Arrimadas confirma a Sánchez su voluntad de negociar ya "unos PGE moderados"

Inés Arrimadas mantuvo su primera reunión con el presidente del Gobierno en Moncloa este miércoles. Al encuentro, que se prolongó durante más de dos horas, la líder de Ciudadanos llegó “con el ánimo de arrimar el hombro” y “convencida de que es momento de ser responsables”. Por eso pidió a Pedro Sánchez, “y lo hago extensible al resto de actores políticos”, iniciar “una tregua política para España”, “para estar a la altura de los españoles”, conscientes de que “las decisiones que se tomen y los Presupuestos que aprobemos condicionarán a las próximas generaciones”.

Sin dejar de repetir “las dificultades” de su partido para entenderse con este Gobierno —“creemos que ha hecho muchas cosas mal y nos preocupa especialmente la gestión de esta segunda ola, pero estamos a tiempo de revertirlo”—, la líder de Ciudadanos le confirmó al presidente “una voluntad firme y real” de sentarse a negociar los próximos Presupuestos Generales del Estado. “Tienen que llegar de Europa decenas de millones de euros en fondos, y necesitamos unas cuentas para ejecutar las ayudas correctamente. No son unos Presupuestos normales, son excepcionales, y queremos que sean moderados y sensatos”, zanjó.

A pesar de que no se han designado los equipos ni se ha fijado un calendario concreto, Arrimadas afirmó “que no hay tiempo que perder” y sí reconoció haber visto predisposición en el presidente para que las cuentas públicas “sean negociadas con Ciudadanos”. “Y el presidente Sánchez sabe cuál es nuestro modelo y nuestras principales reivindicaciones”, defendió, en clara alusión a los vetos que se sucedieron en Podemos para que el partido naranja no estuviera en la negociación, y que han ido relajando.

Sobre la posibilidad de negociar directamente con Podemos (un secretario de Estado dependiente de Pablo Iglesias acompañará a la ministra de Hacienda en el equipo negociador), Arrimadas reconoció que no es un escenario ideal, “creo que responde a luchas internas”, pero confirmó que si se produce un encuentro con los morados, servirá “para decirles en persona que es mejor esta vía a que los Presupuestos se los acaben repartiendo con Otegi y Rufián”.

Además de la negociación presupuestaria, Arrimadas planteó al presidente “algunas cuestiones a corto plazo”, entre las que está que el Ejecutivo “asuma la coordinación de las 17 comunidades autónomas y el liderazgo” en la vuelta al colegio. “Que las familias no estén intranquilas tiene que ser la prioridad”, repitió la líder de Ciudadanos, poniendo el foco en un plan de conciliación que aclare qué ocurrirá en las casas donde los niños tengan que guardar una cuarentena a causa del virus. La extensión de los ERTE más allá del 30 de septiembre fue otro de los asuntos a tratar. Ciudadanos ya negoció que se alargaran más allá del estado de alarma y ahora reclama que, al menos, en algunos sectores se extiendan a final de año.

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Arrimadas insistió en que, en “mitad de la pandemia y la desesperación de muchos trabajadores”, los ciudadanos no pueden seguir encontrando “las mismas discusiones y enfrentamientos” y sentir “hastío” cada vez que escuchan un debate político. Aseguró que si siempre había sido necesario llegar a acuerdos entre distintos grupos políticos, “ahora es una obligación”, y puso en valor el papel que su formación ha ido ejerciendo en estos meses. “Hemos sido desde el principio un partido responsable, serio, constructivo y crítico, porque el Gobierno nos ha dado muchos motivos, pero seguiremos tendiendo la mano y les anuncio que lo vamos a seguir haciendo”, dijo para anunciar la voluntad de la negociación presupuestaria.

La tregua política, que mencionó en distintas ocasiones mirando de reojo al PP, también fue dirigida al propio presidente del Gobierno y a algunos choques que se han producido con las autonomías en los últimos días, especialmente con Madrid, donde gobiernan en coalición PP y Cs.