La defensa de Marta Ferrusola pide el archivo de la causa por "severa demencia"

La defensa de Marta Ferrusola ha jugado su última carta en el caso Pujol. En un escrito remitido al Juzgado Central de Instrucción 5 de la Audiencia Nacional, los abogados de la esposa del 'expresident' han solicitado el archivo de la causa en su contra alegando que sufre una "severa demencia". Alegan que en estas condiciones mentales y físicas no puede enfrentarse a la continuación del procedimiento abierto en su contra.

Los abogados alegan, en concreto, que a la edad de Ferrusola, que tiene 85 años, se suma un Alzheimer que ha ido avanzado en los últimos meses. Han presentado como complemento un informe de la unidad de Neurología del Hospital de la Santa Creu i Sant Pau de Barcelona en el que se asegura que padece la dolencia desde el año 2018 y que actualmente "no tiene la capacidad de juicio ni la toma de decisiones conservadas".

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Europa Press

En el escrito se señala que su estado empeoró a consecuencia de las lesiones cerebrales que le provocó un politraumatismo sufrido el pasado agosto. En el verano, una caída le produjo un fractura craneal. A eso se suma "un trastorno cognitivo grave". Indican que su lenguaje en la actualidad es poco fluido y la memoria tanto a corto como a largo plazo se encuentra muy dañada.

El informe médico destaca que la paciente no se encuentra en condiciones de poder prestar declaración ante un tribunal por incapacidad de comprensión y su presencia en un acto de estas características puede provocarle una situación de estrés y ansiedad que empeoraría aún más su actual estado.

El juez José de la Mata mandó al banquillo el pasado julio al clan al completo tras encontrar indicios de pertenencia a una organización criminal. El juez comunicó el auto de transformación en procedimiento abreviado, que da paso a que las acusaciones personadas presenten sus concretas peticiones de condena contra un total de 27 investigados, entre ellos el matrimonio.

Consideraba que la familia Pujol Ferrusola aprovechó su posición privilegiada de ascendencia en la vida política/social/económica catalana durante decenios "para acumular un patrimonio desmedido, directamente relacionado con percepciones económicas derivadas de actividades corruptas". Hace solo unos días, el entorno familiar informó que tanto Ferrusola como su marido, de 90 años, se encuentran confinados tras haber dado positivo por covid-19.