Sánchez pide a Casado que siga el "ejemplo" de Garamendi y pacte el CGPJ
El presidente del Gobierno reclama a los partidos políticos que la reforma laboral "trasciende" los bloques ideológicos y garantiza la "paz social". Les pide convalidarla para que no decaiga
Pedro Sánchez ha utilizado la comparecencia final de año para lanzar un directo al mentón de Pablo Casado. En un momento en el que las relaciones del PP con la CEOE no atraviesan por sus mejores momentos, el presidente del Gobierno ha solicitado al líder del principal partido de la oposición que siga el "formidable" ejemplo de Antonio Garamendi con la reforma laboral y los 13 acuerdos en el diálogo social alcanzados y que se abra a alcanzar acuerdos con el Gobierno de coalición. Los populares ya han dejado claro que están en contra de la ley de leyes de Yolanda Díaz e, incluso, han sugerido que la llevarán al Tribunal Constitucional.
"El cumplimiento de la palabra dada lo hacemos con acuerdo y con diálogo, diálogo y acuerdo con la mayoría del arco parlamentario (...) y con los agentes sociales", ha destacado Sánchez, que ha puesto en valor que dichos 13 acuerdos alcanzados en el diálogo social han traído la "paz social a España". De patronal y sindicatos, el presidente del Gobierno ha hablado de un "formidable ejemplo", tanto de "empatía", poniéndose en el lugar del otro negociador, como de "solidaridad". "Gracias por pensar en su país en lugar de en sus intereses personales", ha proclamado el presidente.
Sánchez ha pronunciado este reconocimiento para, a continuación, reclamar al principal partido de la oposición, sin citarle, que ponga fin a los "bloqueos", una situación que afecta, esencialmente, a la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). Unos "bloqueos", ha dicho Sánchez, que "impiden el correcto funcionamiento de la democracia, situando a quienes los perpetran fuera del marco institucional".
A continuación, sobre la renovación, Sánchez ha afirmado que "no diría que es imposible, pero con esta oposición es altamente improbable". "El deber constitucional está por encima de cualquier otra consideración", ha añadido, antes de rematar con un "hay que cumplir con la Constitución cuando se está en el Gobierno y cuando se está en la oposición".
La convalidación de la reforma laboral
Moncloa va a pasar apuros para aprobar la reforma laboral y Sánchez ha querido mencionar la situación en su balance de fin de año. "Qué quiere que le diga, a mí me parece que es de sentido común, que es más razonable, aprobar una reforma laboral que cuenta con el acuerdo de los agentes sociales", ha afirmado. "En el artículo 7 de la Constitución se reconoce la importancia de empresarios y sindicatos a la hora de definir el modelo laboral y el sistema de pensiones", ha recordado.
También ha lanzado un mensaje a sus habituales socios en el Congreso —ERC, PNV y EH Bildu—. "Es de sentido común que el poder legislativo valide un acuerdo que no se producía en nuestro país desde hace 10 años", ha remarcado. Un acuerdo que "trasciende las ideologías porque es una reforma equilibrada".
La reforma laboral, ha añadido Sánchez, "interpela a todas las fuerzas políticas, a todas y cada una". "No deja de ser llamativo que haya fuerzas políticas que, sin ni siquiera haber leído el real decreto-ley, ya digan que no". "Esperamos que un acuerdo que cuenta con el apoyo de empresarios y sindicatos cuente con el apoyo del legislativo", ha concluido.
El jefe del Ejecutivo, que inicia ahora sus vacaciones en el coto de Doñana, ha afirmado que el actual es un "tiempo que viene caracterizado por acuerdos sociales" y por la "estabilidad política". Y ha comparado su gestión con la del PP: "Las crisis y las reformas hay dos maneras de abordarlas". Ha citado varios ejemplos: una reforma impuesta por el PP y una reforma acordada con los agentes sociales, una respuesta a la crisis del Prestige y una respuesta al volcán de la Palma, a la crisis económica y al covid, a la entrada en la guerra de Irak y a la salida de Afganistán, a la situación en Cataluña hace cuatro años con la realidad a día de hoy, tras los indultos.
Pedro Sánchez ha utilizado la comparecencia final de año para lanzar un directo al mentón de Pablo Casado. En un momento en el que las relaciones del PP con la CEOE no atraviesan por sus mejores momentos, el presidente del Gobierno ha solicitado al líder del principal partido de la oposición que siga el "formidable" ejemplo de Antonio Garamendi con la reforma laboral y los 13 acuerdos en el diálogo social alcanzados y que se abra a alcanzar acuerdos con el Gobierno de coalición. Los populares ya han dejado claro que están en contra de la ley de leyes de Yolanda Díaz e, incluso, han sugerido que la llevarán al Tribunal Constitucional.