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Los tres pinchazos telefónicos a José Luis Moreno que lo acorralan
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Informes policiales

Los tres pinchazos telefónicos a José Luis Moreno que lo acorralan

La intervención telefónica del móvil del productor de televisión pone en evidencia por completo los presuntos delitos por los que la Justicia le está investigando

Foto: José Luis Moreno, a la salida de los juzgados. (EFE)
José Luis Moreno, a la salida de los juzgados. (EFE)

En la causa que se sigue contra José Luis Moreno constan numerosos informes sobre el contenido de los pinchazos telefónicos que el juez autorizó se le hiciesen al productor de televisión. Quizá porque reconocía sentirse “intocable”, hablaba sin ningún remilgo sin percatarse de que todo lo que decía estaba siendo grabado y le puede condenar. El Confidencial ha accedido a dichos informes de los pinchazos y a las conclusiones policiales. Hay tres conversaciones que lo delatan.

PRIMERA: Beatriz, abogada y asesora, llama a José Luis Moreno

Beatriz, que lleva trabajando con el productor desde 2004, le avisa de algo que acaba de suceder: “Han llamado los del Ministerio de Cultura para decirnos que nos ha llegado un embargo preventivo de la Agencia Tributaria (…). Nos han hecho un favor porque me han permitido darles explicaciones (…) Así que mañana le darán el OK al pago para que lo puedas cobrar”. Moreno: “Es importantísimo que reciba ese dinero”. La dudas que quedan tras escuchar esta conversación son: ¿se saltó el Ministerio de Cultura el embargo preventivo de Hacienda y pagó a José Luis Moreno? ¿Avisa el Ministerio de Cultura a todos los titulares cuando recibe embargos preventivos o solo a alguien como José Luis Moreno por ser quien es?

Foto: Extractos de mensajes intercambiados por José Luis Moreno.

La conversación entre Beatriz y el productor continúa y Beatriz le explica cómo sortear el embargo de Hacienda: “Mira, si abres ahora una cuenta en ING, Hacienda no lo puede ver hasta el año siguiente cuando haga la declaración de la renta y le salga en Hacienda que el banco le ha comunicado que tú has abierto la cuenta. Al año siguiente tendremos que cambiar de cuenta y así sucesivamente hasta que lo podamos resolver (…). Los fiscalistas me han preguntado si Hacienda tiene algo más que cobrarte y les he dicho que no, al menos de lo que Hacienda tenga constancia”.

Para la Policía, tras escuchar la conversación, está claro: “Beatriz asesora a Moreno sobre el proceder con las cuentas bancarias de Moreno, para evitar que Hacienda le embargue los saldos, le indica que cada año ha de abrir una cuenta nueva y traspasar el dinero porque Hacienda no ve esa cuenta hasta el año siguiente. Además, le indica que ya les ha dicho a los fiscalistas que no le queda nada que ingresar a nivel personal de lo que pueda tener constancia Hacienda, con el único ánimo de defraudar”.

SEGUNDA: José Luis Moreno llama a Beatriz

Los dos hablan de las cuentas y del precio de los capítulos de las series y en un momento de la conversación José Luis Moreno se queja. Beatriz le responde: “Ese cuadro era para consumo interno, no para mandárselo a nadie, se lo pediste a Natalia [la sobrina de Moreno] en donde tú le decías que necesitabas saber la verdad, no la que les íbamos a pasar a ellos…”.

Foto: José Luis Moreno. (Mediaset)

La conclusión para los investigadores es evidente: “Claramente, se observa la doble contabilidad que están llevando, existen unos cuadros de gastos e ingresos reales, que son los que utilizan ellos para saber la situación económica real, y otros diseñados específicamente para reclamar más dinero del debido a Roemmers y así lucrarse más a su costa”. Tras escuchar otra conversación similar, concluyen: “Nuevamente queda patente sin ningún género de dudas que se están confeccionando, por parte de Moreno y su equipo, facturas a su antojo, incrementando los importes sin ningún criterio salvo el de poder apropiarse de la mayor cantidad de dinero posible”.

La intención de enriquecerse a costa del empresario argentino queda clara en otra conversación de José Luis Moreno con una persona de su entorno en la que le dice, tras terminar de ver un capítulo de la serie: “Está muy bien. Se ve dinero por un tubo en el capítulo, que eso para el gilipollas de Roemmers nos viene de miedo, porque la segunda parte es cuando le voy a pegar el hachazo en el undécimo. ¿Te ha parecido bien? ¿Te ha gustado? Pues ahora vas a pagar lo que vale, gilipollas”.

TERCERA: Moreno llama a Beatriz

José Luis Moreno se ha enterado de que están investigando a una conocida suya, Marta Dillet. A esta mujer le 'vendió' la empresa Cultus Opera. Moreno: “¿En calidad de qué va ella al juzgado?”. Beatriz: “De imputada, por el desfalco de los talones falsos de tu sobrino. Va a declarar el viernes”. Moreno: “Ah, vale. Los talones falsos, ¿de qué compañía?”. Beatriz: “Los talones falsos eran de dos compañías, una de Vutus Opera, que la relacionan directamente contigo, y otra por otra sociedad, no sé si de perfumes. Ella era la persona que se encargó de todos los trámites de la compraventa de Cultus Opera y se la puso de administradora y era dueña de la sociedad que a su vez te compró y fuisteis a la notaría a formalizarlo”. Luego hablan de los talones falsificados. El productor asegura que esos no los firmó su sobrino: “Eso lo hacían entre Antonio y Marta Dillet”.

Foto: EC.

Para la policía, está claro: “Es significativo cómo Moreno y Beatriz, al hablar de la supuesta venta de la sociedad Cultus Opera Producciones SL a Marta Dillet Gran, manifiestan que ellos la pusieron de administradora, cuando si la compra hubiera sido real, ese nombramiento en nada hubiera dependido de Moreno. Por otra parte, se deduce que Moreno era conocedor de la emisión de cheques falsos e incluso se diría que partícipe, puesto que tanto él como Beatriz sabían que esos cheques eran firmados tanto por Aguilera como por Marta, cuestión que deberían desconocer si no supieran que se emitían cheques falsos”.

En la causa que se sigue contra José Luis Moreno constan numerosos informes sobre el contenido de los pinchazos telefónicos que el juez autorizó se le hiciesen al productor de televisión. Quizá porque reconocía sentirse “intocable”, hablaba sin ningún remilgo sin percatarse de que todo lo que decía estaba siendo grabado y le puede condenar. El Confidencial ha accedido a dichos informes de los pinchazos y a las conclusiones policiales. Hay tres conversaciones que lo delatan.

José Luis Moreno
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