El viaje de Darias desde el 'susanismo' canario a mano derecha de Sánchez

Carolina Darias San Sebastián (Las Palmas de Gran Canaria, 1965) tomará posesión este miércoles en el Palacio de la Zarzuela de su cargo como ministra de Sanidad, departamento en el que relevará a Salvador Illa para cubrir su vacante al presentarse como candidato del PSC a las elecciones catalanas.

La máxima responsable de Sanidad ha pasado por todos los escalones de la administración, desde concejala en el consistorio de la capital grancanaria (1999-2004), hasta presidenta del Parlamento autonómico (2015-2019) y posteriormente consejera de Economía entre julio de 2019 y enero de 2020. Entre medias fue subdelegada del Gobierno en Las Palmas (2004-2008), directora de Ordenación del Territorio, Urbanismo y Vivienda del Ayuntamiento de Las Palmas (enero-mayo de 2008), delegada del Gobierno de España en el archipiélago (2008-2011) durante el Gobierno de Zapatero y portavoz de los socialistas en el Cabildo de Gran Canaria (2011-2015). Un extenso currículum político de esta licenciada en Derecho por la Universidad de La Laguna y funcionaria de carrera del Cuerpo Superior de Administradores Generales de la Administración Pública de Canarias.

Una mujer de partido que en las primarias de 2017 apoyó a Susana Díaz frente a Pedro Sánchez. Entre 2012 y 2014 formó parte, como vocal, de la ejecutiva del PSOE del ya fallecido Alfredo Pérez Rubalcaba. Según la describían sus compañeros de federación en las islas tras su nombramiento como ministra de Política Territorial, es una política "trabajadora, leal y buena gente". Alguien que también sabe entregar las armas tras perder una batalla orgánica y ponerse a su disposición. Lo demostró con Sánchez, pero ya antes con Patricia Hernández en las primarias para la candidatura del partido a la presidencia autonómica. El jefe del Ejecutivo autonómico, el socialistaÁngel Víctor Torres, la rescató para el gobierno de las islas después de que hubiera quedado fuera de las listas.

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Fogueada en la gestión del coronavirus junto a Illa, principalmente en lo relativo a la cogobernanza al formar parte junto a Illa desde el pasado mes de octubre del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud, pero también del Comité de Seguimiento del Coronavirus desde su creación en febrero del pasado año, y donde ha ido cogiendo un mayor protagonismo en las últimas semanas, la que hasta ahora era ministra de Política Territorial y Función Pública se presentaba como el relevo natural de Illa.

Este mismo lunes Pedro Sánchez presidió el comité de seguimiento del coronavirus franqueado por Illa y Darias. Si cuando el presidente del Gobierno la eligió para formar parte del Consejo de Ministros sorprendió por no aparecer en ninguna quiniela, ahora era la favorita para relevar al ministro de Sanidad. Además de haber estado implicada en la primera línea de gestión de la pandemia, también lo ha hecho en el plan de vacunación.

Cumplir con los objetivos de vacunación será su principal reto en plena tercera ola

El cumplimiento de los objetivos de vacunación será su principal reto al frente de este sensible departamento, que asume en plena tercera ola de pandemia y con varias comunidades autónomas presionando para ampliar las restricciones. No empieza de cero y hasta ahora ya se había encargado de las relaciones con las autoridades delegadas autonómicas. Durante las últimas semanas intensificó su agenda junto a Illa, con reuniones con los presidentes de Aragón o Extremadura, así como con el presidente de la FEMP.

Su estreno en calidad de máxima responsable de Sanidad se producirá este mismo miércoles en la reunión de la Interterritorial de Salud. Varias comunidades autónomas volverán a reclamar la ampliación de los toques de queda más allá de la horquilla que establece el actual decreto de estado de alarma, y que su predecesor ya se negó a consensuar. Otros territorios incluso han reclamado confinamientos domiciliarios, otras de las limitaciones que tampoco permite el texto del actual decreto, mientras que la Unión Europea pinta de rojo oscuro la mayoría de España, su nuevo código de color señalando las zonas en las que el virus está más extendido, pidiendo que no se viaje.

Al día siguiente de la interterritorial, estaba previsto que su antecesor compareciese en la comisión de Sanidad del Congreso, antes de precipitarse su dimisión, que precisamente había fijado en el inicio de la campaña electoral, que arranca la medianoche del jueves. Una comparecencia que ya ha sido eleminada de la agenda del Congreso. Se retrasa el primer examen de Darias ante el resto de grupos parlamentarios como ministra de Sanidad, tanto para dar cuenta de la situación de la pandemia como del plan de vacunación, pero la oposición ya avanza que no gozará de un periodo de cortesía ante la evolución de la pandemia.

Durante una de sus últimas intervenciones tras la celebración de comité de seguimiento del coronavirus, Darias realizó una exposición en la que situó como objetivo prioritario conseguir pronto más personas vacunadas que contagiadas para alcanzar cuanto antes la inmunización colectiva. El proceso será largo y complejo, según reconoció, pero defendió "la fortaleza de nuestro Sistema Público de Salud, porque recientemente hemos vacunado a 14 millones de personas contra la gripe en solo ocho semanas”. Entonces alertó ya de la preocupante evolución de la pandemia en esta tercera ola, que sigue disparada.