De Huesca a Zaragoza: el esfuerzo en los test no frena el coronavirus en Aragón

Casi mes y medio después de que Aragón retrocediera a cuatro comarcas oscenses a la fase 2 para controlar los brotes de covid-19, la situación en la región no ha mejorado. Al contrario, el foco se ha desplazado de Huesca a Zaragoza, un entorno urbano más difícil de controlar y los datos son cada vez peores. Este domingo, la Consejería de Sanidad comunicó 620 nuevos casos y añadió otros 649 a la serie. Más de 1.200 nuevos casos notificados solo en un día. El presidente, Javier Lambán, descarta de momento confinar la capital para frenar los contagios.

Esos 620 casos son la cifra más alta notificada por Aragón desde el inicio de la pandemia. En la primera ola, el pico fueron los 266 del 29 de marzo. Desde el Ministerio de Sanidad destacan el esfuerzo que está haciendo la comunidad desde hace más de un mes. Tomó medidas en Huesca pronto y ha aumentado su capacidad de realizar test PCR. Pero los datos siguen empeorando. Y la mejor detección, una gran diferencia con lo peor de la pandemia, no es la única explicación. Existe transmisión comunitaria en varias zonas de la comunidad, lo que quiere decir que el virus no está controlado. El último informe de Sanidad situaba la incidencia en 14 días en la comunidad en 380 casos por cada 100.000 habitantes.

Zaragoza, foco del covid-19

El 22 de junio, tres comarcas de Huesca retrocedieron a la fase 2. Ese día, Aragón notificó 33 nuevos casos, de los que 29 eran en esa provincia. Mes y medio después, la situación sigue siendo grave, pero va a mejor: el 30 de julio hubo 101 casos, cuando ocho días antes había habido 356. Según los últimos datos del panel del Instituto de Salud Carlos III, la incidencia va a la baja en Huesca. Pero está en aumento en Zaragoza. La capital aragonesa y su zona de influencia llevan diez días en una fase 2 no flexibilizada, con recomendación a la población de no salir de la ciudad y limitación de las reuniones sociales.

La mayor parte de los casos detectados son asintomáticos o presintomáticos, que en su mayoría no desarrollan síntomas graves. Pero la curva de hospitalizaciones, que va con unas semanas de retraso a la de positivos, también está empezando a subir. En los tres últimos días con cifras disponibles (28, 29 y 30 de julio) ingresaron en hospitales aragoneses 161 pacientes, seis de ellos en la UCI. La presión hospitalaria sigue siendo baja y no es comparable a marzo y abril, pero va en aumento.

Una tasa de positividad elevada

A 30 de julio, Aragón era la comunidad con la tasa de positividad más alta: un 18,4% de las PCR realizadas en la semana anterior a esa fecha habían dado positivo, según los datos publicados por el Ministerio de Sanidad. En esa semana, la región realizó 15.656 pruebas, poco más de 2.000 al día. Ante la necesidad de aumentar la capacidad, la Consejería de Sanidad ha llegado a un acuerdo con un laboratorio privado y ha comprado una nueva máquina para el Hospital San Jorge de Huesca, informó 'El Heraldo de Aragón'. Eso le ha permitido elevar el número de pruebas diarias a casi las 3.000.

Pero la positividad sigue en aumento. Solo el sábado realizó 2.700 PCR, de las que 620 dieron positivo. Una tasa de positividad de casi el 23% A los que hay que sumar otros 649 de días anteriores que aún no se habían sumado. "El total de muestras analizadas al que se corresponden los 1.269 positivos es de 5.450 PCR", explicó la consejería en un comunicado. La tasa de positividad es prácticamente la misma: 23,3%.