El PSOE arrebata la Alcaldía de Murcia al PP al aprobar la moción con Cs y Podemos

Tras varios días de mucha tensión y elucubraciones se cumplió el guion previsto en el Ayuntamiento de Murcia. El socialista José Antonio Serrano se ha hecho con la vara de mando del consistorio en sustitución del popular José Ballesta tras prosperar la moción de censura presentada por el PSOE (9 ediles), los cuatro concejales de Ciudadanos y los dos de Podemos. En su discurso, el nuevo alcalde justificó la operación política, que se produce tras la fallida primera moción de la Asamblea Regional, por la existencia de "razones profundas", entre las que citó "contrataciones sospechosas, vacunación irregular, facturas dudosas, investigaciones judiciales y policiales, además de un gran déficit democrático". "La gestión de este Ayuntamiento hace aguas", señaló. "No todos tenemos precio, señor Ballesta, como hemos visto hace unos días en la asamblea", asestó.

La salida de Ballesta liquida 26 años de hegemonía del Partido Popular en la ciudad, que gobierna desde 1995. La moción supone un giro de 180 grados en un gabinete municipal que aupó a alcalde saliente gracias a un acuerdo entre conservadores y centristas que en dos años ha saltado por los aires por las fuertes discrepancias internas y enfrentamientos entre los socios.

"La moción de censura no es una decisión improvisada. Este anuncio debe dar un único titular, el de una gestión impecable. Tenemos la oportunidad y debemos ser valientes. No hace falta que les explique que esta herramienta está recogida en nuestra normativa, usada cuando las instituciones pierden la confianza en sus gestores. Esto es lo que nos ha unido a 15 concejales", añadió Serrano.

En su defensa, Ballesta optó por centrarse en un discurso de despedida en clave muy emocional, sin apenas reproches a los promotores de la moción, citando a autores como Antonio Machado. "Me voy sin resentimiento, ni rencor", señaló. "Mi profunda gratitud a los que han compartido conmigo esta permanente utopía del servicio a Murcia. A ellos y ellas, a los que han hecho posible este sueño y me han hecho conocer el significado último de la palabra lealtad".

Fue la portavoz popular, Rebeca Pérez, la encargada de lanzar los mensajes duros contra socialistas y naranjas, a los que acusó de pretender un "reparto obsceno de las instituciones" y de "tirar de la cadena sin pudor en un plan urdido desde la Moncloa", dijo para tildar a Ciudadanos de "partido en descomposición del que se aprovecha el PSOE más carroñero". "Este Ayuntamiento es honesto, limpio y honrado", respondió a las críticas del nuevo alcalde.

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El portavoz socialista, Enrique López insistió en acusar a los gestores salientes de irregularidades: "Murcia es un laboratorio, pero de la corrupción. Un proceso de vacunación irregular con un concejal (Felipe Coello) que se disfraza de médico, querellas, mentiras, espionaje y hasta cintas de video. Es un breve resumen de nuestro Ayuntamiento. Mancillan el buen nombre de esta tierra. Han tumbado por todos los medios cualquier propuesta e iniciativa. ¿Qué esperaban? Por dignidad, decencia y justicia, no podemos quedarnos sentados en un sillón viendo cómo nos conducen a un precipicio. Nosotros gobernaremos para todos".

Mario Gómez, líder de Ciudadanos en el consistorio y bestia negra de los populares, con los que ha roto el pacto de gobierno para propiciar la moción de censura, recordó que puso en concomiendo al alcalde saliente irregularidades en los procesos de contratación, ahora en manos de la UDEF. Sin embargo, reprochó a Ballesta que su respuesta fue por poner en marcha "una campaña de acoso brutal" contra el edil con denuncias contra él que fueron archivadas. "Ciudadanos ha elegido no formar parte de la corrupción y la podredumbre".

"Le advertimos que cesara al señor Gómez. Los murcianos, cada vez que han votado, han dicho no al socialismo y al comunismo"

Ginés Ruiz, de Podemos-Equo, tildó de deficiente la gestión popular al que acusó de arrogarse falsamente la representación de toda Murcia: "Llevo semanas oyéndoles hablar de asalto al poder, ataque a Murcia... Saben que esta herramienta es democrática y, señora Pérez, este municipio no les pertenece. tres de cada cuatro electores no votaron al PP".

"Siento vergüenza de la imagen que está dando Murcia", dijo José Ángel Antelo, de Vox, cuyos ediles votaron contra la moción. "Le advertimos que cesara al señor Gómez. Los murcianos, cada vez que han votado, han dicho no al socialismo y al comunismo".