El pueblo de 2.000 habitantes que clava las elecciones de Castilla y León: "Vox va fuerte"

Alberto Jesús Collantes Velasco tiene una teoría para responder a la extraña pregunta que ya le había formulado dos días antes por teléfono. “Viana de Cega”, me dice el alcalde del Partido Popular la pasada semana en su despacho, “es un pueblo variopinto y muy heterogéneo”.

Quizá no sea una exageración decir que, al menos políticamente, toda Castilla y León cabe en este pequeño pueblito a 19 kilómetros de Valladolid donde, en palabras del alcalde, hay de todo: desde "veganos muy de izquierdas” hasta “protaurinos muy de derechas”, desde vecinos con un Tesla en su plaza de garaje hasta aquellos que viven prácticamente en la indigencia.

Pese a tener solo 2.100 habitantes, este agradable pueblo rodeado de pinares situado en el Alfoz de Valladolid es uno de los mejores catalizadores para saber qué va a pasar en las elecciones autonómicas del próximo 13 de febrero de Castilla y León. “¿El fenómeno Ohio?”, se pregunta intrigado Alberto Collado cuando se le menciona el caso del estado de Estados Unidos donde casi siempre quien gana ahí gana a nivel nacional (salvo en 2020, con la victoria de Joe Biden).

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Es cierto que ningún municipio de Castilla y León es del todo representativo de los habitantes de la región en términos electorales. Partidos como Unión del Pueblo Leonés o Por Ávila, con procuradores en las Cortes regionales, solo se presentan en algunas provincias. Sin ir más lejos, las candidaturas de la España Vaciada o Soria ¡Ya! complican más, si cabe, la capacidad de un pueblo para acertar el resultado global.

Pero atendiendo a las formaciones a las que se puede votar en todo el territorio, el pueblo vallisoletano lleva 20 años acertando el orden del arco parlamentario. Y además, el porcentaje de voto a cada partido se acerca mucho al del resultado en toda Castilla y León. Solo en 2011 se desvió un poco más, dando al PSOE casi seis puntos por encima de los que logró en la comunidad autónoma.

Sin embargo, los dos últimos comicios, con más incertidumbre por la irrupción de nuevos partidos, prácticamente clavó los resultados. En 2019 incluso acertó con la victoria del PSOE, después de años de liderazgo popular, lo que lo convierte en una suerte de oráculo más certero que otros. Por ejemplo, Monfarracinos, en Zamora, había acertado de forma muy similar a Viana de Cega, pero en 2019 allí ganó el Partido Popular.

También Bernúy de Porreros, en la provincia de Segovia y con poco más de 700 habitantes, ha acertado bastante desde 2003, pero en las elecciones de 2019 dio a Podemos casi el doble de porcentaje de lo que sacó la formación en el cómputo global. Aunque si hubo un pueblo que lo clavó en las últimas elecciones fue San Pedro Manrique, en Soria, donde los porcentajes de voto a los principales partidos distaron menos de un punto. Eso sí, al final, solo Viana de Cega ha acertado con bastante precisión durante ya casi 20 años.

Alberto Collantes considera que el pequeño pero continuado crecimiento del pueblo lo ha dotado de un equilibrio singular en los últimos 50 años que explica por qué, al menos políticamente, Viana de Cega es un buen espejo para saber lo que va a ocurrir en toda la comunidad.

"Este pueblo era pequeño y pobre y, después, en los sesenta y setenta, se convierte en el lugar de veraneo de la burguesía de Valladolid"

“Este pueblo en un principio era pequeño y pobre y, después, en los sesenta y setenta, se convierte en el lugar de veraneo de la burguesía de Valladolid. Se va transformando y se va juntando mucho tipo de gente muy distinta”, explica este hombre de 60 años que lleva la mitad de su vida viviendo en Viana de Cega. El pueblo cuenta, por ejemplo, con más de 1.800 casas, pese a que no tiene más de 2.100 empadronados, por las urbanizaciones anexas al pueblo.

Con la llegada de los urbanitas que buscaban una casa rural, muchos habitantes de la localidad empezaron a trabajar en el sector servicios para atender a los veraneantes y completar sus trabajos temporales en FASA-Renault. “Era una época extraña”, explica el alcalde, quien recuerda las palabras de un escritor del municipio que dijo que en Viana de Cega el veraneante se ponía pantalón de pana y boina para parecer de pueblo y ser más rural y el de pueblo se ponía el pantalón corto y las sandalias para parecer de ciudad.

Por otro lado, además de esa combinación entre lo rural y lo urbano, al contrario que otros pueblos del Alfoz, como Laguna de Duero, que pasó de 3.000 a 20.000 habitantes, Viana ha ido creciendo paulatinamente, lo que lo ha dotado de un equilibrio que ayuda a representar de forma más precisa el voto autonómico. Como recalca el propio regidor, la localidad no ha perdido población en los últimos 30 años. "Ha sido un goteo constante y hemos ido creciendo poco a poco".

“Viana de Cega es un pueblo muy taurino y, al mismo tiempo, el Pacma saca votos. Aquí hay mucho amigo de los perros. Volvemos a la dualidad”, insiste Alberto Collantes. "En Viana de Cega hay un cazador que tiene 40 perros en su finca y luego está el amante de los perros que se preocupa y me escribe si ve a un perro solo en la plaza mayor”.

Él llegó a la alcaldía en 2007 con el PP. Desde entonces, ha compatibilizado su puesto en el ayuntamiento con su trabajo en una empresa que hace despliegue de fibra óptica por toda Castilla y León, lo que le ha permitido observar de cerca los desafíos a los que se enfrentan otras partes de la comunidad autónoma. “Hay pueblos en Zamora de 200 habitantes donde los alcaldes se alegran porque sus habitantes vuelven… para las fiestas del pueblo. Es muy triste. Afortunadamente aquí no tenemos ese problema”.

A nivel político, Viana de Cega siempre ha tendido a ser un pueblo más de izquierdas, pese a que ahora cuenta con un alcalde del PP. “Yo saco más votos siempre a nivel municipal que en las autonómicas. Hay gente que me dice: te voto a ti, pero soy de izquierdas”. Pero, visto lo visto y lo que ha sucedido en los últimos tres años en Viana de Cega, cree que en dos semanas va a haber un vuelco a la derecha.

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De repente, el alcalde saca unas hojas que tenía preparadas y empieza a garabatear resultados cuando se le pregunta por su quiniela para las elecciones. En su mesa tiene los resultados autonómicos de 2019 en Viana y si este pueblo vuelve a ser el Ohio de Castilla y León, puede que Alberto Collado tenga en su mano el futuro de los principales partidos.

“En 2019 ganó el PSOE aquí porque hubo voto útil de la izquierda, pero es muy probable que el PP les adelante con los votos de Ciudadanos y la caída del PSOE”, recalca. Para él, la clave va a estar en los extremos: si Podemos consigue recuperar en el pueblo los 25 votos que perdió en 2019 (“la izquierda de la izquierda siempre ha tenido un colchón de 100 votos”) y si Vox alcanza las 200 papeletas.

“Cuando hablo con gente del pueblo, me insisten en que ellos para la alcaldía me votarán a mí, pero que a nivel autonómico y nacional, a Vox. A ellos en el pueblo, para estas elecciones, les veo fuertes, creo que van a conseguir más de lo que esperamos”. Alberto Collantes está casi seguro de que su pueblo, por lo menos, volverá a acertar los tres primeros partidos a nivel autonómico: PP, PSOE y Vox. Lo que está por ver es si Viana de Cega seguirá siendo la bola de cristal más precisa para calcar el resultado de Castilla y León.