El juez imputa al ex jefe de Seguimientos de Asuntos Internos por la operación Kitchen

El juez de la Audiencia Nacional Manuel García Castellón ha imputado este lunes al ex jefe de la sección de Vigilancias y Seguimientos de Asuntos Internos por la operación Kitchen, el dispositivo que se puso en marcha en 2013 para robar documentación sensible al extesorero del PP Luis Bárcenas. El magistrado había citado esta mañana al inspector jefe Jesús Vicente Galán como testigo para que aclarara los seguimientos que supuestamente ordenó realizar a la mujer de Bárcenas en los meses investigados, pero tras mostrarse incapaz de justificar estas vigilancias e incurrir en contradicciones, la Fiscalía ha pedido su imputación y García Castellón ha dado luz verde a la misma, explican fuentes jurídicas presentes en la declaración.

Las dudas del juez respecto a Asuntos Internos se plasman en un auto del 3 de noviembre, cuando acordó interrogar una vez más al que fuera jefe de la unidad, Marcelino Martín Blas, como imputado. García Castellón le tomó declaración en marzo de 2019, pero desde entonces ha recopilado una serie de indicios por los que le ha citado de nuevo el próximo martes "a fin de que pueda dar explicaciones sobre las labores de vigilancia que se efectuaron desde su unidad policial". A la espera de esta declaración, la semana ha arrancado con las comparecencias como testigos de una agente que participó en los seguimientos y del jefe de la sección al que informaba, Jesús Vicente Galán, que tras contradecir la versión de su antigua subordinada, pasa ahora a encontrarse imputado.

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Fuentes jurídicas presentes en la declaración apuntan a que ella ha declarado primero y, ante las preguntas de la Fiscalía y el juez, ha asegurado que en torno al verano de 2013, Galán le ordenó desplazarse a la calle General Díaz Porlier porque una mujer supuestamente se encontraba en peligro. Una vez allí, la policía sostiene que se encontró con la esposa de Bárcenas, Rosalía Iglesias, y que tras advertir que agentes de otros operativos también estaban en el lugar, decidió entrar en El Corte Inglés para pasar inadvertida. Frente a esta versión, Galán ha mantenido después que fue el jefe de la unidad, Marcelino Martín Blas, quien le pidió que mandara a sus agentes a este calle para identificar a los conductores de un Citroën C4.

No conformes con su explicación, tanto el juez como los fiscales de Anticorrupción han comenzado a preguntar por esta supuesta orden que recibió de su superior y, a la vista de que empezaba a incurrir en contradicciones, le han recordado las consecuencias que conlleva mentir en una declaración como testigo. Pese a esta advertencia, Galán ha seguido sin dar respuestas claras sobre los seguimientos, por los que los miembros del Ministerio Público han solicitado que se proceda a su imputación para que pueda volver a comparecer con un abogado.

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El seguimiento de Asuntos Internos

La sospecha del juez respecto a Asuntos Internos se plasma en la séptima página del mencionado auto de noviembre: al ser una unidad "cuyo cometido es la investigación de agentes", considera que "debía permanecer (aparentemente) totalmente ajena" a Kitchen. La investigación, sin embargo, ha demostrado que agentes de la unidad vigilaron los movimientos de la mujer de Bárcenas en 2013, año en el que se puso en marcha el dispositivo en cuestión. Así lo demuestra la documentación presentada por Asuntos Internos ante la Audiencia Nacional en octubre, entrega que se produjo después de que el propio magistrado les solicitara en julio cualquier escrito que "pudiera relacionar a su anterior jefe, Marcelino Martín Blas, tanto con la operación Kitchen como con los hechos por él mismo denunciados".

El juez pone el foco en Martín Blas, que se erige como uno de los mayores enemigos de Villarejo y se presenta como víctima de los tejemanejes del comisario en otras investigaciones del caso. Tras la documentación entregada en octubre, García-Castellón indaga en la presencia de "un vehículo asignado a la Unidad de Asuntos Internos" en las inmediaciones de uno de los inmuebles que se relacionan con Bárcenas el 25 de julio de 2013: "La existencia de este vehículo permite inferir que funcionarios policiales adscritos a la Unidad de Asuntos Internos, cuando esta estaba bajo la jefatura de Marcelino Martín Blas, realizaron labores de vigilancia en un inmueble relacionado con Rosalía Iglesias, la esposa del Sr. Bárcenas, cometido totalmente ajeno a la función de la Unidad de Asuntos Internos", explica.

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Con esta incógnita en el aire, se llevaron a cabo unas diligencias para identificar a los policías que conducían el vehículo ese día, llegando entonces hasta la agente a la que se ha citado este lunes como testigo. Más allá de lo mantenido en la Audiencia Nacional, la policía ya declaró sobre esta cuestión el 27 de octubre en sede policial: "Sí recuerda haber participado en labores de vigilancia y seguimiento relacionadas con Rosalía Iglesias". "Los citados servicios eran encomendados por el jefe de sección de Vigilancias (...), que era la persona a la que informaba". "Recuerda haber efectuado en aquella época un seguimiento a Rosalía Iglesias, que condujo hasta un mercado próximo acompañada de otra mujer". "Recuerda haber efectuado una vigilancia en torno al domicilio de Rosalía y Luis Bárcenas (...), en la que detectó a otro funcionario efectuando una vigilancia sobre el mismo portal. Eso le llamó la atención y cree que también el otro funcionario detectó su presencia".

Tras advertir al jefe de sección de su encontronazo con otro agente, este "le confirmó más tarde que se trataba de un policía profesional y que entró en turno de tarde, relevando a otros compañeros de la sección de Vigilancias que trabajaron en el mismo operativo durante la mañana". "Finalmente, puede recordar que la sección de Vigilancias y Seguimientos de esta unidad se encargó de trasladar a Rosalía Iglesias desde la Audiencia Nacional un día que declaró en sede judicial hasta fuera de dichas dependencias, no sabe el lugar exacto, ya que ella no viajaba en el vehículo con Rosalía". "Este [último] servicio lo dirigió el inspector jefe de la sección de Vigilancias y también estaba al corriente el entonces jefe de la unidad [Marcelino Martín Blas]", concluye la declaración que prestó en sede policial.

Con esta versión como telón de fondo, el magistrado acordó citar como testigos tanto a la agente como al entonces jefe de Vigilancias de Asuntos Internos, que ahora pasa a encontrarse imputado. La decisión llega dos días antes de que declare el que fuera su jefe, Marcelino Martín Blas, sobre estos seguimientos a la mujer de Bárcenas. Tras más de dos años de pesquisas, los investigadores sitúan la cúpula policial del Gobierno de Mariano Rajoy en el centro de la operación Kitchen, sospecha de la que no se libra Asuntos Internos.

La ronda de declaraciones de este lunes incluyó el interrogatorio al ciudadano alemán Oliver Zugel, que figura en algunos informes policiales como sospechoso de estar ayudando como testaferro a ocultar o mover el dinero de los Bárcenas. El testigo ha asegurado que esas afirmaciones partieron de su exmujer y fueron fruto de una venganza personal y ha indicado que nunca conoció al extesorero ni tuvo vínculo alguno con él o su entorno.