La oposición en bloque carga contra Illa por no comparecer antes de abandonar Sanidad

La Diputación Permanente del Congreso (el órgano que se reúne en periodos inhábiles como es enero) comenzó este lunes con reproches generalizados al todavía ministro de Sanidad y candidato del PSC a las elecciones catalanas, Salvador Illa, por haber anunciado que su dimisión se producirá mañana y que, por tanto, no acudirá a la comparecencia prevista en la comisión del ramo esta semana. Aún así, aprobó casi por unanimidad su comparecencia, como también la de la vicepresidenta tercera del Gobierno, Nadia Calviño, y del ministro de Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá.

Toda la oposición en bloque criticó con dureza la marcha del titular de Sanidad en plena tercera ola y cuando se registran los peores datos de contagio. “La situación sanitaria y la salud democrática en un estado de alarma hacen necesarias estas comparecencias”, aseguró la portavoz del PP, Cuca Gamarra, señalando que las cifras reales de muertos “alcanzan las 85.000, con 1.400 fallecidos en la última semana”. “No cabe desaparecer y desentenderse”, dijo la dirigente popular exigiendo que se produzcan todas las comparecencias solicitadas que afectan al presidente del Gobierno, a la vicepresidenta Carmen Calvo y a varios ministros.

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“La situación es tremenda. Es crítica. No podemos normalizar estas cifras. La vacunación se vendió como la esperanza y solo conocemos por ahora la descoordinación. ¿Es verdad que en verano estará el 70% de la población vacunada?”, se preguntó Gamarra para reprochar al ministro Illa “las trampillas” de las últimas semanas para evitar comparecer a toda costa. “Está utilizando su posición de ministro como trampolín para ser candidato a la Generalitat. Que no se dé a la fuga y nos deje solos”, zanjó.

También Vox calificó de “tomadura de pelo” a la Cámara que el cese de Illa “se produzca justo a tiempo para que no comparezca” en la comisión prevista y en vísperas de la campaña electoral, que comienza este viernes. “Lo vamos a denunciar aquí”, aseveró el portavoz, Iván Espinosa de los Monteros, a la entrada de la Diputación Permanente del Congreso.

Pero no solo la oposición de la derecha. El propio portavoz de los comuns y presidente del grupo confederal de Unidas Podemos, Jaume Asens, dejó claro que el ministro debería “aplazar” su dimisión hasta el miércoles, cuando debe tener lugar la comisión de Sanidad, para que no abandone la cartera antes de comparecer en sede parlamentaria. “Debe irse con posterioridad, es lo correcto”, insistió, asegurando que hacer lo contrario “podría dar munición” a la oposición al Gobierno: “Parece que se va por la puerta de atrás”.

En la misma línea se pronunciaron los diputados de Más País, Íñigo Errejón y Joan Baldoví, al afirmar directamente que la decisión de abandonar el ministerio antes de dar explicaciones es “poco ético”. "Está claro que no se pueden hacer bien dos cosas a la vez. Ser ministro y candidato”, pero dejar el ministerio sin antes dar explicaciones saltándose una comparecencia prevista "es prueba de que el Gobierno tiene las prioridades invertidas: primero el partido y luego el país”.

El portavoz de EH Bildu, Oskar Matute, consideró asimismo “triste” no tener "la oportunidad" de escuchar al ministro "en un contexto como el actual”. “En el Estado español parece que la razón de Estado lo puede todo, pero la razón de partido ahora ha podido más que la de Estado”, dijo el dirigente de la izquierda 'abertzale' dejando en evidencia los intereses de Illa como candidato del PSC.

También el diputado del PNV, Mikel Legarda, afeó que el ministro se saltara lo establecido en el decreto de alarma y no haber comparecido en el último mes. “Que se entienda como un reproche por haber incumplido su compromiso”, remarcó el nacionalista vasco.

En el caso de Ciudadanos, Guillermo Díaz, portavoz en la comisión de Sanidad, aseguró que no cabía no cumplir lo que dice el decreto sobre las comparecencias y se quejó de haber visto a Illa “todo el verano” comparecer en la comisión de Sanidad y ahora, en mitad del peor momento de la pandemia en esta tercera ola y con el comienzo de la campaña catalana, “no aparece para explicar nada”.

El PSOE dice que no hace falta

El diputado Guillermo Meijón fue el encargado de defender la postura del grupo socialista que, como era previsible, cerró filas con el titular de Sanidad, afirmando que las “20 comparecencias en comisión, la última en diciembre, en pleno, las ruedas de prensa y los consejos interterritoriales” son “aval más que suficiente para que la ciudadanía viera que no falta información y transparencia en la gestión de la pandemia”.

El parlamentario socialista insistió en que el compromiso de Illa fue dejar el ministerio cuando se definiera el calendario electoral, criticando a la oposición haber exigido su dimisión antes y, ahora que cumple, pidiendo su comparecencia. “Quien los entienda que los compre”, zanjó.