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Las 4.300 muertes sin inscribir de Barcelona, centro del colapso de los registros civiles
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actualización en las cifras del momo

Las 4.300 muertes sin inscribir de Barcelona, centro del colapso de los registros civiles

En lo peor de la pandemia, el Registro Civil de la segunda ciudad más grande de España solo contó con uno de sus tres juzgados activo y únicamente tres funcionarios

Foto: Durante la pandemia, se han expedido licencias de enterramiento sin el certificado de fallecimiento. (Reuters)
Durante la pandemia, se han expedido licencias de enterramiento sin el certificado de fallecimiento. (Reuters)

A la espera de las estadísticas del INE, la mejor herramienta que tenemos para contabilizar casi en tiempo real cuántos fallecidos ha habido durante la pandemia del covid-19 es el MoMo. Pero hasta ese sistema de vigilancia de la mortalidad diaria se ha visto sobrepasado en los últimos meses. Sus cálculos dependen de los datos de los registros civiles que le proporciona el Ministerio de Justicia. Y durante lo peor de la crisis sanitaria, muchos registros aplazaron las inscripciones de los expedientes de defunción por falta de personal. Quizás en ninguno la situación fue tan grave como en el de Barcelona, donde llegó a haber unos 4.300 expedientes sin inscribir.

Este miércoles, el MoMo elevó el exceso de mortalidad a 43.000 muertes, 12.000 más que su anterior cálculo. Son 12.000 muertes que se suman de un día para otro, pero que en su mayoría se produjeron en marzo y abril. No se incluyeron en Inforeg, el programa que utilizan los registros, hasta mayo, cuando el descenso en la carga de trabajo y el refuerzo del personal permitieron realizar las inscripciones atrasadas. El impacto en las cifras ha sido enorme.

Lo aclara el MoMo y no está de más repetirlo: el sistema monitoriza las muertes por todas las causas. Eso quiere decir que esos 43.000 fallecimientos no se han debido solo al covid-19, aunque es evidente que la enfermedad es la principal responsable. La cifra oficial de muertos por coronavirus, 27.118 a 27 de mayo, no refleja la realidad de la pandemia, pues solo se refiere a los fallecidos que habían dado positivo en una prueba PCR.

Según los datos publicados por el MoMo, hay cuatro comunidades cuyos datos han variado de manera notable: Cataluña, Madrid, Andalucía y Castilla-La Mancha. Cataluña suma más muertes que esas tres comunidades juntas en la última actualización. Entre la cifra que daba el MoMo el 20 de mayo (14.132) y la de este miércoles (21.514), hay 7.382 de diferencia. Y gran parte corresponden a la ciudad de Barcelona. Durante casi dos meses, casi todos los datos de fallecimientos de la segunda ciudad más grande de España no estaban incluidos en la cifra de exceso de mortalidad que daba el MoMo.

Solo tres funcionarios para toda Barcelona

La falta de personal provocó el colapso en el registro de la capital catalana. "En la ciudad de Barcelona, el Registro Civil consta habitualmente de tres juzgados, pero en la situación actual se rebajó a un juzgado con tres funcionarios (de acuerdo a los servicios mínimos acordados por el Departament de Justícia encargado de dotar de personal a los juzgados)", confirmó el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) a este medio.

"Debido al gran volumen de fallecimientos que se han producido en Barcelona, el Registro Civil de la ciudad no estuvo al día y durante varias semanas se tuvieron que expedir licencias de enterramiento sin disponer del certificado de fallecimiento, que no era esencial, según el real decreto. Los tres funcionarios que se encuentran en el registro tramitan las licencias de incineración y/o enterramiento como prioridad (por cuestiones sanitarias, al no disponer de espacios suficientes donde los cuerpos puedan reposar a la espera del certificado), los matrimonios 'in articulo mortis' y los nacimientos se registran posponiendo el certificado y el libro de familia".

El 11 de mayo, la comisión ejecutiva de la Comisión de Seguimiento de la crisis ocasionada por el covid-19 amplió el horario del registro a petición de los propios funcionarios. Y unos días después, amplió la plantilla de tres a 40 funcionarios (20 por la mañana y 20 por la tarde). "Los que trabajan por la mañana consiguen tramitar los servicios esenciales de cada día, mientras que los de por la tarde adelantan los registros pendientes", explicó el TSJC.

