que tuvieron un peso importante en la anterior etapa del PP y que han reaparecido en la escena pública, como Rafael Hernando, Fernando Martínez-Maillo o Carlos Floriano.
La composición del comité organizador del congreso, comandado por Esteban González Pons, ya daba una pista sobre la intención de Feijóo de reactivar el sorayismo en el PP y devolverlo a la primera línea. Además del eurodiputado, el gallego recuperó a antiguos colaboradores de Mariano Rajoy, como Juan Carlos Vera o José Antonio Bermúdez de Castro.
Alberto Núñez Feijóo iniciará en apenas tres días su periplo como líder nacional del PP, pero, al menos en el ámbito interno del partido, será un desembarco a medio gas. El gallego asumirá las riendas de la organización a mitad de legislatura, sin un grupo institucional afín, sin voz propia en el Congreso y con la mayoría de estructuras territoriales ya renovadas y diseñadas por la dirección saliente. El próximo presidente popular nombrará este fin de semana a su nueva cúpula directiva, perfiles que le acompañarán al menos hasta las próximas elecciones generales. Pero, al margen de lo público, Feijóo se lanza a rearmar su alternativa "más allá de los cuatro muros de Génova" y moldea un equipo "en la sombra", abriendo la puerta a exministros de la etapa de Mariano Rajoy, "expertos" independientes del ámbito empresarial o sindical e, incluso, "talento" de otras formaciones políticas, con el foco puesto en Ciudadanos.
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