Podemos y Chunta boicotean a Lambán con los Juegos Olímpicos de Invierno 2030

La candidatura conjunta a los Juegos Olímpicos de Invierno 2030 entre Aragón y Cataluña no ha nacido con buen pie. Al conflicto abierto entre las dos comunidades después de que el 'president', Pere Aragonès, registrase la propuesta con el nombre de 'Pirineus-Barcelona' y sin hacer mención alguna a la autonomía vecina, ahora se suma las divisiones internas en el Ejecutivo aragonés. Todo cuando el primer escollo parecía resulto después de que el presidente, Pedro Sánchez, y el responsable del Comité Olímpico Español, Alejandro Blanco, asegurasen esta semana que el proyecto se gestaría "en condiciones de igualdad" entre las dos regiones.

Así, el ambiente de optimismo que se comenzaba a respirar en Aragón tras la garantía dada por Sánchez duró pocas horas. Mientras parecía que el 'enemigo' serían los intereses nacionalistas de la Generalitat, Unidas Podemos y Chunta Aragonesista, dos de los socios de Gobierno del presidente aragonés, Javier Lambán, se rebelaron contra la candidatura, debilitando las aspiraciones de la comunidad. Consideran que los proyectos de esta envergadura no son más que un "despilfarro" y un "perjuicio medioambiental".

Los cuatro partidos que sustentan al socialista Lambán están divididos y con discrepancias casi insalvables a día de hoy. El PSOE y el Partido Aragonés aplauden el proyecto por el revulsivo que puede suponer para el Pirineo; Unidas Podemos y Chunta Aragonesista reniegan de planes faraónicos donde se despilfarra dinero público. El presidente es consciente de que deberá capear el temporal durante los próximos meses con los socios de ‘su’ izquierda mientras le da forma a una candidatura que necesita materializarse desde el punto de vista técnico y económico.

El primer 'no' a la candidatura lo pronunció el líder de Chunta Aragonesista, Joaquín Palacín. En declaraciones a este diario, explica que "existen otras prioridades en Aragón como para despilfarrar más dinero público en actuaciones de este tipo. No es ni social ni medioambientalmente sostenible". El diputado es aún más crítico con el impacto que generaría: "No es un desarrollo adecuado ni equilibrado para un territorio tan frágil como el Pirineo aragonés". Otra cuestión que apunta Palacín, en clave de estrategia política, es que la comunidad queda "relegada a un segundo plano" por embarcarse en un proyecto vinculado a la ciudad de Barcelona.

La contundencia de Chunta Aragonesista no se percibe con tanta nitidez en Unidas Podemos. La formación es contraria a los planes faraónicos que se han vinculado a las candidaturas olímpicas en los últimos años. Por esto mismo, los morados no quieren saber nada de un proyecto similar y advierten de los errores del pasado. "Los grandes proyectos sin un estudio de coste y eficacia han sido mal desarrollados y han generado deuda, perjuicio medioambiental y especulación urbanística", sostienen.

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La diputada morada y exdirectora general de Cambio Climático, hasta hace pocos días, del Gobierno aragonés, Marta de Santos, en declaraciones a este periódico, apunta: "No decimos que 'no' desde el inicio, pero tendremos que analizarlo y ver si será un proyecto sostenible. Necesitamos informes técnicos que digan que el dinero será administrado correctamente y no que termine siendo un destrozo". Eso sí, en cuestión de prioridades presupuestarias, afirma que "en una crisis sanitaria la prioridad de los servicios públicos debe ir por delante de otras inversiones que no son tan sostenibles".

Un acuerdo por consenso

La candidatura conjunta entre Aragón y Cataluña para los Juegos Olímpicos de Invierno necesitaba un aval que estuviera por encima de los intereses de cada territorio o de los políticos. Y ahí irrumpió la figura de Sánchez para darle el cariz que precisa una candidatura que, según precisó, será "en pie de igualdad" y sin agravios entre las dos autonomías. El presidente defendió esta semana, en una declaración sin preguntas, a que la iniciativa es "un proyecto de país, de Estado, para España, con dos comunidades directamente implicadas".

Este refuerzo institucional por parte del Gobierno central fue reconocido por el Partido Aragonés, el único socio del presidente Lambán que apoya con nitidez la candidatura olímpica. Según explica el diputado autonómico del PAR, Jesús Guerrero, a este diario, "este proyecto impulsará infraestructuras de interés en Aragón y el Pirineo más despoblado. Es una candidatura que impulsará la marca Aragón y el potencial de los deportes de nieve. Y estando en igualdad con Cataluña, sin menosprecios".

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Sobre las dudas que plantean Unidas Podemos y Chunta Aragonesista, fuentes del Gobierno aragonés reconocen a El Confidencial que, independientemente de la postura de cada partido, la candidatura deberá construirse con un consenso político. Desde el entorno del presidente Lambán se insiste en que las desavenencias que plantean las dos formaciones "son conocidas y se intentará que sea una candidatura de máximo consenso". Una apreciación que, según aclaran las mismas fuentes, "ya tiene un consenso suficiente para que salga adelante".

Esto quiere decir que, al margen de las discrepancias de Unidas Podemos y Chunta Aragonesista, ya hay una mayoría en el Parlamento autonómico a favor de esta candidatura (con el apoyo de PSOE, PAR, PP, Ciudadanos y Vox) y que existe un respaldo suficiente en el Gobierno por el peso parlamentario de los socialistas y el PAR respecto a la menor representación de los otros dos socios.

En esta línea se manifestó este viernes la consejera de Presidencia del Gobierno aragonés, Mayte Pérez, para afirmar que la candidatura olímpica tiene el apoyo del Gobierno central y eludió hacer mención a la diferencia de criterio de Podemos y Chunta Aragonesista. "Vamos a intentar empujar todos en la misma dirección para que pase de ser un proyecto a una realidad; si hacemos las cosas bien, es posible conseguirlo. Y con eso me quedo", sentenció Pérez.