Cs dice no a los PGE: "Las contrapartidas al nacionalismo son intolerables"

Ciudadanos ya ha hecho oficial su voto a los Presupuestos Generales para 2021: será un no. Lo ha confirmado la líder del partido naranja, Inés Arrimadas, en una rueda de prensa convocada después de que el portavoz adjunto, Edmundo Bal, lo hubiera avanzado en la comisión sobre las cuentas públicas en el Congreso de los Diputados esta misma mañana.

"La tramitación de los PGE llega a su fin. Nosotros anunciamos que votaremos que no porque estos Presupuestos Generales no cumplen con los requisitos necesarios para que un partido de centro, moderado y liberal como Ciudadanos los pueda apoyar", ha arrancado Arrimadas.

"Nunca más el Gobierno podrá decir que no tenía otra opción. A muchos moderados del país se les abren los ojos"

Este es el capítulo definitivo del ultimátum que Cs tenía encima de la mesa desde el principio, cuando empezó a negociar las cuentas generales y puso como condición para su voto a favor no ceder a las exigencias de los partidos independentistas. Y en los últimos días, el partido naranja ya había advertido de que encontraría la manera de escenificar su rechazo si el Ejecutivo elegía finalmente la vía de ERC y Bildu y no accedía a cumplir sus "líneas naranjas".

"Las contrapartidas al nacionalismo son intolerables. Y nunca más el Gobierno podrá decir que no tenía otra opción. A muchos moderados del país se les abrirán los ojos gracias al trabajo de Ciudadanos", ha destacado Arrimadas.

Según la líder naranja, frente a la vía "radical" escogida finalmente por el presidente del Gobierno, había otra vía moderada que era la que le ofrecía su formación, por lo que los pactos ya confirmados de Sánchez con Bildu y ERC son "aritméticamente innecesarios y éticamente inaceptables". Sin embargo, ha explicado Arrimadas, Sánchez ha preferido "coger la mano de Otegi y Junqueras que la de un partido moderado como Cs".

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"Muchos españoles se sienten hoy huérfanos", ha asegurado en referencia también a las palabras del expresidente Felipe González, quien durante una entrevista en Onda Cero ha considerado que Bildu y ERC no son "interlocutores válidos" en estas negociaciones.

En realidad, desde que se inició la tramitación parlamentaria de enmiendas este martes, el partido de Arrimadas ha votado en contra de una mayoría de las secciones de los Presupuestos. Hay que recordar que las cuentas no se votan de una sola vez, sino que los grupos se pronuncian por capítulos en las que se discuten los detalles pormenorizados de cada partida. Previsiblemente, Cs seguirá manteniendo la misma actitud y votando no la semana que viene, aunque Arrimadas ha presumido de los logros alcanzados gracias a las negociaciones que ha estado manteniendo su formación.

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Ayer mismo Arrimadas aseguró en un acto junto al candidato a las elecciones catalanas, Carlos Carrizosa, que "cada día que pasa” Pedro Sánchez “transita un paso más por la vía de Bildu y ERC cuando todo el mundo ve que hay una vía moderada que si no la han cogido es porque no han querido". Es decir: la líder naranja ya hablaba de que el Gobierno había elegido.

La postura de Ciudadanos ha sido la de intentar pactar los Presupuestos hasta el último momento sentándose en la mesa de negociación a pesar de que las conversaciones seguían con ERC y Bildu. De hecho, Arrimadas no ha aclarado cuál ha sido el motivo final que ha desembocado en el no definitivo, pero ha asegurado que la mano del partido ha estado tendida hasta el último momento.

Entre las exigencias de Ciudadanos estaban las ayudas a fondo perdido para autónomos y pequeñas empresas y considerar baja laboral con prestación directa cuando los padres tuvieran que quedarse en casa al guardar cuarentena sus hijos. Antes exigieron que no hubiera subida de impuestos a las clases medias.

Y mientras, la negociación de los PGE sigue adelante. Hoy mismo, la vicepresidenta primera del Gobierno, Carmen Calvo, ha defendido la armonización fiscal de las comunidades autónomas, contemplado en el acuerdo de presupuestos con ERC y ha argumentado que considera lógico que haya presidentes autonómicos del PP también apoyen esta medida, que servirá para combatir la supuesta competencia desleal de regiones como Madrid, que soporta una carga fiscal más baja que el resto de comunidades del régimen general.