La delicada salud de Mohamed VI lleva a Marruecos a aplazar la cumbre con España
La reunión entre los dos países había sido solicitada por Rabat y anunciada en Twitter por su primer ministro, pese a que Moncloa era reacia a celebrarla
La delicada salud del rey Mohamed VI de Marruecos, de 57 años, incitó este jueves a las autoridades marroquíes a solicitar el aplazamiento de la cumbre hispano-marroquí prevista para el 17 de diciembre, según fuentes diplomáticas en Rabat.
El monarca alauí no participa en la cumbre, pero sí recibe tradicionalmente a la delegación española que se desplaza a Rabat o, por lo menos, al presidente del Gobierno. Desde hace cinco años no se ha celebrado ninguna reunión de alto nivel (RAN), como se llaman las cumbres bilaterales hispano-marroquíes.
La cumbre había sido solicitada por Rabat, pero la petición marroquí fue acogida con reservas en la Moncloa porque se consideraba que, a causa de la pandemia, la relación con Marruecos había quedado estancada y se podrían firmar pocos acuerdos en la reunión, según indican fuentes diplomáticas. Además, la cobertura de la prensa española iba a estar centrada en la inmigración irregular, algo que no parecía deseable. El primer ministro marroquí, Saadedín el Othmani, tomó, sin embargo, la iniciativa de anunciarla unilateralmente en Twitter y la Moncloa confirmó la cita.
La Primature, sede de la jefatura del Gobierno marroquí, cambió el jueves por la tarde de parecer. Pidió a la Moncloa un aplazamiento de dos meses de la cumbre. Ambos gobiernos publicaron un comunicado conjunto en el que señalan que “la situación epidemiológica actual impide celebrar la RAN en la fecha prevista con las garantías de seguridad sanitaria que se estiman convenientes”. El Ejecutivo español no se cree el contenido del comunicado, pero lo firmó a petición de Rabat.
La delegación española que se hubiese desplazado a Rabat estaba dispuesta a someterse a un test PCR poco antes de iniciar el viaje. El tamaño de la delegación fue además recortado por la Moncloa y por eso el vicepresidente, Pablo Iglesias, que formaba inicialmente parte de ella, quedó excluido del viaje. El Gobierno español organizó a finales de noviembre una cumbre con Italia en Palma de Mallorca y, un mes antes, participó en otra reunión similar con Portugal en Guarda sin que hubiera ningún problema sanitario.
El motivo que subyace tras el aplazamiento solicitado por Rabat es la mala salud del monarca. Mohamed VI fue operado con éxito, por segunda vez, el 14 de junio, en el quirófano del palacio real de Rabat, de una arritmia cardiaca, pero ese no es su principal problema de salud. Padece una enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) de la que está siendo tratado, según fuentes europeas relacionadas con el palacio real. A la larga, la enfermedad desemboca en un enfisema pulmonar o en una bronquitis crónica.
Sus dificultades respiratorias saltan a la vista cuando pronuncia discursos salpicados de sibilancias o que interrumpe brevemente para toser. El soberano pronunció su última alocución, para conmemorar el aniversario de la Marcha Verde con la que Marruecos se adueñó del Sáhara Occidental, el 7 de noviembre en lugar del 6, como estaba inicialmente previsto. El palacio real no explicó este retraso. Ese día, tenía un aspecto demacrado ante las cámaras de televisión, como también lo tuvo el 29 de julio cuando leyó el discurso del trono. Hacía, sin embargo, un mes que había empezado sus vacaciones en Rincón, en la costa mediterránea marroquí, muy cerca de Ceuta. Desde que empezó la pandemia, el soberano alauí, que es grupo de riesgo, ha tomado muchas precauciones para evitar contagiarse.
EEUU reconoció este jueves la soberanía de Marruecos sobre el Sáhara, lo que representa un gran éxito diplomático
Mohamed VI mantuvo en las últimas horas una conversación telefónica con el presidente norteamericano, Donald Trump, según anunció el jueves un comunicado de la Casa Real. Estados Unidos reconoció este jueves la soberanía de Marruecos sobre el Sáhara Occidental, lo que representa un éxito diplomático de gran alcance. A cambio, se ha comprometido a normalizar sus relaciones con Israel.
Las cumbres bilaterales con Marruecos, y con otros países, fueron instauradas en tiempos del presidente Felipe González. Son reuniones descompensadas, porque sientan frente a frente un Gobierno como el español, que ostenta el poder ejecutivo, y otro, el marroquí, con muy poca autoridad. Cualquiera de los consejeros reales, empezando por Fouad Ali el Himma, al que la prensa marroquí describe como el virrey, manda más que los ministros. Pese a todo, las cumbres pueden tener cierto sentido cuando se desarrollan en Marruecos, porque incluyen una larga audiencia con el rey, pero no cuando se celebran en la Península. España es el único país que mantiene este tipo de reuniones con Marruecos.
La delicada salud del rey Mohamed VI de Marruecos, de 57 años, incitó este jueves a las autoridades marroquíes a solicitar el aplazamiento de la cumbre hispano-marroquí prevista para el 17 de diciembre, según fuentes diplomáticas en Rabat.