Nieve, lluvia y viento ponen en alerta a 11 CCAA, con aviso naranja en Aragón y La Rioja

11 comunidades están este lunes en alerta por lluvias, fuertes vientos y por nevadas que en puntos de Aragón y de La Rioja dejarán un espesor de hasta 20 centímetros en 24 horas, informa la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) en su página web.

Aragón tiene aviso naranja (riesgo importante) en las provincias de Teruel y Zaragoza por una acumulación de nieve de 20 centímetros por encima de los 800 metros en 24 horas; en la Ibérica zaragozana el aviso se refiere a la mitad occidental.

La Rioja ha activado también el nivel naranja en la ibérica riojana por nevadas, donde se prevén espesores de alrededor de 20 centímetros en 24 horas en una cota de nieve cercana a los 1.200 metros.

En la Comunidad de Madrid hay aviso amarillo (riesgo) por nieve de hasta 10 centímetros de espesor en la sierra con acumulaciones por encima de los 1.000 metros, y principalmente en la zona norte de la sierra; el espesor de la capa de nieve aumentará con la altitud.

En las áreas madrileñas del sur, las vegas, oeste, metropolitana y Henares se prevé una acumulación de nieve de dos centímetros en 24 horas, por encima de los 800 metros que, puntualmente, podrían descender a 600 metros.

Las comunidades de Cantabria y Asturias tienen alerta amarilla por nieve en puntos de Liébana y centro y valle de Villaverde, y en Picos de Europa, respectivamente, por nevadas que dejarán alrededor de 10 centímetros de espesor en torno a los 700-900 metros en 24 horas.

Todas las provincias de Castilla y León, salvo Zamora y Valladolid, han activado la alerta por nieve que acumulará 10 centímetros en 24 horas; Aemet alerta de que la cota de nieve comenzará sobre los 1.400 metros y podría bajar hasta los 800 o 900 metros, además, por encima de 1.300 metros se pueden superar esos 10 centímetros.

En Castilla-La Mancha, solo las provincias de Cuenca y Guadalajara mantienen el nivel amarillo por nevadas con un espesor de dos centímetros por encima de los 800 metros, principalmente en el norte y este de Guadalajara; en altitudes superiores a los 1.200-1.300 metros, el espesor alcanzado será mayor.

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EC/Agencias

En Andalucía, Islas Baleares, Galicia y en la Comunidad de Valencia hay alerta amarilla por fuertes rachas de viento, lluvias o por tormentas.

La Aemet avisa de que con la alerta naranja existe riesgo meteorológico importante, con cierto grado de peligro para las actividades usuales, y con la amarilla no existe riesgo meteorológico para la población en general, aunque sí para alguna actividad concreta.

Precaución en las carreteras

El temporal de lluvia y nieve que afectará hoy y mañana a buena parte de España ha activado las alertas también en el Ministerio de Transportes, que tiene preparadas 412 quitanieves y 57.214 toneladas de fundentes, mientras que la DGT recomienda planificar bien los viajes por carretera.

Ante la alerta meteorológica, el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma) pide que se extremen las medidas de precaución al volante y recomienda consultar la información y recomendaciones que hagan la Dirección General de Tráfico (DGT) y la Aemet.

La DGT recuerda que, antes de ponerse en viaje, es recomendable consultar el estado de las carreteras, informarse de las posibles precipitaciones que se puedan producir en la zona por la que se va a transitar y disponer de neumáticos de invierno o de cadenas.

En el caso de que los desplazamientos transcurran por las zonas con aviso naranja o amarillo por nevadas, Tráfico recuerda que se pueden acometer modificaciones en la circulación para garantizar la fluidez y la seguridad vial, como restringir la circulación de vehículos pesados, o, llegado el caso, de los vehículos que no tengan neumáticos de invierno o cadenas.

Se podría también limitar la velocidad, prohibir adelantamientos o practicar cortes preventivos en determinados puntos.

La DGT insiste en las recomendaciones habituales de cara a temporales de invierno, como prestar atención a los paneles informativos o dejar libre el carril izquierdo y circular en convoy, es decir, un coche detrás de otro, para permitir el paso de vehículos de conservación de carreteras y quitanieves.