Es noticia
Sánchez confía en taponar la migración en Ceuta y Melilla tras un incremento del 240%
  1. España
Más llegadas en 2022

Sánchez confía en taponar la migración en Ceuta y Melilla tras un incremento del 240%

Las primeras semanas del año han registrado un repunte en las fronteras de ambas ciudades. Agentes sobre el terreno creen que la decisión ayudará a "normalizar la situación"

Foto: La frontera de Ceuta tras la llegada masiva de migrantes. (EFE/Brais Lorenzo)
La frontera de Ceuta tras la llegada masiva de migrantes. (EFE/Brais Lorenzo)
EC EXCLUSIVO Artículo solo para suscriptores

España calcula que un total de 1.022 personas han entrado de forma ilegal en Ceuta y Melilla procedentes de Marruecos desde el 1 de enero, según los datos del Ministerio del Interior. Eso es un 240% más que el año anterior en el mismo periodo. Las cifras reflejan un problema de inmigración irregular sostenido en el tiempo en esta frontera sur de Europa. Los saltos por encima de las vallas de ambas ciudades autónomas o llegadas masivas como la del año pasado han tensado siempre las relaciones diplomáticas entre los dos países, que este viernes han materializado un punto de inflexión con el cambio de postura del Gobierno respecto a la autonomía del Sáhara.

"Hoy iniciamos una nueva etapa en la relación con Marruecos", dice el comunicado del Ejecutivo en el que no se cita al Sáhara, pero desde el otro lado de la frontera aseguran tener una carta del presidente que avala la autonomía del régimen de Mohamed VI sobre el Sáhara Occidental, la antigua colonia española. En la comunicación de Presidencia del Gobierno se apela a conceptos como "respeto mutuo", "ausencia de acciones unilaterales" y "comunicación permanentemente". Y también hacen referencia a "garantizar la integridad territorial" o abordar de manera conjunta desafíos como la gestión de los flujos migratorios.

Fuentes policiales sobre el terreno afirman a El Confidencial que creen que esta decisión "presumiblemente sí ayuda", si bien recuerdan el carácter "imprevisible" de Marruecos, quien podría tener "otras motivaciones" en el futuro. "Esa carta ayuda mucho a normalizar la situación", vaticina uno de los operativos encargados de lidiar con saltos masivos sobre las vallas, como el que tuvo lugar el pasado 2 de marzo en Melilla. "El intento de entrada más numeroso que se ha registrado hasta la fecha con alrededor de 2.500 migrantes", dijo la Delegación del Gobierno en Melilla. 491 lograron acceder. Un día después, lo intentaron otros 1.200 y lo lograron cerca de 350.

Foto: Instalación de las concertinas (ya retiradas) en la valla de Melilla en 2013. (EFE/F. G. Guerrero)

A preguntas de este periódico, fuentes gubernamentales optaron por enmarcar estos saltos masivos al hecho de que el Ministerio del Interior esté culminando unas obras en el vallado pensadas para dificultar todavía más el acceso a España por esa vía terrestre. Al dato del incremento del 240% habría que sumarle el porcentaje de llegadas por vía marítima, tanto a las dos ciudades autónomas como a las Islas Canarias. Los datos del Ministerio del Interior no detallan el origen de partida de los migrantes que tratan de alcanzar las costas españolas, pero solo en estas primeras semanas de año van 22.316 a Canarias, 404 a Ceuta y 39 a Melilla.

Demasiadas veces, las autoridades españolas han recelado de la voluntad de las fuerzas de seguridad marroquíes a la hora de impedir estas llegadas masivas. Al mismo tiempo, Marruecos considera que no tiene por qué ejercer de tapón migratorio en el norte de África, teniendo en cuenta que el destino que buscan los migrantes que llegan de todo el continente es Europa. Por eso, piden ayuda económica para hacer frente a un fenómeno que no cesa en el tiempo.

Foto: Consejo de Seguridad Nacional de 2020. (EFE/Francisco Gómez)

Especialmente significativa fue la entrada en Ceuta de 12.000 personas, muchas de ellas menores de edad a mediados de mayo del año pasado. Las fuerzas de seguridad presentes en la zona denunciaron la pasividad de los agentes fronterizos del país africano. El presidente de la Ciudad Autónoma, Juan Jesús Vivas, llegó a utilizar la palabra "invasión" para describir lo sucedido. Se producía después de que el Gobierno marroquí tuviese conocimiento de que España había acogido en secreto al líder del Frente Polisario saharaui Brahim Ghali para ser atendido en un hospital. Marruecos retiró a su embajadora en España.

Tras la llegada masiva de personas por Ceuta aquel mes de mayo, el Gobierno se vio forzado a desplegar en cuestión de horas al Ejército en la Playa del Tarajal para contener el flujo. Este incidente se enquistó meses después cuando, en pleno agosto, el Ministerio del Interior avaló la devolución de decenas de menores llevaban semanas en naves industriales provisionales. La Justicia paralizó la operación advirtiendo de su posible ilegalidad.

El dato de llegadas de migrantes facilitado por el Ministerio del Interior respecto a todo el año 2021 deja fuera este incidente sin precedente. A pesar de ello, a lo largo de todo año entraron de forma irregular por vía terrestre un total de 1.845 personas, un 7,8 por ciento más que el ejercicio anterior. En su comunicado de este viernes, el Gobierno confía en "restablecer la plena normalidad en la circulación de personas y bienes".

España calcula que un total de 1.022 personas han entrado de forma ilegal en Ceuta y Melilla procedentes de Marruecos desde el 1 de enero, según los datos del Ministerio del Interior. Eso es un 240% más que el año anterior en el mismo periodo. Las cifras reflejan un problema de inmigración irregular sostenido en el tiempo en esta frontera sur de Europa. Los saltos por encima de las vallas de ambas ciudades autónomas o llegadas masivas como la del año pasado han tensado siempre las relaciones diplomáticas entre los dos países, que este viernes han materializado un punto de inflexión con el cambio de postura del Gobierno respecto a la autonomía del Sáhara.

Ministerio del Interior Melilla Sáhara Inmigración
El redactor recomienda