El PP se inclina por seguir ignorando las críticas de Cayetana y ella descarta irse

Las críticas de Cayetana Álvarez de Toledo, que asegura que Pablo Casado no será capaz de reconstruir el constitucionalismo en Cataluña, no han sentado nada bien en el PP como suele ocurrir. Pero, por ahora, la decisión continúa siendo la de ignorar sus críticas y sus comentarios. Hasta el punto de que dirigentes de la cúpula popular aseguraban esta mañana no haber leído la entrevista en el diario 'El Mundo'. "Tenemos muchas más cosas encima de la mesa", decían, poco antes de que arrancara el comité ejecutivo convocado por Casado para analizar los malos resultados en Cataluña.

Un comité que quedó eclipsado por el anuncio de que el PP abandonará la sede nacional de la calle Génova de Madrid y buscará otra ubicación. El objetivo es romper de una vez por todas con el pasado ante el calendario judicial previsto para este año con un goteo de titulares continuos sobre Luis Bárcenas y la corrupción ligada a la formación durante más de tres décadas.

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Europa Press

La exportavoz parlamentaria, que asegura en la entrevista que "Casado le ha defraudado", apenas participó un día en la campaña electoral, "es el hueco que me han dejado" explicaba a este diario hace unos días, y ahora carga contra una hoja de ruta "errática" que a su juicio ha echado por tierra todo el trabajo de Alejandro Fernández y el suyo como diputada nacional por Barcelona. Según confirma a este diario, no tiene ninguna intención de dejar el escaño y advierten "que no se irá a ningún sitio". Cuando dejó de ser portavoz parlamentaria ya insistió en que se sentía en deuda con los miles de catalanes que votaron para que fuera la única representante del PP por Cataluña en el Congreso.

Fuentes del partido aseguran q este diario que el escaño es solo suyo y que la formación está limitada a las funciones que la capacitan en los estatutos y el régimen disciplinario. Para faltas "muy graves" como se consideran sus declaraciones en ese diario, ("manifestar deslealtad", "desobedecer las directrices marcadas por los órganos del partido" o "crear corrientes de opinión contrarias a los intereses del partido") pueden conllevar la suspensión de afiliación por un periodo de tiempo entre uno y cuatro años, o la expulsión del partido. Esas son las opciones que maneja el PP, aunque por ahora solo ignoran a la exportavoz.

De hecho, solo el portavoz nacional del PP, José Luis Martínez-Almeida, rechazó este martes la palabras de la exportavoz al ser preguntado a su llegada a Génova 13. "Si me pregunta si las comparto, no", zanjó sin entrar en más detalles.