Durante la pandemia, el Ministerio de Justicia abrió otro canal de comunicación. En una instrucción del 4 de abril, la Dirección General de Seguridad Jurídica y Fe Pública ordenó a todos los registros, "tanto exclusivos como con competencias en otras materias", remitirle a diario por correo electrónico "una relación en la que conste el número de defunciones que han tenido acceso al registro, número de licencias de enterramiento que se han concedido, y el lugar de la defunción, especificando la localidad y si la misma se ha producido en un hospital, residencia o vivienda habitual". Desde el día 13, la comunicación pasó a hacerse a través de un formulario. Esos datos, aclaran fuentes de Justicia, no se pusieron a disposición de las autoridades sanitarias.

placeholder Acta de la Comisión de Seguimiento para el covid-19 de 11-05-2020.
Acta de la Comisión de Seguimiento para el covid-19 de 11-05-2020.

Un retraso no detectado en casi dos meses

Los problemas del registro de Barcelona se conocían, como mínimo, desde el 21 de abril, pero el MoMo afirma que no los detectó hasta casi tres semanas después. La primera referencia concreta en sus informes (antes hubo alguna sobre la comunidad) es del 10 de mayo. "Cabe destacar que desde el 12 de marzo —decía el informe de ese día—, se han notificado 16 defunciones desde los registros civiles, del municipio de Barcelona, que el sistema MoMo contabiliza como 333 defunciones observadas por la corrección por retraso. La mortalidad esperada desde tal fecha hasta el día actual es de 2.490. Teniendo en cuenta el periodo de exceso generalizado, se estima que se está infraestimando notablemente la mortalidad observada en este municipio y, por tanto, en su comunidad".

"Hay varios números en el párrafo justo anterior", explicó el martes a El Confidencial la epidemióloga Amparo Larrauri, del Grupo de Vigilancia de Gripe del Instituto de Salud Carlos III. "Dice así: Cabe destacar que desde el 12 de marzo, se han notificado N defunciones desde el Registro Civil del municipio de Barcelona, que el sistema MoMo contabiliza D defunciones observadas por la corrección por retraso. La mortalidad esperada desde tal fecha hasta el día actual es de E. Lo que quiere decir que, en la fecha en la que se emitió el informe, para Barcelona solo se estaban teniendo en cuenta D defunciones. Este número siempre es más alto que N por la corrección por retraso. Pero como era significativamente menor que E, podemos estimar que existe esa infranotificación".

"La infranotificación desde los registros civiles ha estado presente durante la pandemia de covid-19 de forma heterogénea en muchos municipios"

"Desde el fin de semana del 16 de mayo, estamos empezando a recibir las defunciones que faltan en Barcelona. La infranotificación desde los registros civiles ha estado presente durante la pandemia de covid-19 de forma heterogénea en muchos municipios y se está trabajando en su corrección desde el principio de la misma. En la actualidad, tenemos una serie más o menos completa desde principios de mes", siguió Larrauri. "Estos días, estamos trabajando en introducir en el sistema de MoMo las defunciones con mucho retraso (las de Barcelona, ocurridas antes del 1 de mayo, entre ellas, pero también las que pueda haber en otros municipios). Prevemos tener a lo largo de la semana esta información en el sistema".

De ese trabajo de actualización sale la cifra del miércoles, bastante más alta que su anterior estimación. En su web, el MoMo advierte de que los datos con los que trabaja tienen retrasos, aunque también que en siete días suelen estar corregidos. Ese plazo ha saltado por los aires durante la pandemia por la situación de algunos registros civiles.

A la espera de las estadísticas del INE, la mejor herramienta que tenemos para contabilizar casi en tiempo real cuántos fallecidos ha habido durante la pandemia del covid-19 es el MoMo. Pero hasta ese sistema de vigilancia de la mortalidad diaria se ha visto sobrepasado en los últimos meses. Sus cálculos dependen de los datos de los registros civiles que le proporciona el Ministerio de Justicia. Y durante lo peor de la crisis sanitaria, muchos registros aplazaron las inscripciones de los expedientes de defunción por falta de personal. Quizás en ninguno la situación fue tan grave como en el de Barcelona, donde llegó a haber unos 4.300 expedientes sin inscribir.

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