Almeida reclama más ayuda de Interior y Defensa para desbloquear Madrid

Madrid está colapsada por la borrasca Filomena. No se distingue las divisiones entre acera y carretera, el Aeropuerto de Barajas se ha cerrado hasta el domingo por la tarde, los autobuses de la EMT no pueden circular y hay cortes puntuales en Metro. Además, el peso de la nieve está quebrando las ramas de algunos árboles, con el peligro de caer sobre los viandantes. Ante esta situación, el alcalde de la capital, José Luis Martínez-Almeida, ha pedido este sábado a los ministerios de Defensa e Interior "todos los recursos de los que puedan disponer" para liberar las calles de este "tsunami de nieve".

Las comunicaciones telefónicas entre los titulares de dichos ministerios y el Ayuntamiento de Madrid son continuas. "He hablado con Margarita Robles (ministra de Defensa) y Fernando Grande-Marlaska (ministro del Interior), y he pedido que se destinen los medios necesarios para que Madrid no quede en esa situación en los próximos días", ha apuntado Almeida desde el Centro de Control de Seguridad y Emergencias.

Además, poco antes de las 17.00 horas ha recibido la llamada del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que ha puesto "a disposición de todos los madrileños el ejército y la UME", según ha confirmado el propio alcalde en su cuenta de Twitter. Sánchez también se ha puesto en contacto con los presidentes de las comunidades autónomas más afectadas por el temporal y con el presidente de la Federación Española de Municipios y Provincias, Abel Caballero. La intención es buscar la coordinación entre las administraciones para paliar cuanto antes los efectos de la borrasca.

Por otro lado, Almeida ha solicitado a la Comunidad de Madrid que ponga a disposición del Ayuntamiento los "medios suficientes" para afrontar el temporal. El alcalde necesita aunar el mayor número de dispositivos disponibles después de que el temporal haya triplicado las previsiones, acumulando un grosor de entre 50 y 60 centímetros de nieve en la capital. Se trata del temporal más intenso de los últimos 50 años.

La preocupación del alcalde es que la nieve se transforme en hielo, ya que "la situación logística de movilidad quedará muy afectada" en la capital. La previsión es que no se recobre la normalidad "hasta finales de la semana que viene", según ha apuntado en una entrevista en Telecinco. De momento, las clases ya han quedado suspendidas el lunes y el martes y se ha pedido a los empleados públicos que teletrabajen esos días, siempre y cuando desempeñen labores no esenciales.

Para evitar mayores problemas, ha pedido a los madrileños que se queden en casa. "Se corre peligro por estar en las vías públicas, hay muchos árboles que se están tronchando", ha advertido. También ha instado a los ciudadanos que tengan que salir a que no caminen por las calzadas "porque se obstaculiza el trasiego" de vehículos de los servicios de seguridad y emergencias, de los que han pedido que se haga "un uso racional".

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EFE

El Gobierno de España ha extendido esta petición a todo el territorio nacional. El ministro de Transportes, José Luis Ábalos, ha destacado la gravedad de la situación y ha demandado que los ciudadanos permanezcan en sus domicilios y eviten los desplazamientos innecesarios. Durante una rueda de prensa en la que también ha partido el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, también ha advertido de que tras las nevadas llegarán las heladas y la situación se complicará.

Por su parte, Marlaska ha negado que haya falta de entendimiento entre el Ejecutivo central y las comunidades autónomas. "No estamos pasando la pelota de unos a otros. Estamos trabajando coordinadamente, poniendo todos los medios conjuntos para satisfacer las necesidades", ha manifestado. En este sentido, ha remarcado que "hubo previsión" y que iniciaron una coordinación desde el jueves con las administraciones autonómicas y locales.

La UME, preparada para actuar

La ministra de Defensa, Margarita Robles, ha asegurado a la Agencia EFE que la Unidad Militar de Emergencias (UME) está "preparada para actuar en cualquier sitio donde sea necesario". Por el momento, hay 70 vehículos y 150 militares que ya están realizando labores de rescate y asistencia desde la tarde del viernes. "Vamos a trabajar todo el día de hoy, mañana, y el tiempo que sea necesario con la gente que sea necesaria", ha asegurado. De hecho, se esperan que en las próximas horas lleguen refuerzos desde León, Zaragoza y Sevilla.

Coordinados por la dirección de Protección Civil, su principal misión hasta el momento ha sido ayudar a liberar a los vehículos que estaban encallados en las carreteras madrileñas, con actuaciones en la A4, la A5, y la M-40, donde ayer tarde quedaron bloqueados centenares de coches ante las fuertes nevadas. Algunos de ellos llegaron a estar hasta 14 horas atrapados en la autopista. Según los últimos datos, los bomberos, la UME y la Guardia Civil han rescatado ya a los ocupantes de unos 1.300 vehículos en la comunidad de Madrid.

La UME también ha llevado máquinas quitanieves a los alrededores de centros hospitalarios como el Gómez Ulla, que estaba bloqueado, para facilitar la salida del personal sanitario que había estado prestando servicio. Según ha explicado Robles, la previsión es seguir trabajando a lo largo de todo el día de hoy y de mañana, porque, aunque pare de nevar, se espera una importante bajada de las temperaturas y habrá que tener "muchísimo cuidado" con las heladas y caídas de árboles.

Se han movilizado 1.305 equipos de quitanieves

El Gobierno de España ha informado de que se han movilizado 1.305 equipos de quitanieves en toda España y se han consumido 220.000 toneladas de fundente en solo dos días (el 30% de todo lo que se usó el año pasado). En palabras del ministro Ábalos, se trata del "dispositivo más ambicioso de la historia", aunque ha admitido que la borrasca ha superado todas las previsiones. "Sabíamos que venía fuerte, pero no podíamos prever la magnitud", ha señalado.

En estos momentos, la prioridad es despejar más de 21.000 kilómetros de carreteras en toda España, para garantizar "la movilidad del personal crítico y los servicios esenciales y el abastecimiento". Estos trabajos se centran principalmente en Madrid, Cuenca y Castellón, donde todavía hay muchas vías bloqueadas. No obstante, en muchas zonas sigue siendo recomendable el uso de cadenas y se mantienen restricciones a los vehículos pesados.

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B. Tena A. M. Rodríguez

De acuerdo con la última actualización Dirección General de Tráfico (DGT), realizada a las 14.45 horas, un total de 650 carreteras y puertos de montaña están afectados por las nevadas, de las que 136 se encuentran en una situación intransitable y de ellas 6 pertenecen a la red principal. Por ejemplo, en Madrid, la M-40 está intransitable en el enlace N-607. Suecede lo mismo en Toledo, en la CM-40 a la altura de Bargas, la TO-22 en Mocejón y la CM-42 en la capital toledana. También en la C-25 de Girona.

Además, en Madrid son necesarias las cadenas o neumáticos de nieve en todas las arterias principales de entrada y salida a la capital. También son obligatorias en Huesca en la A-22 y la A-23; en Zaragoza en la A-2, Z-32 y Z-40; en Cuenca, en la A-3, la A-31 y la A-43; en Guadalajara en la A-2; en Toledo, en la A-4, la A-40, A-42, la A-5, la AP-36, la CM-42, la R-4 y la TO-21; en Burgos y Segovia, la A-1; en Soria, la A-11, A-15, A-2 y SO-20; y Castellón la A-23.