¿Se ha incumplido el objetivo del 70%? La confusión que nació del propio Gobierno

La campaña de vacunación en España es un éxito. Y el principal objetivo fijado por el Gobierno es probable que no se cumpla. Ambas afirmaciones pueden parecer contradictorias, pero no lo son. Casi todo se ha hecho bien para vacunar a 30 millones de personas en ocho meses, pero ha habido también aspectos negativos, como la falta de claridad y la contradicciones en las que ha caído el Gobierno y que ahora le pasan factura.

No sabemos cuándo acabará la pandemia, pero sí que a ese final se llegará vacunando. Cuanta más gente, mejor. Hace un año se pensaba que con el 70% de cobertura se lograría la inmunidad de rebaño y con esa idea se diseñó la estrategia europea de vacunación y se fijaron los objetivos, también en España. El problema es que ahora está claro que hará falta vacunar a un porcentaje mayor, pero los objetivos no se han modificado.

Ese quizás ha sido el mayor error del Gobierno en los últimos meses: no insistir en que el objetivo que se estableció a principios de año ya no es tan decisivo. Además, desde el comienzo de la campaña de vacunación, ha fijado varias fechas diferentes para alcanzar ese porcentaje de población vacunada, lo que ha aumentado la confusión y ha facilitado las críticas de la oposición.

Los mensajes del Gobierno

Antes de que llegaran las primeras vacunas a España, el ministro de Sanidad en aquel momento, Salvador Illa, ya habló del 70% y del final del verano de 2021. "Vamos a tardar, si todo va bien, cinco o seis meses para poder tener un porcentaje significativo de la población española y europea vacunada. En torno a 15 o 20 millones en mayo-junio y, probablemente, al final de verano estará vacunado un 70% de la población", dijo el 12 de diciembre de 2020 en una entrevista en 'Público'. Un par de semanas más tarde, justo después de que Araceli recibiera la primera dosis de la vacuna de Pfizer-BioNTech en una residencia de Guadalajara, Illa insistió en la fecha de finales del verano.

Su sucesora en el cargo, Carolina Darias, dijo en su primera rueda de prensa como ministra que mantenía el compromiso de que en verano el 70% de la población iba a estar vacunado, mensaje que repitió a finales de marzo, aunque entonces añadió que estaba por ver a qué altura del verano.

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Fue el presidente del Gobierno el que fijó la fecha para llegar a ese objetivo. "Lograremos que el 70% de la población adulta, es decir, 33 millones de españoles y españolas, esté inmunizado gracias a la vacuna a finales del mes de agosto", dijo Pedro Sánchez el 6 de abril. Lo repitió varias veces: el 70% de la población adulta, 33 millones de personas. Además, estableció cuatro hitos intermedios hasta llegar a esa cifra, tres de los cuales se han cumplido.

Pero el dato que dio el presidente del Gobierno era erróneo: el 70% de la población adulta son unos 27 millones de habitantes y no 33, que son el 70% de la población total del país. Ese mismo día, el Ministerio de Sanidad confirmó a El Confidencial que Sánchez se refería a la población total y que ese era el objetivo de la campaña de vacunación (alcanzar una cobertura del 70% entre la población adulta sí era el objetivo marcado por la Comisión Europea para este verano).

Un mes después, el mismo Sánchez modificó el plan que había anunciado. El 10 de mayo dijo que faltaban 100 días para alcanzar el 70% de vacunados, y en los siguientes días siguió con la cuenta atrás. Esos 100 días se cumplieron el 18 de agosto y España no había llegado al 70%. El último dato publicado por el ministerio indica que han recibido la pauta competa 30.565.129 personas, un 64,4% del total.

Un par de meses más tarde, a mitad de julio, cuando España había alcanzado un ritmo de vacunación de más de medio millón de dosis al día, Darias volvió a hablar de finales de agosto. Y este miércoles, celebró que se alcanzara el 70% de cobertura en la población diana, que corresponde a los mayores de 12 años (hasta mayo, esa población la componían los mayores de 16).

El 70% no es el final

Ha sido el propio Gobierno el que ha dado dos fechas diferentes. Hay motivos para recriminarle que no haya cumplido con su objetivo (o que no lo vaya a cumplir), pero no para criticar la campaña de vacunación. Muy pocos países en el mundo tienen las cifras de España. Algunas comunidades han ido más lentas que otras, pero en general el avance ha sido bastante parejo. El gran obstáculo ha sido el suministro, un problema común a todos los países de la Unión Europea y que no depende del Gobierno español ni de las comunidades.

"Llevamos semanas repitiendo que ese hito del 70% era un objetivo intermedio. La meta no está ahí (...) La inmunidad de grupo es un concepto dinámico, que depende de las variantes, de la movilidad, del ritmo de vacunación en otros países", dijo hace unas semanas la secretaria de Estado de Sanidad, Silvia Calzón. Pero ese mensaje no ha sido tan repetido como el del 70%. El Gobierno no ha explicado lo suficiente que lo que se pensaba que valía en enero no vale en agosto. La inmunidad de rebaño no se va a conseguir (si es que se consigue) a menos que se vacune a casi toda la población.

Opinión

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Hay argumentos para elogiar la gestión del Gobierno (y las comunidades) y para criticarla, pero habría que aclarar algunas cosas. Que el objetivo se haya incumplido es discutible, pues la fecha más repetida por el Ejecutivo ha sido la de finales de agosto (incluso final del verano), aunque Pedro Sánchez ha colaborado en la confusión. Y que se incumpla no tendrá apenas consecuencias, pues se llegará a ese porcentaje unos días después.

Sí que se ha vacunado al 70% de la población diana, pero esa nunca fue la meta. España no es líder mundial en vacunación, pero está entre los primeros. Llegar al 70% de vacunación no supone conseguir la inmunidad de rebaño ni acabar con la pandemia. Hay que vacunar a mucha más gente y España lo va a hacer, un éxito y a la vez también un privilegio, porque hay países que apenas han podido empezar a vacunar a su población.