Granada acumula más de 100 temblores en 13 horas tras un fuerte terremoto de 4,4

• ¿Qué está pasando en Granada con tanto terremoto?

La cadena sísimica que asola Granada estos días no da un respiro. Granada y su área metropolitana suman más de 100 temblores, casi una decena con magnitud igual o superior a 3 grados, desde que a las 19:49 horas de ayer un nuevo terremoto de 4,4 volviera a sobresaltar especialmente a los vecinos de la zona, muchos de los cuales han vuelto a pasar la noche fuera de sus casas. El Centro de Coordinación de Emergencias 112 Andalucía ha atendido este jueves casi un centenar de avisos de distintos puntos de la provincia, 64 de ellos entre las 19:00 y las 20:00 por terremotos.

Estos temblores forman parten de la serie o "enjambre" sísmico que se ha reactivado en este entorno desde que el sábado se produjera un primer terremoto de 4,4 con epicentro en Santa Fe, al que siguieron otras tres fuertes sacudidas consecutivas —de entre 4,2 y 4,4 grados— el martes por la noche y la de este jueves, también de 4,4.

Tras este seísmo de mayor importancia, que ha dejado nuevos daños materiales no estructurales y que fue ampliamente sentido por los más de 530.000 habitantes del área metropolitana granadina, se han sucedido en la zona más de 100 réplicas menores y terremotos, que se han repartido durante toda la noche y la madrugada.

Los últimos terremotos, de magnitud 3,3 y 3, han tenido lugar a primera hora de esta misma mañana, concretamente a las 8.11 y a las 8.32 horas, con epicentro en Santa Fe y en la localidad próxima de Chauchina, respectivamente.

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De momento en el 112 se han notificado incidencias por caídas de cornisas y elementos externos de edificaciones y, especialmente, grietas, como las registradas en chimeneas de las calles Alameda y Río Genil de Santa Fe y Maracena. También se han producido la caída de un termo en la calle Rubén Darío de Granada capital o la rotura de una caldera en la Plaza del Tabaco.

Protegerse en un campo de fútbol

Los municipios de Santa Fe y Atarfe han habilitado espacios públicos como parques y campos de fútbol para que los vecinos que lo deseen pueda ir, según informan las concejalías de Seguridad de ambas localidades.

Emergencias 112 Andalucía ha gestionado ya 865 avisos relacionados con los temblores de la provincia de Granada desde el pasado sábado 23 de enero y ha coordinado más de 200 incidencias, de las que en más de 75 se han constatado daños, principalmente por caídas de elementos, desprendimientos y grietas en viviendas.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha expresado en su cuenta de Twitter el apoyo a la población y los servicios de emergencias, tras varios días muy difíciles en toda la provincia: "Compartimos su angustia y su deseo de que pronto vuelva la calma".

Desde diciembre del pasado año se están registrando una serie de terremotos al noroeste de la ciudad de Granada, en el entorno de las localidades de Atarfe, Pinos Puente y Santa Fe. Se trata de terremotos superficiales, con una profundidad menor de 10 kilómetros y con magnitudes, en su mayoría, inferiores a 2,5: suelen ser sentidos por la población cuando la magnitud es mayor de 3.

La serie se ha reactivado a finales de enero de 2021 y el día 23 se registró un terremoto con magnitud de 4,4, el de mayor intensidad de esta serie hasta el momento, al noroeste de Santa Fe, que fue sentido en numerosas poblaciones y con algunos daños, aunque ninguno de carácter estructural, y una persona herida de carácter leve.

La sucesión de estos movimientos sísmicos motivó el martes 26 de enero el paso a fase de preemergencia del Plan de Emergencia ante el Riesgo Sísmico en la provincia de Granada. En esta fase, los fenómenos sísmicos se producen sin ocasionar víctimas ni daños materiales relevantes, por lo que desde un punto de vista operativo el nivel se caracteriza fundamentalmente por el seguimiento instrumental y el estudio de dichos fenómenos.

La Junta andaluza ha contactado con varias comunidades para tener medios disponibles en caso de que se diera una catástrofe. La provincia se encuentra a la espera de cómo evolucionan los temblores, con la vista puesta en 1979, cuando tuvo lugar el antecedente más parecido, con Granada viviendo una cadena de terremotos que llevó a la gente a pasar la mayoría de las noches al aire libre.