El coronel Pérez de los Cobos se desmarca de los pagos a Kitchen con fondos reservados

El coronel de la Guardia Civil Diego Pérez de los Cobos se desentendió este lunes del uso de fondos reservados del ministerio de Interior para pagar la operación Kitchen, el dispositivo que se puso en marcha en 2013 para robar documentación sensible al extesorero del PP Luis Bárcenas. El coronel compareció como testigo ante el juez de la Audiencia Nacional Manuel García Castellón y, ante las preguntas sobre su etapa como director del Gabinete de Coordinación y Estudios de la Secretaría de Estado de Seguridad, cargo que ocupaba cuando se produjo la operación investigada, aseguró que nunca fue informado sobre la misma y que desconoce los pagos que se hicieron a confidentes del entorno de Bárcenas con ese fin, explican fuentes jurídicas presentes en la declaración.

En una comparecencia que los presentes describen como "muy técnica", De los Cobos ha detallado el sistema de uso de los fondos reservados. Seis millones en total sobre cuyo destino desconocía los detalles salvo en contadas ocasiones. La Kitchen no fue una de ellas.

Entre los 'topos' que la organización del comisario José Manuel Villarejo captó en el entorno del extesorero, destaca el que fuera su chófer, Sergio Ríos, que llegó a cobrar 2.000 euros mensuales a cargo de los fondos reservados por espiarle. El exsecretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez, firmó los documentos con los que se daba luz verde a esta salida de dinero, pero, en su declaración como imputado ante la Audiencia Nacional, aseguró que los pagos en cuestión venían avalados por otros miembros de Interior. En un intento de aclarar este punto, el magistrado García Castellón citó como testigo a Pérez de los Cobos, pero las fuentes consultadas apuntan a que su comparecencia no ha servido para aclarar la incógnita: el coronel asegura que desconocía la puesta en marcha de la operación Kitchen.

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Con esta versión, Pérez de los Cobos deja en el aire las contradicciones entre Martínez y el exministro del Interior, Jorge Fernández Díaz. El primero asegura que el que fuera su jefe se interesó por conocer los 'topos' que la Policía manejaba en el entorno de Bárcenas desde el primer momento, mientras que el segundo lo niega y sostiene que no enteró de la existencia de esta operación hasta que se publicó en prensa. El 13 de noviembre, el juez ordenó celebrar un careo entre ambos para tratar de llegar a una conclusión, pero ninguno de ellos cedió terreno y, por momentos, la comparecencia se convirtió en un ajuste de cuentas entre ambos: "Has hablado con media España y luego me has insultado", llegó a echarle en cara Fernández Díaz al que fuera su antiguo número dos.

El juez instructor Manuel García Castellón fijó la comparecencia precisamente tras oír a Martínez, que señaló en su declaración que Pérez de los Cobos era el responsable de la contabilidad y el destino de los fondos reservados. Consideró imprescindible escucharle, dado que la operación Kitchen presuntamente se sufragó con estos fondos. Sin embargo, el coronel no ha podido ofrecer detalle ni sobre la presunta operación policial irregular ni sobre el dinero destinado al chófer de Bárcenas, Sergio Ríos.

Ríos —que declarará a petición propia este miércoles— habría cobrado la cantidad de 2.000 euros al mes por sus servicios de confidente según los recibos encontrados en el registro del domicilio del comisario jubilado y en prisión preventiva José Manuel Villarejo. La comparecencia de Pérez de los Cobos estaba inicialmente prevista el pasado 17 de noviembre, pero, por motivos de agenda del juez García-Castellón, se trasladó al lunes 23 de noviembre, coincidiendo con otros testigos señalados para este día en el marco de la pieza 7 del caso 'Tándem', como la de Oliver Zugel.